Eddsworld: Moderne Krig

1

Desde Cero

Ha pasado un par de años desde el incidente con Tord Larsson, el trío de británicos lo ha dado por muerto puesto que no podría haber sobrevivido a semejante explosión.

Dejaron de lado las cosas malas de su pasado y se centraron en su presente, cada uno ha sabido sobresalir en su vida.

Apesar de estar separados mantienen constante contacto para ponerse al día. Han logrado cumplir sus sueños y ahora están llenos de plenitud.

...

El teléfono resonaba constantemente, en su pantalla se mostraba que eran ya más de 14 llamadas perdidas, ya estaba harto de tanto alboroto entonces contestó.

–¿Ahora que pasa Matt?– Dijo con su voz profunda y autoritaria para luego soltar un suspiro agotado.

–¡Ay cálmate, no hice tantas llamadas! No vas a creerlo Edd. ¡Adivina que es~!– Habló casi gritando al borde de la emoción.

–Matt por favor... No estoy de humor, estoy ocupado. Habla rápido.– Impaciente por la situación se frotó su sien para intentar relajarse, espero unos minutos a qué su amigo respondiera. –Listo. Voy a colgar.–

–Pero... ¡Edd!– Alargó la "E" en su queja. –¡Te has vuelto mucho más aburrido que Tom!– Exclamó.

–Nadie supera a THOMAS el tren, ese tipo es más agrio que un limón.– Soltó una risa a través de la línea.

–Bueno yo creo que te estás TOMando muy enserio lo que dije.– Trató de aguantar su risa.

–Eso fue terrible Matt.– Se carcajeo por un momento. –Acepta que no puedes superarme.–

–¡Lo acepto! Pero al menos te saqué algunas risas, ahora escúchame.– Tomó aire, habló con rápidez y emoción, típico del pelirrojo.

El castaño un poco aturdido trató de adivinar lo que había dicho su amigo, claro que no había entendido nada, enredó bastante sus palabras.

–Entonces Sr. Edd, ¡¿aceptas?!– Se oían sus chillidos emocionados esperando alguna respuesta del castaño.

–Erm... ¿Matt pued-?– Fue cortado de repente, sus palabras se habían quedado atoradas en su boca.

–Oh vamos Edd, me esforcé mucho explicándolo. Di que si, ¿sí?– Se escuchaban risas masculinas de fondo, ¿acaso era Tom? Probablemente, su tono ronco era inconfundible.

–Bien, acepto. ¿Ahora me dejarás trabajar en paz?– Usó otra vez el tono autoritario.

–¡¡¡YEIIII!!! ¡¡¡EDD VENDRÁ AL ESTRENO DE MI PELÍCULA!!! Gracias Edd eres el mejor, nos vemos hoy a las 8 pm. ¡Adiós!– Soltó otro chillido y colgó la llamada.

–Pero- Espera... ¿Qué? Oh maldita sea, Matt.

Estampó su teléfono contra el escritorio como una forma de desahogo, realmente lo había atrapado como su presa y ahora debía asistir al evento.

Bueno, "cosas de famosos" ni siquiera Edd lo entendía. Ni siquiera entendía como Matt se había vuelto un actor famoso en tan poco tiempo, supuso que habían visto su "talento".

De pronto un rubio cenizo entró bruscamente a la oficina del castaño, dando un portazo y provocando que las ventanas de la habitación temblaran.

–Hellucard. ¿Cuántas veces tengo qué decirte que seas cuidadoso?– Cubrió su rostro con frustración. –¿Qué pasa? ¿Sucedió algo? Ve directo al grano y no seas escándaloso.

–Mis disculpas Rector Gould, es urgente. Unos estudiantes protagonizaron una pelea en el patio de ent-.

–Maldición... ¿Otra vez? Me encargaré ahora mismo.– El castaño dejó su cómodo asiento para dirigirse a la puerta pasando de largo al más joven. –Acompáñame Hellucard, como mi mano derecha algún día tendrás que ocuparte de estos problemas.

–S-si, Rector Gould.– Nervioso por la situación fue detrás del castaño, ambos fueron desapareciendo por los largos pasillos del establecimiento.

El joven veterano tendría que aprender algunas lecciones del experimentado Gould, lecciones que a futuro serían de ayuda.

Porque ellos aún no están solos.

וווווווו•×•×•×•×•×•×•×•×•×•×•×•×•×•×•×•×וו×

Quedó corto y simple, ¿verdad?

Ya iré mejorando para enriquecer con más palabras la historia, pido paciencia por mi novatada.

Espero haber iniciado "bien", sin más que decir... ¡Nos leeremos pronto!