6. La fiesta I

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~Narra Vegetta~

Hacía dos semanas que no veía a Rubius. Quizás fuera lo mejor, al fin y al cabo, yo no era su alfa y no sabía si él me correspondía.

Hoy lo volvería a ver.

Alexby daba una fiesta en su casa y nos reuiniríamos todos.

No había recibido ninguna señal de vida por su parte y estaba muy molesto.

Por un momento había pensado que quizás él sentía algo por mí, pero obviamente no era así.

Decidí que no debía amargarme más por el asunto y que lo mejor sería intentar disfrutar al máximo la fiesta sin pensar en cierto chico de ojos esmeraldas. Además, por una vez que en una fiesta no tendría que estar pendiente de que me destrozarán la casa...

~ Narra Rubius ~

Me habían tratado como a un enfermo mental y ahora creían que con una fiesta íban a arreglarlo todo.

- Vegetta va venir. - Dijo Alexby cortante.

Bueno eso cambiaba un poco las cosas.

Quizás perdonaría a Luzu i Alexby por encerrarme y pensarse que estaba traumatizado y que Vegetta me había violado.

Realmente esto era debido a la educación que habían recibido, creían que todos los alfas eran iguales.

Vegetta no era así.

Pero él tenía a todo dios intentando cortejarlo y yo era un torpe y débil omega.

Ni se acordará de mí. 

~Narra Vegetta~

A las nueve en punto me encontraba tocando el timbre de la puerta de la casa de Alexby.

- Hombre Vegettita como tú por aquí. - Dijo Luzu mientras abría la puerta.

- He venido a la fiesta no se por qué te sorprendes. - Dije un tanto molesto.

- Tranquilo hombres lo decía porque últimamente no se te ha visto mucho por el pueblo. - Dijo el omega dejando pasar al ojimorado.

- Vegettaaa - Saludó Willy, se notaba que ya había tomado alguna que otra copa. - ¡Veen que estamos jugando! - Añadió.

Me senté a su lado, todos estábamos en un círculo y cuando alcé la mirada me encontré con unos ojos esmeraldas que se clavaban en mí como puñales.

- El juego es muy sencillo. - Dijo Alexby mientras me tendía un vaso con lo que supongo que no sería agua. - Te hacen una pregunta y si no la respondes bebes. Mira empiezo yo, Vegetta; ¿has violado a Rubius alguna vez? Tu respondes, y si no quieres bebes. - Lo dijo así de manera natural como si tal cosa.

- Claro que no lo he violado. - Dije en un tono un tanto nervioso.

- Bien, entonces te toca preguntar. - Dijo Alexby.

- Luzu; ¿cuántos penes aquí presentes te has metido en la boca? - Dije con voz firme. Todos los héroes de Karmaland me miraron atónitos.

- Dos. - Dijo Luzu mirándome fijamente.

- ¿¿Como que dos?? - Exclamó Auron mirándolo incrédulo.

- Karmaland tiene sus inicios antes de ti Auroncito. - Contestó el omega con una sonrisa pícara. - Me toca.

- No no ahora quiero saber quien es el otro. - Dijo Lolito, de hecho, todos parecían muy interesados en el tema.

Todos menos yo, que obviamente ya sabía la respuesta. Pero al parecer mi pequeño osito también, ya que me miraba como si con su mirada pudiese hacerme estallar la cabeza, si no estuviera enfadado quizás me hubiera parecido adorable.

Esa noche todo me daba igual, tal vez fuera porque ya llevaba tres vasos de lo que fuera que me íban sirviendo.

- Esta bien.- Dijo Luzu con una sonrisa traviesa. - Las personas que hayan dipositado su pene en mi boca que beban. 

Todos miraban alrededor expectantes. Auron bebió, obviamente, pero eso no causó ningún revuelo. La verdad es que la gente no me miraba, seguramente no pensarían que fuí yo. Al cabo de unos segundos mis ojos se cruzaron con los verdes ojos de Rubius. Quizás fuera porque estaba dolido por haberme abondonado, o porque no me quería y yo estaba terriblemente enamorado, o por el alcohol pero el caso es que lo miré desafiante y con la copa en la mano le sonreí diciendo;

- Salud. - Y bebí un trago. Todos los de mi alrededor me miraron de distintas maneras, algunos sorprendidos, otros enfadados pero yo solo atinaba a ver la decepción del omega que tenía enfrente.

Me sentía fatal, pero por otro lado sentía que él se merecía pasarlo igual de mal que yo lo había pasado por él. Era una sensación horrible la de estar enamorado, dipositas en alguien todo tu ser, y te sientes débil porque tiene en sus manos la capacidad de hacerte un profundo daño o de hacerte la persona más feliz.

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Voy a actualizar más a menudo, soy lectora y sé lo que se siente♡ 

PD: Enviar mensajes subliminales de shipps en las fotos es mi religión uwu

Mi debilidad {Rubegetta} {Omegaverse}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora