Amanecer junto a Rengoku había sido una muy agradable experiencia tomando en cuenta que el rubio irradiaba una calidez indescriptible sin embargo, se habían visto obligados a levantarse para empezar a cumplir con sus deberes como pilar. De aquella manera habían pasado un par de años en los cuales sus encuentros íntimos siguieron sucediendo, aunque solamente eran contactó físico en vez de algo sentimental, ninguno de los dos encontró algún problema ante la idea de mantener ese tipo de relación únicamente carnal.
Todo hubiese sido normal sino fuera por los eventos que sucedieron con el tiempo, la aparición de un cazador de demonios quien cargaba consigo a uno era algo que nadie esperaba, de tal manera resultaba algo ridículo a su parecer, una parte de si mismo se encontró extrañamente satisfecho en el momento que Rengoku había sugerido la muerte de ambos pero la determinación de esa mocosa había logrado que el patrón de la organización les permitiera vivir.
ㅡ¿Estás molesto por el desarrollo de las cosas?ㅡ.
Miró con molestia al rubio tratando de no golpearlo por dar aquella pregunta tan estúpida enfrente suyo, si bien no había pasado mucho tiempo desde que el mocoso Kamado y los demás empezarán a vivir en la finca, aquello no había disminuido su coraje ante la situación.
ㅡSi, quiero matarlosㅡse quejó en un gruñido el cual se intensificó al escuchar la risa del menor.
ㅡEntonces tendre que ver si lo lograste o no, después de que vuelva de mí misiónㅡcomento de manera relajada a la vez que se acomodaba su haori.
ㅡ¿De que se trata tu misión?ㅡinquirio levemente curioso, resultaba extraño que Kyojuro fuera designado a lugares más alejados.
ㅡ Tengo que matar a un Demonio sospechoso de ser la causa de múltiples desapariciones en un trenㅡrespondió con una sonrisa antes de acercarse más aún al albinoㅡtengo que partir ahora mismo, pero cuando vuelva podremos tener un poco de intimidad ¿No crees?
Tras aquellas palabras solo asintió levemente observando al menor partir con una sonrisa en su rostro, tan molestó. Si hubiese sabido lo que pasaría en esa misión, estaba seguro que habrá obligado al rubio a quedarse un tiempo más a su lado y si era necesario, rogaría porque lo incluyeran en aquella misión.
Rengoku Kyojuro había muerto pero el bastardo se aseguró de que nadie además de el muriera y desde ese instante todo fue en decadencia, lo peor de todo fue en el momento en que su propio hermano menor había sido asesinado a manos de la primera luna superior, entonces cuando el patrón se sacrificó para causar la explosión de Muzan, se vio a si mismo en la finca. Observando incrédulo como todas aquellas personas que habían muerto en aquel periodo de tiempo estaban más que vivas sin embargo cierto mocoso de cabellos melocotón lucía increíblemente sospechoso.
Todo se había vuelto una mierda complicada en el momento que se explico cómo se llevaría a cabo toda la situación, se encontraba tan mortificado ante la vista de su hermano menor y su ex amante que ni siquiera pudo enfrentarlos de manera adecuada terminando con ser emparejado con el idiota de Tomioka, observando como el amigo de este y Kyojuro no hacían más que acercarse con el tiempo.
No es como si el mismo no sintiera algo diferente estando con el azabache, este lo había escuchado, apoyado e inclusive soportado en sus ataques violentos en los cuales lo único que necesitaba era descargarse con algo, después de aquel tiempo aislados de los demás habían vuelto a reencontrarse y empezar a convivir de una forma incómoda que poco a poco empezó a volverse más natural para todos.
ㅡ Shinazugawa, ¿Crees que Sabito y Rengoku llegarían a ser algo?ㅡinquirio curioso observando con curiosidad como ambos hombres de cabellos brillantes parecían concentrados en su entrenamiento.
ㅡ¿De qué hablas? Por supuesto que no, Rengoku no es del tipo que mantendría una relaciónㅡrespondió fastidiado a la vez que atacaba al azabache el cual se defendió rápidamente ante el ataque repentino.
No podía culpar a Giyuu por creer eso después de todo, el mismo sabía que su relación con el pilar del agua había cambiado bastante hasta el punto que solían salir juntos a comer Ohagi o simplemente entrenar en la noche pero aquél par era otro asunto. No había momento en que no estuvieran juntos, manteniendo un contacto físico bastante molesto a su parecer e inclusive de vez en cuando solían escaparse pequeños apodos que usaban para referirse al otro, aquello había sido un dolor en el trasero dado que no sabía cómo abordar el tema de su relación con el pilar de las llamas.
Si bien se habían buscado un par de veces, no había pasado nada más allá de unas simples charlas sin importancia junto a unas miradas nada discretas de parte de ambos así que estaban en ese punto de su relación en la cual no sabían cómo actuar o almenos el mismo no sabía cómo hacerlo.
Suspiró tratando de relajarse y dirigir su atención hacía el otro par observando con confusión en el momento en que ambos se dirigían en su dirección con unas sonrisas en sus rostros, la de Sabito lucía un aspecto más suave mientras que la de Kyojuro parecía brillar con la misma intensidad que el sol.
ㅡ¡Sanemi! ¿Podríamos hablar después?ㅡinquirio el rubio sin perder la sonrisa de su rostro.
Oh, eso no se lo esperaba. Kyojuro tomando iniciativa siempre era algo nuevo y completamente gratificante siendo honesto consigo mismo.
ㅡSeguro, ven a mí habitación en la noche, te esperaréㅡrespondió simplemente tratando de parecer indiferente ignorando la mirada emocionada del menor.
ㅡ¡Bien! Nos vemos por ahoraㅡse despidió a la vez que arrastraba al de ojos lavanda consigo, obligándolo a despegarse del pilar de agua.
No sabía que tendría en mente el contrario pero si de algo estaba seguro, es que Kyojuro podía hacerlo temblar de anticipación como en estos instantes y no sabía si eso era algo bueno o malo.
ㅡㅡ
Simplemente no quería escribir algo muy angs ya que la relación actual de ambos era del tipo física, no habían sentimientos relacionados así que me parecía algo fuera de lugar poner algo muy dramático y profundo para una relación carnal.
Lean everyone y nos vemos en el próximo capítulo ✨
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T A S T Y!
FanfictionPara Kyojuro Rengoku no había nada más delicioso y placentero que la comida, su vida parecía estar en orden en aquel instante, su relación con su familia había mejorado, su rendimiento como cazador de demonios era el mejor como siempre y su actual p...