DISCLAIMER: Los personajes de CCS pertenecen a CLAMP, y son utilizados sólo como fuente de inspiración y entretenimiento. La historia es de mi autoría.
EN LO PROFUNDO DEL BOSQUE
Capítulo 11: Voluntad
La manecilla del reloj de bolsillo avanzaba con lentitud. Aunque lo había consultado en varias oportunidades, el tiempo parecía detenido. Un largo y blanco dedo le dió unos golpecitos al vidrio del frente, queriendo asegurarse de que el sofisticado elemento funcionaba correctamente. Al parecer lo hacía. Su inexpresivo rostro no demostró la impaciencia que sintió al comprobar, fehacientemente, que la diligencia que esperaba venía retrasada. Podía haber tomado una carreta o usado su propio caballo para llegar hasta Nouzonville, pero no quería perder la ocasión de interrogar al cochero de turno sobre la joven Kinomoto.
Ella era una mujer difícil de ignorar. Tuvo oportunidad de admirar su belleza en uno que otro evento de la ciudad: castaña, femenina, sensual, y unos ojos que podrían hacerte perder el juicio en un segundo.
Un ser angelical lejos de su alcance.
Tercer hijo de un conde, sin títulos nobiliarios que heredar. Una extraña enfermedad en la piel hacía carecer de color su tez y cabello, y lo alejaba del perfil bajo que prefería. Sin más que su astucia e inteligencia, aprovechó la holgada situación familiar para estudiar leyes y adentrarse en terrenos un poco más oscuros, que le garantizaran una clientela poco usual, pero poderosa. En ese ruin y escabroso ambiente, tuvo la coincidencia de cruzar camino con Fujitaka Kinomoto.
Lo había observado gastar fortunas en alcohol y juegos de cartas; el hombre era más arrogante de lo que su situación económica le permitía. Tenía mucho dinero y negocios, pero una pésima racha. Kinomoto hablaba constantemente de las grandezas que le esperaban, y alardeaba de tener nuevas ideas que lo harían intocable. Pero era el hazmereir de la nobleza, cada vez que se retiraba con un humor de los mil demonios luego de perder todo lo que empeñaba cada noche. Incluso él mismo, siempre tan inexpresivo, había sonreído divertido de la charlatanería del señor en alguna ocasión.
Más no le causó un mínimo de diversión enterarse que había prometido a Sakura al mejor postor: un Lord igual o peor de infame que el propio Fujitaka.
Después sucedió el secuestro, algo que no podía dejarlo más desconcertado y furibundo. Era consciente de las atrocidades que podían cometer algunas personas de ese entorno; pero era aún mucho más consciente de la ambición de ese hombre. No tardó en comprobarlo cuando el mismo Fujitaka se presentó en su estudio, cargando una bolsa con un poco de oro. No era su rubro ni mucho menos, pero es que la propuesta que le hizo era difícil de rechazar y podría hacer flaquear la voluntad de cualquiera aunque tuviera los nervios de acero.
"Encuentrala, y cuando Clow muera, mi hija será completamente tuya"
O-O-O-O-O-O-O-O-O
La cocina estaba impecable, a pesar del incidente de días anteriores no había registro de la escenita que habian montado en el lugar. Aquel día se tranquilizó al encontrar su reflejo nuevamente en el espejo, cada mañana había controlado que siguiera allí.
No había tenido oportunidad de hablar nuevamente con Shaoran, simplemente parecía nunca estar en la casa. Eso, o la evitaba magistralmente. El último vestigio de algún contacto entre ellos era la venda con la que envolvió su herida, la cual había desechado para que curara rápidamente al aire, y aunque se veía claramente la línea en su palma causada por el cuchillo, no había indicios de aquello. Toda esa situación le causaba una pequeña molestia en el pecho, sin embargo Sakura no estaba muy segura de lo que quería hablar con él.
ESTÁS LEYENDO
En lo profundo del bosque
ParanormalAhí estaba ella. Ese lugar al que nadie se atreve a entrar si sabe lo que le conviene. Repleto de animales salvajes y bandidos, los horrores más inusitados suceden en su interior. Pero ella deberá atravesarlo para escapar del destino que le impuso s...