NARUTO UZUMAKI EL PUTO AMO

Parte 31: Esto se va a poner feo.

"Enhorabuena, hoy sois ninjas de la hoja oculta. Sus familiares deben de sentirse orgullosos de vosotros, ya que hoy, se convirtieron en adultos, quiénes servirán a las órdenes militares, y protegerá su hogar, sus aliados, y darán sus vidas por su patria".

Un Chūnin con una cicatriz en el rostro habló, su tono demostraba alegría, y un poco de nostalgia, pero en su ojos, se apreciaba más la alegría, que cualquier otro sentimiento.

Iruka Umino, el sensei, o mejor dicho, el que fue sensei de sus ahora no estudiantes, les sonrio mientras le entregaba sus bandas ninjas.

Pero, devolvámonos 3 años, ya que aquí solo es el comienzo de la aventura de nuestro rubio favorito.

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Tres años atrás.

Naruto Uzumaki, miró la casa grande que estaba enfrente de el, miró detrás de el, y vio al viejo levantándole el dedo pulgar. Parpadeó un par de veces, y volvió a dirigir su vista a la gran casa.

Naruko tomó el brazo derecho de el, y Kurumi agarró su brazo izquierdo, mientras que Ai le levantó desde su espalda.

"Vamos vamos, Naru-chan, esto es emocionante".

Kurumi le sonrió mostrando sus dientes afilados. Pero no fue la única, ya que Ai y Naruko también le sonrieron.

"Hace tiempo que quería estar en una casa así, quiero decir ... Tenemos que compartir, pero compartiremos contigo y con nosotros".

Dijo Naruto un poco molesta. Naruto no sabía que era, pero no parecía a gusto con algo. Por otro lado, Ai lo estrujó un poco, sacándolo de sus pensamientos.

"Por qué tan tenso, Naru-chan ? No hay razón, ya hemos vivido juntos, e incluso no has visto sin ropa".

Kurumi se rió levemente con un tinte rosa adornando en sus mejillas, su cola se movió ligeramente, y sus ojos vieron los ojos de Naruto.

_Supongo que tengo que arreglar algo - mencionó sub mirando la situación -.

"Por cierto, Naruto, tenemos que hablar de algo antes de la media noche, las chicas han planeado hacer una celebración para navidad".

Naruto miró la expresión un poco seria de Ai, girando su mirada hacía Naruko, vió como una gota de sudor bajaba del rostro de la rubia, mientras que Kurumi, desvío su rostro hacia otro lado.

Sin darse cuenta, tres chicas caminaban detrás de ellos, la más alta, llevaba el cabello de color rojo, mientras las dos niñas, tenía el cabello rojo y la otra rubio.

Sarutobi, y las demás mujeres miraron un poco impacientes, aunque ya sabían sobre el asunto, no sabían cómo Naruto iba a reaccionar.

Y como si fuera de esperar, las demás personas que miraban como entraban ellos, se fueron a sus casas a traer cosas para la fiesta que iban a realizar.

Ya dentro de la casa, Naruto caminó y observó que había una escalera para el segundo piso, corrió al fondo, y vió la cocina, algunos cuartos, y dos baños. Su sorpresa era grande, como la casa lo era.