-Eres un maldito idiota, hm- se quejo Deidara cojeando de su pierna izquierda.
-¿¡yo soy el idiota!? ¡Tu fuiste el que casi nos mata con esas ridículas figuras que llamas arte!- grito Hidan sujetandose con fuerza el brazo derecho.
-¡Si tan solo supieras trabajar en equipo, no estaríamos en estas condiciones, hm!- el rubio quería golpearlo pero al sentir el dolor de su cuerpo, solo suspiro tratando de llegar a la cueva.
Luegos de un rato los menores por fin dieron con la base, avanzaron unos metros y finalmente se dejaron caer al suelo, la misión los había dejado muy agotados.
-Hogar dulce y asqueroso hogar- hablo el religioso tratando de acomodarse de modo que no fuera tan incómodo.
-Cierra la boca, que quiero descansar, hm-
Los chicos estaban quedandose dormidos pero una voz chillona los puso alerta.
-¡Mis sempais regresaron!- el buen chico corrio hacia sus amigos y con la intención de darles un fuerte abrazo.
El creyente con sus pocas fuerzas logro girarse esquivando aquella muestra de afecto.
Tobi aterrizo en el estomago del rubio sofocandolo de golpe.
-Bas-Bastardo- fue todo lo que alcanzo a decir Deidara.
-¡Deidara-sempai te extrañe mucho! ¿Como te fue en la misión? ¿Hiciste nuevas esculturas? ¿Tus enemigos eran fuertes? ¿Trajiste dulces para Tobi?- el enmascarado se escuchaba emocionado.
El chico de ojos azules giro su cabeza hacia el fanático pidiendole con la mirada que se deshiciera del buen chico.
Hidan de inmediato capto el mensaje, poco a poco se acerco a sus compañeros quedando al lado del pelinegro, levanto la pierna dandole una fuerte patada a Tobi.
El enmascarado rodo hasta golpearse contra una de las paredes.
-Gracias, hm- dijo el rubio tratando de recuperar un poco de aire.
-Fue un placer- sonrio el jashinista divertido.
-Hidan-sempai es muy malo, lastimo la cabecita de Tobi- murmuro el pelinegro sobandose el área afectada.
Ese escandalo atrajo la atención de otro renegado.
-¿Qué es lo que está pasando aquí?- aparecio Sasori sosteniendo unos frascos llenos de venenos.
Pero no fue necesaria una respuesta, pues al ver el estado de los menores y el daño del buen chico entendio todo.
-Tobi, ve a la oficina de los líderes, Konan lleva rato buscandote- dijo el pelirrojo.
-¡A la orden! ¡Nos vemos luego sempais!- y asi el enmascarado se retiro, al igual que el marionetista.
Los chicos suspiraron con cansancio, aveces regresar a la base era parecido a una tortura.
-Joder, Tobi es insoportable- comento Hidan mirando el techo.
-Y eso que nunca has compartido cuarto con él, es como vivir con un niño de cinco años, hm-
-Si me imagino, a todo esto ¿por que siempre trae la mascara? ¿No es raro que solo se la quite para dormir?- pero no obtuvo respuesta por parte del menor.
Hubo un momento de silencio hasta que el artista decidio aclarar todo.
-No se la quita, jamas lo he visto sin máscara- confeso Deidara dejando dejando al jashinista en shock.
Como pudo el creyente se incorporo dedicandole una mala mirada.
-¿¡ACASO ES UNA PUTA BROMA!? ¡PERO SI ES TU MALDITO COMPAÑERO!-
