(recomiendo escuchar mientras leen: sugar-wanderhouse)
Tom y yo nos mantuvimos ocupados lo que quedó de la tarde, planeamos hacer los deberes del siguiente día pero nos terminamos comiendo la boca como dos lobos hambrientos hasta el anochecer.
Miramos una película de terror, tirados en La alfombra comiendo palomitas y soda. Cuando yo gritaba Bill labraba y Tom lo regañaba, fue gracioso hasta que el supervisor de habitaciónes llegó a golpear la puerta echo una furia, me tuve que ir pero antes de que cerrará la puerta Bill comenzó a chillar como un loco quedé tan sorprendido como Tom.
Al final Tom tuvo que atar a Bill para que no corriera tras de mi. Fue tan raro. Aún que a mi me pareció adorable, ese perro parecía quererme más que cualquier persona que conociera y ni me conocía.
Después de eso fuí a mi apartamento y caí profundo en la cama.
-serás burro Bill-. Sentí que mi corazón se salía y di un brinco en la cama, abrí mis ojos de golpe y me encontré con Tom sentado a un lado.
-¿Que haces aquí? ¿Cómo entraste?-. Note cierta incomodidad en mis piernas y frío en mis brazos, había dormido con la ropa puesta... Y estaba sobre las cobijas, literalmente había caído profundo en la cama.
-Me desperté temprano para venir a darle el desayuno a mi lindicimo novio. Y le saque una copia a tus llaves al inicio del semestre antes de devolvertelas-.
No sabía por qué estar más sorprendido, la historia verdadera o la falsa. Sonreí y le jale del cabello atrayendolo hacia mi -Se que no eres romántico, y esto del desayuno debe de tener algo oculto... Y, ¿para que sacarle copia a mis llaves?-. Sonreí y Tom acortó la distancia casi uniendo nuestros la labios.
-Me desperté temprano, quería desayunar algo con mucho chocolate y pensé "seria mejor probar el chocolate de la boca de Bill" y ahora estoy aquí, esperando robar de tus labios el desayuno que te he traído-.
-Oh... Me robaras mi desayuno?-. Dije con tristeza y Tom río.
-Deja de ser idiota-.
-No puedo-.
...silencio... Y ambos estallamos en risas.
Salí de la cama, me sentía fatal, no vuelvo a dormir con ropa, y sin cobijas. Pude notar por la mirada de Tom que físicamente también estaba fatal.
-Tienes ojeras. Bill, ¿por qué carajos duermes con ropa?-.
-Antes muerta que sencilla-. Dije con cierto tono afeminado, esperando que Tom captará que era una broma.
-Ah... Es ridículo-. ¡Y no la captó!.
-Lo se... Era una broma-. Sonrió casi riendo pero no de mi broma sino de mi pésimo chiste. Luego me jalo hacia la cocina, había una bandeja con dos tasas de chocolate y churros. Nunca he desayunado con chocolate pero me moría por hacerlo.
-¿Tienes hambre?-. mis tripas respondieron por mi gruñendo ruidosamente.
-No, para nada-.Dije con claro sarcasmo. Tom me sonreía, me encantaba su sonrisa, era tan cambiante, aveces era pervertida y otras tan sincera y tierna. Nunca creí posible lo que pasó ayer, pero se volvía a repetir y eso me volvía loco.
Antes de mi confianza y mis chistes tenía el estómago revuelto y no sólo por el hambre, la presencia de Tom tan temprano me ponía feliz, extremadamente ilusionado y nervioso. Era la pura sensación de enamoramiento adolescente, no podía controlar mis hormonas ni mis pensamientos. El problema fue que en ese momento no sabía las consecuencias de eso...

ESTÁS LEYENDO
Juegos peligrosos
Roman d'amour"La vida no es lo que recuerdas, sino como la recuerdas para contarla" ...¿Vivimos para hacer recuerdos? Sí es así, no deje los mejores recuerdos, no hice una historia que sea fácil de contar, y es que... No creo haber tenido una vida, fui un peón e...