Si, el para siempre dura toda una vida, no quiero ni un segundo de esta tortura que quema por dentro, desborona mis sueños, se va al anochecer y vuelve al rayo del alba.
Masoquista por no arrancarme el corazón y dejar de sentir tus palabras vibrar en mi ser, así que, destrozaré mis deseos de ver tu sonrisa brillando en el día y siendo mi perdición en la noche.