Reto #10 Sal y Pimienta

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No había nada más que pudiéramos hacer, Dayana tardaría en traernos la sorpresa que nos había prometido y no habría más clases así que: Cinthia, Bryan, Harold y yo decidimos contar historias. Harold levanta la mano.

—¡Primero la mía!— interrumpe Cinthia—. La primera vez que se me declaró un chico

— ¡Ohhhhh! — dijimos todos al unisono—.

— Imaginense, yo a su lado caminando por el parque; un clima templado y hermoso. Ambos nos miramos enamorados y en el momento en que me hizo la pregunta para formalizar nuestro noviazgo, una pelota de voleibol llega desde lejos y me pega justo en la cabeza dejándome inconsciente en el suelo.

— Eso es muy mala suerte amiga.

—¡Bú! No me gusto ¡Qué cumpla la penitencia!

Harold siempre quería llevarme la contraria...

—Madura Harold

En ese momento, más rápido de lo pensado se interrumpe la conversación y nuestro juego ante la llegada de Dayana, abriendo la puerta con una amplia sonrisa.

—¿Quién quiere Nutella?

Todos nos emocionamos pero Harold se meté y se roba la nutella.

—¡O me dejan contar mi historia, o no la vuelven a ver!

—¡Tras él!

Inmediatamente nos lanzamos corriendo detrás del pequeño pelirrojo.

Lo que menos pensamos es que los chicos se tomarían la pelea enserio. Zapatos volaron y papeles por doquier. Por error me doy cuenta de que Harold esta por lanzar la nutella.

—¡No, La nutella no!

En ese momento me lancé a atraparla en el aire, pero al caer me pegue con el filo de una mesa y quede inconsiente.

(...)

Al despertar mis ojos se tomaron con una cuatro ojos frente a mí.

—¡Alienígena!

—No, soy la enfermera ¡Y no te daré de alta si me llamas así!

Upss. Eso me pasa por imprudente

En ese momento, Harold llega a la enfermería.

—¿Estás bien?

—¡Dime que salve la Nutella!

— Si ¡Tu salto fue épico! Aunque lamento que te perdieras mi historia. Les hable de nuestro primer beso.

MI mente se queda en estado de coma momentáneo

¿What?

—Pero si tú y yo nunca nos hemos dado ningún beso —refuté—.

—Pues sí, ¡Y vieras sin embargo que fácil me creyeron!

— ¡Te voy a matar Harold!

Me levante sosteniendo la bolsa de hielo en mi frente y lo perseguí por los pasillos. En un momento a otro lo pierdo y me encuentro con Bryan.

—¿Me ayudas a matar a Harold?

Yo intentando hacer alianzas para derrota al enemigo.

—Linda, la venganza nunca es buena mata el alma y la envenena.

—¡No me salgas con refranes del Chapulin Colorado! ¿Por qué no sigues a los buenos (osea yo estúpido) y me ayudas a acabar con Harold?

—Es que no me tienes paciencia...

Travel Trough the UnWritten #DreamyA20Donde viven las historias. Descúbrelo ahora