Luz En Las Tinieblas (Xicheng)

13. Luz En Las Tinieblas (Fin)

Todos estaban estupefactos. El zumbido de las moscas era lo único audible.

¡¿Un hombre tan serio quería ser pastelero?!

La verdad es que el joven Cheng desde pequeño le encantaban los dulces y sus hermanos lo sabían muy bien. A escondida de sus padres cocinaba galletas y tortas y siempre quedaban deliciosas. Para el la repostería era algo que le relajaba, le gustaba. Ahí el podía ser él mismo.

Nunca lo pudo confesar pues no contaba con una familia que le apoyara. De eso estaba consciente. Su deber como el único hijo varón de sangre debía ser el heredar la empresa de sus padres. Nada más.

Sin embargo un día en su adolescencia le surgió la idea de enfrentarles y contarle la verdad. Wei WuXian, su querido hermano mayor, le prometió que le ayudaría y que se quedaría a su lado en todo momento.

Más no fue así.

El día donde Jiang Cheng les iba a confesar todo, Wei WuXian había aparecido con alguien más, sin ningún tipo de preocupación, como si no recordará aquella promesa que con tanta alegría garantizó. Ese suceso a Jiang Cheng lo desmoronó. Él era un cobarde y tenía miedo, tenía miedo de sus propios padres.

Y sin creerlo había llegado el día dónde aún sin el apoyo de Wei WuXian su hermano querido, y su ex-mejor amigo, había logrado junto a una persona importante para él confesar lo que había resguardado por tantos años.

- ¡¿Qué te qu... - Trató de formular Madam Yu con una expresión épica.

- ¡Es cierto! Desde pequeño a A-Cheng siempre le ha gustado la repostería. ¿Se acuerdan el bizcocho de vainilla que supuestamente habíamos comprado para el cumpleaños de papá? La verdad era que todo fue hecho por él, con mucho amor.... - Habló Yanli llena de fulgor.

Madam Yu no sabía que decir.

Cuando estaba a punto de seguir apoyándolo, una voz peculiar se escucha.

Oh no, era él.

- Lan Zhan sueltameee, ¡ya llegamos! - Exclamó un desesperado Wei WuXian que trataba de despegar los brazos de su prometido de su cintura.

Ahora toda la atención había pasado a aquellos dos tortolos que yacían parados en la puerta.

Jiang Cheng no podía creer lo que veía.

¿Una vez más arruinaría el momento que tanto se esperó?

No, Jiang Cheng no lo aceptaría.

Con la sangre hirviendo y el corazón a millón Jiang Cheng le pegaría un solo puñetazo en la cara, si no fuera por que Wei WuXian y Lan WangJi se encontraran arrodillado con la frente en el suelo pidiendo disculpas.

"¿Qué están haciendo? ..." Pensó Jiang Cheng sorprendido.

Lan Xichen nunca esperaba ver a su hermano arrodillado ante él.

- ¡TODO ES MI CULPA! Olvidé la promesa que Jiang Cheng y yo habíamos hecho de pequeños, si hubiese estado a su lado, él no hubiese sufrido tanto. Perdoname hermano. - Expresó Wei WuXian con todas las fuerzas posibles.

Lan Xichen se volteo preocupado a ver a Jiang Cheng. Este tenía una dolorosa expresión en su rostro. Bajó la cabeza y escupió.

- Ya es muy tarde...- Susurró lleno de dolor. - He encontrado a alguien más que sé que nunca me fallará. - Dicho esto levantó la mirada y con media sonrisa toma la mano de Lan Xichen.

Wei WuXian al ver esto se sintió bastante alegre.

- No heredaré la empresa. Pondré mi propia tienda y viviré con él. - Dijo estas palabras con total honestidad.