Hace unos 3000 años atrás, el Polo norte festejaba, pues su amigo el pingüino cumplía un año mas de vida, todos en el lugar estaban entusiasmados y ansiosos por saber qué tipo de regalo le iban a dar a su gran compañero el pingüino, uno de esos tan entusiasmados invitados era la foca, la cual aún no se decidía que llevar a aquella fiesta, sabía perfectamente que, aunque le llevara una roca a su amigo el estaría feliz, pero él estaba decidido a hacer algo importante para su amigo.
La foca reposaba tranquilamente, cuando vagando con su mirada la fijo en el señor pingüino, inmediatamente se puso nervioso, siguió observándolo de lejos; noto que tenia la misma ropa de siempre ese traje gris, ese traje se veía tan simple y gastado, se preguntó de donde lo saco. Después de observar a su amigo un poco más, se le vino a la mente regalarle un traje nuevo; uno que constara de una camisa blanca y un blazer negro, ya que de estos dos colores se origina el gris, el color que tanto viste su amigo.
Llego el momento de la fiesta y la foca estaba más que nerviosa, debido a que hoy le entregaría el regalo a su amigo, el regalo que le había costado tanto tiempo pensar y conseguir, a pesar de todo el esfuerzo que hizo la foca, se sentía satisfecha pues sintió que su esfuerzo valdría la pena. La fiesta ya estaba casi en su fin y el señor pingüino empezó a abrir los regalos, para la sorpresa de la foca empezó con el que él había traído; se puso nervioso, miraba detalladamente cada gesto y movimiento de su amigo.
El pingüino abrió la caja con mucha curiosidad, curiosidad que fue remplazada por una gran sonrisa al darse cuenta de lo que había adentro, pero su felicidad aumento al darse cuenta de quien provenía tal regalo, se levantó y le dio un abrazo a su gran amigo, su gratitud fue tanta que nunca se quitó el elegante traje.
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Escritos
PoetryAl principio inicie esta historia sin ningún tipo de proposito, pero siendo sincera se ha convertido en el lugar donde descargo mi mente, todos los sentimientos, momentos, pensamientos y situaciones que se vuelven inexplicables, pero que se vuelve...