Secreto de un omega

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Dos meses antes

Valt Aoi un adolescente de dieciséis años estudiante de preparatoria con pésimas notas pero pasa desapercibido al momento cuando decide formar una banda gracias al amor a la música que tiene. Al momento de ser el vocalista y cantar con su banda oficial, su popularidad crece

Actualmente es un beta que vive normalmente como cualquier ciudadano. Junto su mejor amigo Rantaro deciden formar una banda buscando un baterísta y guitarrista

Lo que nadie conoce del pequeño es que esconde que es sangre omega y no beta. Valt al enterarse lo que es decide pagar lo que sea para estar en tratamiento y que ningún alfa perciba su aroma

– Rantaro – le llamó al llegar a su lado

– Hola Valt, llegando tarde de nuevo – le dijo saludando a su amigo

– No, solo que no tenía ganas de caminar así que me quedé comiendo un helado en un parque – dijo bromeando

Valt y Rantaro se conocieron en un campamento a los doce años, casualmente Rantaro también es beta, y eso para el fue magnífico conocer a Valt de manera afortunada en ese lugar

– Perdiste tres clases – le llamó la atención. Valt solo bostezo sin importarle – no importa, solo vamos a la cafetería

Al llegar su mirada se enfocó en un rubio en especial en el cual era muy popular ya que era uno de tercero, su aspecto frío y serio lo hacía ver con una actitud algo increíble para el chico. Su nombre era Free y es uno de los alfas más respetados de todos por el linaje que tiene dentro de la preparatoria

– Free de la Hoya – mencionó Rantaro captando la atención de su amigo al instante

– ¿Que? – pregunto sin entender

– Es Free de la Hoya el chico que estas viendo – le dijo caminando cerca de una mesa y tomando asiento. Valt se quedó parado aún viendo aquél chico rubio – ¿por que el interés?

– Por nada – negó sentándose a su lado – es solo que los alfas son muy imponentes en esta escuela – respondió sacando la botella de agua de su mochila – ¿que horas es? –pregunto alterado cambiando de tema, levantándose de golpe

– Las nueve de la mañana ¿por que... – dejó la pregunta al aire al ver como su amigo salió corriendo tomando todas sus pertenencias – ¿que le pasa? No puede estar un día sin hacer tanta locura

Valt al llegar al baño fue directo un cubículo para sentarse y sacar sus pastillas las cuales las tomó con paciencia, se quedó unos segundos ahí hasta que escuchó unos pasos y una voz cerca

– Si, después de clase iré directo a mis clases de batería – Valt pego su oreja en la puerta del cubículo del baño – estaré ahí sin falta y prometo no fallar esta vez, nos vemos – escucho un suspiro – estoy harto de no ser libre – dió un golpe. Valt dejó caer su mochila por accidente llamando la atención del chico – ¿Quien está ahí? – pregunto al escuchar el ruido ya que no percibió a nadie antes de entrar

Valt salió inmediatamente viendo que le persona que estaba frente suyo era el alfa más importante de esta escuela. El rubio Free de la Hoya con su actitud algo seria imponía respeto alrededor

– Lo siento – dijo Valt saliendo de ahí rápidamente corriendo sin ver al frente y chocando con alguien al final del pasillo. Valt cayó sentado provocando un grito de dolor

– ¡Oye! – una voz grave le grito – se más cuidadoso pequeño

Valt observo a la persona desde abajo con una mueca. Al ver a un chico alto y de cabello verde se encogió por su aspecto dominante

– Lo siento – se volvió disculpar levantándose, su mirada se enfocó en el estuche de guitarra que traía consigo

– ¿Se te perdió algo? – pregunto harto de ese peli azul por su mirada en él

– Nada... ¿Tocas la guitarra? – señalo el estuche detrás suyo. El chico alzó una ceja y su mirada penetró la suya. Valt se encogió en su lugar ignorando su mirada

– ¿Y que si lo hago? ¡Maldito niño! – lo tomó de su camisa levantandolo. En eso alguien le pegó por detrás soltando al chico azul que este volvió a caer sentado

– ¡Deja a mi amigo! – exclamó enojado ayudando a su mejor amigo a ponerse de pie

– ¡¿QUIEN DEMONIOS ERES TÚ, MALDITO IDIOTA?! – grito furioso

– Soy Rantaro Kiyama amigo de Valt Aoi – se presento. Sin darse cuenta llamaron la atención de los alrededores atrayendo a la multitud de estudiantes cerca – siempre los malditos alfas creyéndose ser los mejores de todo el mundo – reprochó sacándole la lengua – ¡idiota! – exclamó

– ¡ESCUCHEN PAR DE IMBÉCILES SOY  SILAS UNOS DE LOS ALFAS MÁS IMPORTANTES DE ESTA ESTÚPIDA ESCUELA Y USTEDES SOLO UNOS SIMPLES... ¿QUE SON OMEGAS?

– ¡SOMOS BETAS ESTÚPIDO! – le respondió con el mismo tono de voz

– Escucha güerito feo, no te creas la gran cosas por solo alzarme la voz – le dijo caminando hasta él

– ¿Feo? Mi mamá dice que soy el chico más guapo – contestó sarcástico para ponerse frente a él e iniciar una pelea

– ¿Quieres pelear? Por que si es un sí, te juro que daré la peor golpiza de tu vida – Silas dispuesto a comenzar con el primer golpe se puso firme

– Rantaro detente – habló Valt jalando a su amigo lejos de ahí para no llamar la atención más de lo que ya era

– ¡SILAS CÁLLATE! – grito una voz al fondo imponiendo orden en el lugar

Los alfas que estaban cerca bajaron la mirada por respeto, y los omegas fueron los más afectados ya que estos demostraron sumisión al momento de escuchar esa voz gruesa, masculina, firme y formal de manera sensual. Valt aunque le ayudaba su tratamiento, no pudo evitar sentir un poco de excitación por esa voz, su corazón pálpito de manera incontrolable

Rantaro observo a Free de la Hoya llegando a su lado con seriedad y llevándose al peli verde lejos de ahí, viendo como un simple grito de alfa impuso orden en un lugar como ese. El rubio ignoro el alboroto poco después para ir con su amigo que estaba en el suelo con la respiración agitada. Valt tenía su mano tapando su boca para calmarse pero le resultó imposible

– ¡Valt! ¡Valt! – pronunció preocupado. Valt logró ponerse de pie para salir corriendo lejos de ahí dejando a su amigo – ¡VALT! ¡VALT! – grito para llamar su atención

Valt salió corriendo directo al baño para calmar su excitación, aunque sabía que desprendía pocas feromonas su olor era desconocido para los demás, hasta para el mismo. Al entrar pudo observar que un chico lavándose las manos que rápidamente su mirada se dirigió a él al verlo impaciente

– Lo siento – se disculpó entrando a un cubículo rápidamente sin verlo

Sabía que ese chico al parecer no había notado su aroma, ya que estaba seguro que no era un alfa, eso creía al menos. Con velocidad saco todo de su mochila para sacar unas pastillas en caso de emergencia para su excitación. Al tomarlas el efecto de estas tardo ya que eran muy complicadas para su organismo

Valt quería vivir normalmente sin complicaciones, quería ser común y corriente como lo era su amigo Rantaro. De verdad quería llegar a ser beta para tener una vida más fácil

Ser un omega era un asco en esta vida mediocre, ellos tienen menos oportunidades que los betas. Y los alfas de este mundo se creen las gran cosa en cambio los betas viven en su mundo sin privilegios y sin restricciones.

– Quiero ser normal – suspiro – quiero ser un adolescente común que pueda ser lo que quiera sin estar atado a un montón de pastillas para controlar algo que no quiero