Solo un observador

Luego de años

—Andrés.

Luego de un par de años de no ver a su hermano por fin lo tenía frente a él. El mayor rie.

—Hermanito...

Sergio era más emocional que Andrés, su hermano mayor se acerco a estrecharlo en brazos. Sintió esa emoción abrumadora cuando lo abrazo, no quería llorar en ese momento a Andrés no le gustaba ver a los hombres llorar, no se ve bien.

—Bienvenido a Italia—habla el gallego con una sonrisa —Un país con arte, con clase, donde la gente viste con estilo, no como tú. Que pareces un viajante.

La sonrisa de Sergio se borro, definitivamente era Andrés. Mira su propia ropa y el mayor con sombrero le agarra las mejillas para sonreirle.

—Anda ven.

El de gafas se sorprende al ver el lugar donde vive su hermano, un monasterio.

—Andrés ¿esto esta habitado?—pregunta el de gafas luego de decirle como entrar a la fabrica de la moneda.

—tranquilo, ni nos cruzamos. Son los vecinos perfectos.

—¡Son monjes!—

—Cistercienses—corrige el de sombrero.— Ellos están en un ala y nosotros en la otra. Además, tienen voto de silencio. Han jurado permanecer callados no ante un arma, no ante un juez, ante Dios todo poderoso.

El 'nosotros' fue lo que llamó la atención a Sergio. ¿Con quién viviría Andres en un monasterio? ¿Quien estaría tan enamorada de su hermano como para estar en ese lugar?

En cuanto entraron a lo que se supone ser la sala de Andrés, Sergio notó todas las piezas de arte que su hermano poseía, muy caras, muy poco usuales y su pregunta silenciosa fue respondida al ver a aquel hombre que escribía en la pizarra

—Sergio, amigo querido de mi corazón. ¿Como has estado tanto tiempo? Vení— pide el argentino abriendo los brazos para estrecharlo.

Martín, el profesor le conoce. Ha estado al lado de su hermano por más de quince años, haciendo atracos pero se supone que ya no estaban juntos desde hace unos dos años. Eso pensó cuando Andrés se caso por cuarta vez.

—¿que es esto?—pregunta Sergio al ver planos, números, maquetas, en fin muchas cosas para un plan. Y la maqueta no era exactamente el de la fábrica de la moneda.

—¿te acuerdas del plan de robar el oro del Banco de España?—pregunta Berlín sonriendo mientras deja su sombrero en el perchero a un lado.

—Es una maravilla— dice el argentino.— Encontramos la manera de sacar más de 90 toneladas de oro.

—Hemos encontrado la solución— dice el gallego mientras que Martín se acerca a la pizarra a dejar algo y regresa— te va a encantar.

—Es la obra de ingeniería civil más brillante desde el canal de Panamá.

Sergio es el pincha globo y les tiene que hacer entender que no es posible su plan.

—Os lo he dicho mil veces: se puede sacar el oro. Pero, Andrés—dice esta vez Sergio nervioso mirando a su hermano— No hay ninguna manera de salir vivo del Banco de España.

Sergio nota la mirada de su hermano y del argentino, esa mirada de complicidad pero ve a Martín y es que tiene cierto brillo en los ojos cuando mira a Andrés, siempre mira al gallego con una pizca de ¿amor?

—bueno son minucias. Primero el oro—dice Martín explicando sonriente mientras Andrés se sitúa a su lado— después, las personas. ¿no?—El argentino mira a su amigo buscando apoyo.

—¿Como que minucias?—pregunta Sergio con cierto miedo, no sabe que esta intentando su hermano.

Martín se aleja para hacer lo que mejor sabe, cálculos.

—Ya hablaremos de eso más tarde—pide Berlin calmadamente, intentado tranquilizar a Sergio— hermanito ¿no me notas distinto?

—No...

Andrés jala a Sergio que sigue intentando mirar a Martín con sus cálculos en la pizarra, corroborar fallas.

—Tengo que hablarte de una mujer. Mira que... maravilla. Te presento a Tatiana.

Berlín tenia una foto enmarcada en un cuadro dorado sobre la chimenea, el pequeño cuadro contiene una foto de Andrés con una mujer de cabello naranja. Pero en el mismo sitio al lado del cuadro hay otros cuatro, Andrés con sus cuatro matrimonios fallidos.

A Sergio algo le parecía extraño.

—Esta loca de amor.

—Es toda una Diosa—Dice Palermo recibiendo a Berlin al lugar de los planos, preguntándole ciertas cosas.

Sergio tiene el cuadro en la mano y mira a su hermano, al amigo de su hermano y no puede evitar preguntarse... ¿Porque siguen juntos? ¿Viviendo juntos?

Andrés ha tenido cuatro divorcios y no tiene amigos cercanos, lo más cercano es que vivan en el mismo país, ni siquiera Sergio estaba tan cerca a Andrés como Martín.

¿Porque Martín, un hombre libre de vivir en bares y musica estruendosa esta en un monasterio en silencio?¿porque aceptar algo que no va con él? Luciendo una camisa y pantalón de vestir elegante como su hermano, cuando las veces que lo vio estaba usando casacas de cuero y ropa oscura, todo un galán, luciendo un don juan.