LA VOZ DE LA ESPERANZA

Capitulo 3

-Siento que me hace falta el, mi pecho duele, mi cabeza me da vueltas, puedo sentir el dolor de mi madre y puedo jurar que ella puede siente el mio; veo como todo va en cámara lenta y me visualizo nuevamente leyendo ese telegrama, aquella hoja con aquella disculpa plasmada, son pocas las palabras escritas en el pero el dolor que dejan es infinito. <¿Ahora que haré sin mi amado? Mi querido Albert ya no lo tendré cerca nuevamente, no podré tocar sus manos, no podré percibir su dulce aroma, no veré más esa brillante sonrisa, no me volveré a perder en su mirada amorosa, ni escuchar su dulce voz, esa voz que lograba sosegar mi corazón.
Dios ¿por qué?.. Por qué me lo haz quitado, teníamos una vida planeada, teníamos muchísimas cosas por hacer juntos y ahora.. Ahora ya no está el me abandonó se fue sin dejar rastro, sin despedirse.
No esto no puede ser, me reuso no puedo creer que mi amado se haya esfumado.. Me niego a perderte y mas si es de esta manera, se que estas vivo, que te encuentras en algún lugar es solo que no se en dónde.
Mi corazón me dice que estas aquí en este mundo y mientras este sentimiento esté presente no aceptaré que me digan que haz muerto.

"Hija.. Mi amor" - escuche a lo lejos la voz de mi padre-
"Vamos cariño tienes que levantarte a comer algo; no lo haz hecho por tres días, eso de que solo quieras agua y un trozo de pan te hará enfermar" - dijo mi madre acariciando mi mejilla limpiando una pequeña lágrima que escurra por mi rostro-
"No tengo hambre, por favor necesito que me dejen sola" - susurre <no puede ser, ¿es cierto lo que ha dicho mi madre? Tres días ya? Yo no siento que el tiempo pase> Desvíe la vista hacia mi madre y me miraba con tristeza, me regalo una pequeña sonrisa y yo volví mi vista al jardín-
"Deline Quedate por favor con mi hija y asegurate de que coma un poco más ¿si?" - dijo mi madre caminado hacia la puerta para salir de la habitación, Deline solo asintió con una pequeña reverencia y cuando la Señora Madeline salió cerro la puerta a sus espaldas-
Señorita Candy - dijo Deline acercándose al pie de mi cama-
" Deline no me digas señorita somos amigas ¿recuerdas? Creí que ya habíamos hablado de eso" - dije mirandola y le sonreí de lado para darle confianza-
"Si, seño.. Candy, tienes que comer y lo sabes querida solo estas en esa cama y lo que dice tu madre es cierto, puedes enfermar" - Deline tomo asiento justo a un lado de mi y me tomo la mano acariciando la con dulzura-
"No puedo, no tengo apetito. No dejo de pensar en mi amado Albert. El ya no está, me dejó sola y con el corazón destrozado" - dije comenzando a llorar-
"Candy.."-Deline dejó mi mano a un lado se acercó más a mi y me abrazo, después de un rato se alejo de mi lentamente y limpiando mis lágrimas dijo-
"Tienes que estar bien candy, crees que a él le gustaría verte en esa cama todo el día y toda la noche sin dejar de llorar y lamentarte, y peor aun sin comer nada"
"Deline basta! Él no está aquí!! El se fue!!" - Grite llorando aún más fuerte-- "Yo lo necesito conmigo"
"Mi querida amiga" - susurro Deline volviendo a abrazarme con más fuerza.

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Agosto 1920

Querido Albert.

Amor mío han pasado apenas doce días desde aquel día en que llegó la última noticia que tengo de ti. Me que quedado atrapada en un agujero sin salida. Se que no estarás contento al saber que no he estado comiendo muy bien que digamos; creeme que he intentado hacerlo pero me es muy difícil lograrlo.
En realidad lo único que he hecho desde tu partida es lamentarme y llorar hasta caer dormida, aunque al menos me he levantado por mi cuenta de esta fría cama.
Te estarás preguntado en donde me encuentro.. Verás aun estoy en casa de mi padres ya que no tengo el valor suficiente de ir a nuestra casa ya que estoy segura de que me romperá aún más recordár que tu ya no estás y que no volverás.

Te amo tanto mi querido Albert, que en verdad sólo despierto por las mañanas esperando tu regreso.

Att: Candy Ardlay.

-Cerre mi diario lentamente y lo puse sobre la mesita que se encuentra a un costado de mi cama-
"Lo extraño tanto, me pesa tanto creer que tu ya no estás.. Amado mío prometo que voy a buscarte, yo no me conformó con el saber que estas desaparecido, quiero respuestas claras si estas o no estas vivo.. No quiero un tal vez y darte por muerto solo por que no hay pistas de tu paradero. Juro que voy a encontrarte"