•Des c o n e c t a d o s• kookmin

Capítulo IV

Inmediatamente todos se levantaron y haciendo el saludo militar recibieron al instructor Namjoon quien estaba acompañado por el director Seok-Jin. Caminaron por todo el salón observando a cada soldado, hasta que llegaron al lugar de la pelea.

Jimin mantenía su rostro de preocupación, ya que por él se había originado la pelea. Si hubiera detenido a Kai sin haber involucrado a los demás todo hubiera sido diferente. Por lo menos era lo que pensaba.

Taehyung, Kai y ChanYeol estaban completamente golpeados y ensangrentados. ChanYeol al ver que el pelinegro estaba perdiendo se unió a la pelea para defenderlo, no le importaba enfrentar a su mejor amigo; Kai. Todo lo hacía por Jimin.

Sehun solamente estaba sin palabras, imaginando el castigo que se llevaría en su primer día. Se produjo unos minutos de silencio hasta que Namjoon habló.

—Al parecer no les importa comenzar una riña el primer día —dijo—. ¡Todos los del salón pagarán–

Seokjin agarró su mano por debajo interrumpiendo al peligris. Este lo miró sorprendido y con un pequeño rubor asintió.

—Ustedes —apuntó a los involucrados—. Vienen conmigo a la oficina. ¡Ahora! Los demás se prepararán para la clase de hoy.

—¡Si señor! —gritaron al unísono.

Jin se dio media vuelta y los cinco chicos comenzaron a seguir a su superior. Nadie se atrevía a decir alguna palabra, Kai se dedicaba a fulminar con la mirada a ChanYeol mientras Sehun les hacía señas para calmar la situación.

—Lo siento si te involucré en esta situación —Jimin le susurró a Taehyung, haciendo un puchero.

El pelinegro le sonrió de lado.

—No te preocupes, tampoco iba a dejar que te dañara.

Ambos se dedicaron una sonrisa.

Entraron al cuarto quedando de frente a la mesa del pelinegro, todos quietos y bien parados. Seokjin tomó asiento y suspiró.

—No puedo creer que es su primer día y ya tienen problemas —se pasó una mano por la cabeza exhausto—. ¿Alguien me puede explicar qué sucedió?

—Yo lo haré —dijo Taehyung levantando la mano.

Jimin le agarró la mano bajándosela con cuidado.

—No señor —interrumpió—. Yo lo haré.

Jimin observó por el rabillo del ojo a Taehyung y éste lo miraba extrañado, el director asintió con la cabeza.

—Todo empezó cuando Tae y yo nos dirigimos hacia el grupo de Kai —Seokjin y los demás escuchaban atentamente las palabras del rubio. Por un lado Kai sentía que se desmayaría si Jimin lo delataba—. Todo iba bien hasta que —tragó saliva y miró a Kai molesto, suspiró—, Kai se comió mi desayuno sin que yo se lo permitiera.

—¡¿Qué?! —dijeron los muchachos al unísono, por otro lado Seokjin miraba la situación divertida.

—Así es, este bobo siempre hace lo mismo —dijo Jimin incrédulo golpeándole con fuerza el brazo—. Pero ya no se lo voy a permitir porque la próxima vez que lo haga no tendrá esa molesta cara bonita. ¿Cierto Kai?

Jimin le mostraba una sonrisa diabólica y éste de inmediato asintió.

Todos estaban anonadados con la situación.

—Yo creo que debería dejarlo sin comer durante dos semanas, señor —dijo Taehyung, sonriéndole maliciosamente a Kai.

—No señor —habló ChanYeol—. Yo creo que deberían lanzarlo a los leones.

—¡¿Qué?! —exclamó Kai con los ojos como plato.

—Si señor, apoyo la causa —dijo Sehun indiferente.

—¡¿Incluso tú?! —dijo sorprendido Kai. Jimin no podía ocultar sus ganas de reír.

Seokjin al pensarlo por un momento y al analizar lo sucedido, se levantó de su asiento y habló.

—Ya veo... —dijo observando a los muchachos, en especial a Jimin—. Supongo que tus amigos te defendieron, por lo heridos que están. Sin embargo, no puedo dejar pasar este problema así de fácil, así que cada uno ordenará y limpiará cada salón del edificio. Kai durante cinco días correrá al rededor de cuatro horas sin parar, o tendrá otro castigo peor.

Seokjin lo fulminó con la mirada.

—¡Lo- Lo haré! —gritó nervioso.

—Ahora los heridos pueden ir a la enfermería y después a la clase del instructor Namjoon. Los está esperando a todos.

—¡Si señor!

—Espero que sea la última vez —exclamó el pelinegro—. O para la otra no seré blando como hoy. Se pueden retirar.

Hicieron una reverencia y cada uno comenzó a salir de la oficina. Jimin al ver a Kai afuera, lo agarró del cuello y apoyándolo en la pared le gritó.

—¡Esta será la última vez que me acosas! —exclamó, Kai lo miraba molesto—. ¡Si te salvé el culo fue por tu madre! Sería una vergüenza si supiera lo qué haces.

—Tsk —chasqueó la lengua y soltando de su agarre se fue del lugar sin decir alguna palabra. Por otro lado Taehyung observaba de brazos cruzados a su amigo.

—Lo hiciste bien —acarició su cabello.

—Estaba asustado igual —le mostró un puchero y lo abrazó—. ¡Oh sí! Lo olvidaba.

Caminó hacia Sehun y ChanYeol haciéndole una reverencia.

—¡Muchas gracias por defenderme! —Jimin les sonrió, haciendo que ChanYeol se sonrojara.

—No- No te preocupes —se rascó el cabello nervioso—. Para eso estamos.

Sehun asintió con la cabeza sonriendo.

Ambos amigos luego de irse al baño lavaron su rostro y se fueron al lugar de entrenamiento. Por otro lado, Jimin acompañó a Taehyung a enfermería ya que sus heridas eran más serias.

Taehyung se sentó en una silla y Jimin le limpió las heridas con alcohol y algodón, por desgracia la enfermera no estaba.

—Si te duele me avisas —dijo el rubio.

—No te preocupes, adelante —el pelinegro cerró los ojos, para luego abrirlos y observar el rostro de Jimin detalladamente—. Jimin...

—¿Sí? —respondió entrecerrando los ojos y con una sonrisa, comenzando así la curación.

—¿Qué harías si Jungkook volviera a aparecer?

Jimin soltó el algodón e inmediatamente observó sorprendido a Taehyung,

—¿Qué...? —preguntó con el semblante serio y extrañado a la vez.

¿Por qué hacía una pregunta así Taehyung?