•둘째•

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Jimin estaba molesto, muy molesto. Estaba odiando a cada segundo que pasaba el haber asistido a ésa estúpida fiesta. ¿La razón?

Muy sencilla, su mejor amigo lo estaba dejando completamente de lado por una tonta Omega. ¡Eso no era justo! Se supone que vivieron juntos y ahora él lo abandona por andar coqueteando con alguien más.

Se sentía extraño...¿En qué momento eso empezó a importar? Normalmente él también iría a buscar a alguien con quien pasar el rato y, al cabo de unas horas, nuevamente volverían a ser sólo ellos. Pero ahora no podía evitarlo, la sensación de sentirse rechazado, ignorado y hasta incluso reemplazado hacía que su lobo estuviese triste.

Los veía hablar animadamente, tan cerca el uno del otro. Yoongi ni siquiera se dignaba a alzar la vista hacia él que estaba sentado, mirándolos con un puchero en los labios y los brazos cruzados. La chica paseó sus dedos por el pecho de su Hyung y él rió, acariciando sus costados.

— Mío... - El gruñido había salido de su garganta pero no era de él... Jimin se sorprendió. Su Omega casi nunca hacía cosas como ésa y mucho menos le gruñía a nadie.

Lo que más le dejó sorprendido fue la palabra que mencionó. ¿Por qué reclamó a Yoongi como suyo? Aquello lo descolocó completamente porque él no gustaba de su mejor amigo y tampoco era su pareja destinada.

Porque sí... Jimin sigue creyendo fielmente en que su destinado está por ahí, en alguna parte del mundo.

— ¡Minnie! - El aroma cítrico de TaeHyung le hizo arrugar la nariz. Nunca fue muy fan del aroma de su compañero, ni el del alfa de su Hyung Jin o cualquier otro. Algunos eran soportables, como el de Tae, pero había otros que lo obligaban a alejarse... Y sólo uno en todo el mundo era el que le gustaba - ¿Dónde está Suga Hyung?

— Allá - Apuntó hacia la animada pareja y soltó un bufido. Taehyung sonrió, era tan obvio que el mayor estaba muriendo de celos... Se preguntaba cómo es que su búsqueda por su alma gemela le había cegado tanto como para no ver que estaba en frente de él.

— ¿Por qué estás tan tenso y gruñendo así? ¿Acaso te molesta que Hyung esté con alguien más? - Jimin no respondió al instante, se lo pensó. ¿De verdad le molestaba verlo con alguien más que no sea él mismo?

Se planteó las veces en las que él mismo llegaba de improviso a la casa de su mejor amigo y empezaba a soltar feromonas por todas partes, desde la cama de Yoongi hasta su ropa por el simple hecho de que Yoongi y su pareja estaban ahí. Casi siempre lograba que se fueran y sólo decía que era divertido molestarlos.

Le gustaba que el mayor lo abrazara y también dormir a su lado, oler su aroma y escuchar su voz ronca contándole historias absurda que el mayor se intentaba cuando no podía dormir. Prefería mil veces la comida de su Hyung antes que la de su madre,¡Y eso que su mamá era una cocinera fabulosa!

No importa a dónde vaya, con quién o cuándo iba a volver, siempre quería llevarse a Yoongi con él y si no iba, se la pasaban hablando por horas en vez de él estar haciendo alguna otra cosa divertida.

¿Y si de verdad le gustaba su mayor? ¿Cómo es eso posible? Su mejor amigo no es su pareja destinada porque él no sintió aquello que, según los libros y algunas personas, sientes cuando encuentras a tu alma gemela. Entonces no podía ser... Quizás sea un simple gusto, nada más.

— ¡Hyung! - Ni él mismo fue consciente de sus acciones cuando ya se había colgado del hombro de su mejor amigo.

— Hola, Jimin - Le sonrió - Quiero presentarte a YungSun - La chica le saludó con una sonrisa y Jimin sólo dió un asentimiento, a su lobo no le caía bien y entonces a él tampoco - Ella es mi novia... - Y Bom, la bomba había caído abruptamente y le había explotado en la cara.

— ¿Qué...? - El menor jamás había experimentado aquel sentimiento agrio y pesado que empezaba en su pecho y terminaba en su garganta. Se soltó del mayor y empezó a caminar hacia afuera... Necesitaba aire, se sentía ahogado, oprimidos, dolido.

Parecía que las lágrimas se amontonaban en sus ojos y sólo quería gritar. No lo entendía pero aún así dolía, dolía mucho.

— Jimin,¡Jimin! - Yoongi salió corriendo detrás de él. Lo alcanzó cuando ya estaban fuera de la casa - ¿Puedes detenerte y decirme qué diablos te sucede? - Lo tomó del brazo y lo obligó a darle la cara - ¿Jimin? - No comprendía porque estaba con los ojos llenos de lágrimas.

— ¿Por qué no me lo dijiste antes?

— ¿Desde cuándo importa en qué momento te lo diga? - No lo sabía, ni Jimin sabía porqué preguntaba eso o porqué necesitaba desesperadamente escuchar de sus labios que era una absoluta mentira.

— ¡Desde siempre! ¡Eres mi Maldito mejor amigo! ¡Se supone que todo nos lo contamos! - Lo empujó, una y otra vez, las lágrimas empezaron a caer y Yoongi sólo se sentía más confundido a cada segundo. Cosas como éstas jamás pasaban.

— ¡Basta, Jimin! ¡Deja de golpearme, Maldición! - Lo sostuvo de sus muñecas, y también empezó a gritar sobre la voz del menor, haciendo que calle - ¡No armes un teatro por algo tan estúpido como esto! ¿Acaso tomaste demás? ¡YungSun es mi novia y ahora lo sabes!

— ¡No, no le acepto! ¡No puedes estar con ella! - Negó una y otra vez.

— ¡Que seas mi mejor amigo no te da derecho a decirme lo que debo hacer! ¡Ella es mi novia y tendrás que aprender a vivir con eso! - Estaba molesto, no se esperaba aquella actitud tan infantil de Jimin cuando él tuvo que callarse tantas veces... Y peor aún, callar sus sentimientos.

— ¡No la amas! - Siguió insistiendo. Muchas personas que venía a la fiesta se quedaron observando la pelea que jamás pensaron que verían entre los mejores amigos - ¿Por qué ella? - ¿Por qué no yo? - ¿Por qué alguien que no amas? - TaeHyung y Chanyeol salieron a ver qué demonios pasaba que la gente estaba tan pendiente afuera.

— ¡Porque la persona que realmente amo no siente lo mismo que yo! ¡Porque no estamos destinados! - Jimin se paralizó - La persona que amo no siente lo mismo que yo llevo latiendo en el pecho desde el momento en que su madre llegó a mi casa con un mocoso entre sus brazos que me albortó por completo el corazón. Ésa persona que sé que está esperando a alguien mejor,¡Y ése alguien no soy yo, Park Jimin! - Jimin dejó de llorar y ahora era el mayor el que lloraba.

— Yo...

— No... No quiero escucharlo. Lo he aceptado hace años pero jamás estaré preparado para escucharlo de tus labios - Lo soltó y bajó la cabeza - Tal vez ella no sea la persona que amo... Pero al menos es la única persona que acepta estar conmigo - Alzó la cabeza y sus miradas contestaron - ¿Crees que no estaría contigo si tan sólo tú me quisieras? - Rió, más con amargura que con diversión - Pero no estamos destinados,¿No es así, Jimin? No soy el alfa que estás esperando... - Yoongi simplemente se fue.

YungSun salió detrás de él y justo cuando llegó a dónde Jimin, se detuvo.

— Si tan sólo pudieras darte cuenta de lo que realmente sientes... Ninguno de los dos estaría en ésta situación y él sería feliz, los dos lo serían - La Omega se fue, con todo el pesar del mundo.

— Jimin... - TaeHyung se acercó, Jimin retrocedió pero sus piernas fallaron. El alfa lo atrapó justo antes de tocar suelo. Y ahí las lágrimas volvieron a caer...


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Creo que me encanta ésta historia XD. Así que la alargaré a cinco capítulos.

We are not destined •••YOONMIN••• |OMEGAVERSE|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora