𝙹𝚞𝚜𝚝 𝚂𝚊𝚢 𝙸𝚝 ∥ J͟A͟C͟K͟S͟T͟A͟B͟O͟ +18 || ᵍᵗᵃ ᵛ ʳᵒˡᵉᵖˡᵃʸ

ꨄ︎.11

¿Han escuchado la famosa frase de, "una vez que entras no podrás salir"? Pues tanto el viejo como yo nos encontrábamos en esta situación, nos besábamos con locura cada que podíamos y de vez en cuando nos dábamos el pequeño placer de aquella ocasión en alguna de las patrullas, al salir de servicio.
Pero yo ya no quería eso, estaba comenzando a hartarme un y aunque también es verdad que la última ocasión sentí un placer tremendo (ya que lo hicimos directamente en el parking de la comisaría) también es verdad que quería dar el siguiente paso, descubrir lo que el viejo ocultaba tras ese pantalón, ¿El problema?, que no sabía cómo demostrárselo.

—¿Dan?

—Dime —Horacio volteó hacía mí curioso.

—¿Qué haces tú cuándo quieres comerle el culo a alguien?

—Se lo como y ya —soltó sin pensarlo mientras encogía los hombros.

—Pero...por favor Dan, que esto es enserio.

—Y lo mío también —dijo entre risas.

—Pero haber, vamos a ver, ¿Qué tú, no haces algo antes de ir y comerle toda la poronga a alguien?

—Bueno sí, se lo hago saber.

—¡Pues eso dime coño!

—¡Pues pregunta bien pringao! Además ¿Para que quieres tú ese dato?

Di un respingo ante la pregunta de mi amigo —Pues, veras . . .

—¡¿Le quieres comer el morro a Conway?! —Horacio me miro emocionado.

—Baja la voz coño —respondí en un susurró mientras rápidamente le puse mis manos en su boca.

Él las quito —Haber Fred querido, tú sabes sus debilidades, aprovecha eso y demuestra quién manda.

Suspiré frustrado, la única ocasión que gane había sido aquella noche, pero es qué era tan imposible poder ganarle en algo, él muy cabrón era bueno en darme la vuelta siempre y no podía resistirlo. Me estaba dando por vencido cuando en mi mente paso un momento en concreto que había pasado hace un par de días —Creó que ya tengo lo necesario.

—Pues ve a por todas entonces —dijo Horacio con orgullo, mientras salía de vestidores y yo le seguía.

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Pasaban ya de las diez de la noche, ese día había sido pesado, en la última hora habíamos tenido un atraco sin negociación por la cual Horacio termino abatido y ahora tendría que tomar un descanso en el hospital hasta mañana.
Yo había llegado recién a la comisaría, iba dispuesto a entrar a vestidores cuando escuché a papu junto a Volkov, me acerque para verlos por medio de la pequeña ventanilla.

—Pero ¿No creé usted que se está esforzando mucho? Puedo tomar su lugar sin problemas.

—No, yo me encargo de ello, ve a descansar tú que mañana te quiero aquí puntual y sin fallos.

—10-4 —respondió entre un suspiro.

Vi como Volkov comenzó a caminar hacia la puerta, me puse nervioso, por lo que corrí rápidamente por el pasillo hasta llegar a la puerta que daba hacía las escaleras que llevan a lo más alto de comisaría, me quedé ahí hasta que le vi salir, enseguida aproveche para salir lo más rápido posible y poder alcanzar al viejo.

Pero antes de hacerlo me detuve frente a la puerta, me había quedado completamente embelesado viendo cómo estaba recargado en los lockers, tenía los ojos cerrados y fumaba un cigarrillo, realmente se le veía agotado, todo apuntaba a que le había llegado nueva información importante razón por la que iba a pasar la noche entera en comisaría —«¿Y si le hago más amena la noche?»— Pensé sonriendo de forma pícara y sin dudarlo más entré.
Noté como enseguida se incorporaba, pero al notar que era yo solo suspiró y regreso a la misma posición.

—¿Qué haces aquí? —pregunto de forma sería.

—Vengo a cambiarme para salir de servicio y poder irme —me acerqué a mi locker tras decir eso.

—¿Y cómo está Horacio? —pregunto dando una calada al cigarrillo.

—Esta bien, ya se encuentra descansando en el hospital —comencé a vestirme.

—Ya veo —dio una última calada al cigarro tirándolo al suelo para proceder a pisarlo —Pues en cuanto termines de vestirte te vas a descansar, que mañana los quiero a todos puntuales —dijo dirigiendo su mirada a otro lado.

—¿Está seguro de que quiere que me vaya a descansar?

Dirigió su mirada hacia mí, quería decir algo, pero sus palabras se vieron interrumpidas al verme a mí con el traje de policía alumno —Hace un par de días me dijo que le gustaba como me veía con esta ropa ¿No?

Desvío su mirada rápidamente —Cámbiate y vete ya, que tengo mucho trabajo que hacer.

—Vamos, no sea malo permíteme consentirlo está noche —dije sonriendo mientras ponía un dedo en mi boca coqueto y con la otra me alcé un poco la camisa del uniforme.

Pude notar cómo trago saliva mientras le escuché decir —Vamos a mi despacho. . .