Capítulo 6

1.2K 127 43
                                    

Volkov

Por un momento pensé que mi cerebro se desconectó, mi cuerpo no reaccionaba por si solo. Tal vez es aquel instinto que tenemos todos adentro, puede ser difícil pelear contra la lujuria pero no imposible y menos si no es con la persona que quieres. Mis manos las cuales estaban en su cintura, pasaron agarra con fuera sus hombros empujándola para atrás cortando aquel beso.

— Paola, vete de mi departamento. Por favor — Traté de sonar lo más amable posible, pero estaba molesto.

— Pensé que te estaba gustando ...— Dijo confundida

—¡Pensaste mal! — grité

Esta es la actitud que me molesta, hacerse la víctima para luego aprovecharse y obtener lo que quiere. No va a pasar, conmigo no. Terminé por empujarla, cayendo acostada en el sofá. Me paré deprisa ajustando mi camisa.

— Ahora sal de mi casa — Dije serio

Caminé bastante enojado hacia la puerta, abriéndola dejando el paso libre para que se vaya de una vez. Nunca más voy a caer en sus juegos, las mujeres si que son problemáticas. No dudan en usar sus encantos para obtener lo que quieren, da miedo. Antes que saliera me dedico una sonrisa coqueta. Terminé por tirar la puerta, estaba cansado y frustrado. Me fui directo a mi cuarto, no me importa si Horacio durmió ahí. Mi mente estaba matándome, caí sobre el suave colchón. Mis manos tocaban la comisura de mis labios, en mi mente estaba alguien más mientras ella me besaba.

— Horacio — Susurré.

Apegue una almohada contra mi pecho, cerrando mis ojos lentamente. Sentía como si hubiera hecho algo malo, comienzo a creer que el corazón y mi cerebro son pequeñas personas viviendo en mi interior. Como siempre no están de acuerdo, mi mente dice que no afecta lo que haya hecho Paola, soy soltero. Pero mi corazón, siente como si hubiéramos traicionado a alguien, que traicione el amor que tengo. Era realmente un dilema, pero poco a poco fui entrando a un profundo sueño.

El sonar de la alarma retumbaba mis oídos con fuerza, lo que provocó que la tire de la mesita de noche. Mi cuerpo no daba más, necesito un descanso de este trabajo va acabar conmigo. Me tomaría el día libre, si no fuera por todo el peligro que está pasando últimamente.

— Venga ... Levanta — trataba de darme ánimos, pero era inútil.

Hasta que sonó mi celular, rogaba que no fuera Paola de nuevo. Ya no quiero más sorpresas con esa mujer, pero al tomarlo vi el número de Conway. Lo que me parecía muy raro, ¿Apoco aprendió a usar el teléfono? Contesté enseguida

— ¿Qué quieren? Como se atreven a secuestrar al superintendente, no se quienes sean pero los voy atrapar — decía serio.

— ¿Que gilipolleces estás diciendo? — Dijo molesto.

— ¡Joder Conway! Menudo susto me acabo de comer, pensé que te habían secuestrado... Pero solo aprendiste a usar el teléfono — dije burlón

— ¡ANORMAL! — me gritó — te quiero en comisaría en 3 minutos, ni uno más ni uno menos.

Al final me levanté, aunque tranquilo. Incluso tome mi tiempo para bañarme ¿Quién dice que los Otakus no se bañan? No me molestaría si Conway me grita por llegar tarde, soy comisario Volkov.

Al salir de mi departamento arreglado, listo para un nuevo día de trabajo. Note que mi coche no estaba en la entrada del edificio.

— Buenos días, disculpe y...¿Mi carro? — pregunté al portero

— Buenos días señor Volkov, lamentablemente la grúa se lo llevó. Yo le advertí ayer — respondió amable

— Joder, bueno muchas gracias.

IN THE NAME OF LOVE - VolkacioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora