¿Akatsuki son niñeras?

❚ Nubes

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Zetsu se sentó en el suelo con una taza de plástico en la oreja y una cuerda que llevaba desde la copa hasta la ventana que tenía encima. En frente de él estaban Kisame y Sasori, que que lo miraban con sonrisas burlonas.

"Oh, como han caído los poderosos "

"Bastardo de madera"

Su cuerda se tiró un par de veces antes de que la voz de Sakura se filtrara.

"¿Ves Zetsu-San? ¡Esto es genial!, ¿No?"

"Yo... supongo... ¿Es esto realmente necesario?"

"Sí"

Zetsu suspiró.

"Bien. ¿Qué más ves?" Preguntó. La escucho zumbar por unos segundos antes de que su voz optimista volviera a él.

"¡Veo pájaros volando en el cielo! ¡El cielo está nublado también, oh! ¡Y acabo de ver correr a un conejito en un arbusto! Y veo a... ¿Una chica? Realmente no puedo ver su rostro... "

Zetsu empujó su brazo a través de la pared tan pronto como pudo después de escuchar esas palabras con la esperanza de agarrarla a tiempo. Para él, el mundo se movía en cámara lenta. La mano de Kisame intentó agarrar a Samehada y los dedos de Sasori se movieron para mover sus marionetas. Pero ya era demasiado tarde. Demasiado tarde.

Estaban afuera en dos segundos, con las armas en las manos y escaneando toda el área en busca del pequeño grupo de chakra de Sakura. Los tres se quedaron allí, revisando un radio de veinte millas de su posición. Ella no estaba allí. Ella no estaba en ninguna parte.

"Creo que es una conclusión lógica que el shinobi que la secuestró es un rango S. Al menos un rango" Sasori hizo una mueca, "O se utiliza como palanca contra nosotros o fue un malentendido en su identidad. Me inclino por el último"

Kisame maldijo en voz alta, "¿Cuál es nuestro plan? ¿Lo tiene localizado Zetsu y nosotros lo seguiremos?"

"Esa es una opción viable"

Zetsu se hundió en el suelo silenciosamente y lo hizo para que su chakra flotará débilmente en el suelo para que los dos pudieran seguirlo.

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Viajaba tan rápido como podía atraves de la tierra, mientras revisaba cualquier forma de chakra a su alcance. Kami, ¿Cómo pudo dejar que esto sucediera? ¡Sakura estaba a menos de un metro de distancia que él! Debería haber podido salvarla a tiempo. ¡Maldición, era un tipo de shinobi sensorial! Debería haber sentido a ese secuestrador a una milla de distancia y...

Espera.

Zetsu titubeo antes de recuperar la compostura. Frunció el ceño y dejo que la completa confusión se apoderara de toda su mente. Su corazón latía con fuerza en su pecho y le provocaba una ansiedad en las venas que nunca antes había sentido.

"¿Estamos preocupados por ella...? ¡por supuesto que estamos preocupados! ¿No recuerdas cómo reaccionamos? Nos entro el pánico. ¿No es natural que cunda el pánico? ¡No entramos en pánico, imbecil! Y ahí estábamos, rompiendo una pared para tratar de agarrarla a tiempo"

Paso una hora y todavía no tenían pistas, pero no se habían detenido para ningún descanso. Tenían que encontrar a Sakura, sin preguntas. Y no se detendrán hasta que supieran que estaba bien. Zetsu pensó que era el único extremadamente preocupado por el bienestar de Sakura, pero las miradas de Kisame y Sasori le dijeron lo contrario.

"¿Cómo podemos estar tan preocupados? Ni siquiera somos humanos. Tch, ¿Porqué me preguntas? No tengo respuestas a todas tus preguntas"

De repente, él lo sintió. Zetsu giró rápidamente a la derecha y se dirigió a una casa segura llena de cinco grandes chakras y uno familiar y mucho más pequeño. Su cabeza se asomó por encima del suelo.

"Matalos a todos una vez que la tengas"

Él se hundió en el suelo. Reapareció en el techo de la casa de seguridad y vio a Sakura desmayada en el sofá y los que arreglaron su secuestro conversando tranquilamente.

"Afortunadamente, la encontramos para llenar nuestra deuda". Dijo uno de ellos.

"Ella va a ser vendida por bastante dinero con ese cabello rosado que tiene. ¿Cuántos años tiene, cuatro? ¿Cinco? Los jóvenes son muy populares en el mercado en estos días. Podemos hacer cien mil con ella, fácilmente"

La ira se apoderó de las venas de Zetsu cuando se retiró de techo y apareció justo debajo de las tablas del suelo. Sus brazos se extendieron por el sofá y rápidamente jaló el cuerpo de Sakura hacia él. Cuando Kisame y Sasori lo vieron emerger del árbol en el que estaban posados, se lanzaron con intención asesina.

Zetsu miró a la pequeña niña en sus brazos. Estaba ligeramente golpeada, pero no sabía si eso era del secuestro o simplemente ya los tenía antes. Él la revisó y confirmó con alivio que no tenía huesos rotos y ningún traumatismo en la cabeza.

"Perdón por no estar pendiente de ti, Mocosa"