Sólo pasó

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Con el inicio de una nueva estación, empezaba la ligereza de ropa y días más cálidos. Hoy era el solsticio de primavera, un día con las mismas horas de día como lo eran de noche y teníamos una pequeña costumbre escolar de celebrar con nuestros trajes tradicionales una pequeña cena de bienvenida a un nuevo ciclo. Para mi fortuna, este año no estaría incómodo frente a mis compañeros de clases al tener a Jongdae conmigo, podría conversar y compartir anécdotas respecto a las temporadas anteriores, de esta manera dabamos borrón y cuenta nueva donde, en lo ideal, era no equivocarse a futuro y vivir plenamente.

-¿Junmyeon - sunbae? - miro a mi menor incentivando a que continúe - hay una joven fuera de nuestro instituto preguntando por usted.- lo miro extrañado antes de pararme de mi asiento y agradecerle con una inclinación de respeto la cual él imitó antes de retirarse a su salón.

No conocía a ninguna joven fuera de mis primas o conocidas hijas de amigos de mis padres, por lo que estaba algo nervioso por saber quién podía ser. Poco a poco me acerco a la salida (debido a que nadie sin credencial escolar podía ingresar salvo nuestros padres debidamente anunciados con el encargado) tratando de enfocar a alguien diferente de nuestro uniforme. Grande fue mi sorpresa a ver a mi prima EunHa junto a su guardia personal bajo a una sombrilla que él mantenía sobre su cabeza para evitara alguna insolación, exagerado de mi parte a decir verdad.

-Junmyeon oppa, es un gusto verlo nuevamente después de las fiestas pasadas.- inclina su cuerpo en respeto sólo para mantener la apariencia de una joven educada criada para ser una buena esposa.

- EunHa, es una alegría verte por estos lados. Tío sabe que estás aquí?.- ella niega con una sonrisa traviesa. Típico de ella.

- le pedí a mi guardia que me trajera verte. Te extrañaba.- la abrazo delicadamente sin atraer malos entendidos que llegaran a oidos de mis tíos.- traía una invitación para ir a cenar a casa, madre estará felíz.

- Eun, hoy es nuestra celebración de solsticio, con gusto asistiré después de acabada.

- perfecto. Le diré a madre para tener la cena más tar...- queda boquiabierta mirando fija en una dirección. Le sigo la mirada para burlarme de ella luego. Mi cuerpo queda literal tieso al ver lo que ella observa.

- vaya, no sabía que Junmyeon hyung tuviese a una amiga tan preciosa.- halaga Jongdae mirando fijamente a mi prima.

- oh! Me avergüenza tales palabras joven, le agradezco.- habla sonrojada bajando su mirada. Miro directo a Jong tratando de psíquicamente llamar su atención.

- es mi deber madam.- le da una de sus sonrisas conquistadoras.- Junmyeon, lamento esta interrupción pero buscan de tu persona en nuestra aula.- asiento parandome frente a ambos.

-Eunha, dile a tía que estaré ahí. Ahora sube a tu vehículo y retirate.- hablo de mala gana. Estaba de mal humor luego de esa escena.

Ella aún abrumada por los halagos de mi amigo se retira sin antes besar la mejilla de mi amigo como si fuesen grandes de amigos con costumbres americanas. Veo su auto desaparecer por la cuadra entrante antes de tomar del brazo a Jongdae quién miraba atento en la dirección por donde se fue.

Esto no me estaba gustando, y despertada algo desagradable en mí.






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Luego de ese pequeño encuentro de Eun y Dae, las cosas no podían ir peor.

Primero, mi hasta hace unos días amada prima, se empezó a quedar en casa de mis padres debido a que mis tíos creyeron era lo mejor yo estar acompañado y de paso ella también. Patrañas. Sabía que muy en el fondo, Eunha quería tener aunque sea un mínimo de probabilidades para ver a Jongdae, siempre preguntaba por él, me hablaba del chico de sonrisa gatuna y ojos avellana, que si podía conseguir el número de aquel misterioso joven (para ella). Me estaba colmando poco a poco la poca paciencia que tenía fuera de clases.

Always You [SuChen]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora