Día 2: Borracho/Fiesta

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 Caminaba con tranquilidad por el pueblo, no solía salir de noche, a menos que lo hiciera como lobo nocturno, pero necesitaba comprar algunas cosas de último minuto.


Estaba distraído repasando lo que tenía que comprar, no eran muchas cosas pero no le apetecía olvidar algo y tener que bajar de manera innecesaria de su isla, sus pensamientos se vieron interrumpidos al llegar al pueblo.


Saludó a los guardias y a los pocos pueblerinos que aún se encontraban fuera de sus casas. Era uno de los héroes más queridos y respetado, por lo que no era raro que algunas personas le detuvieran a hablarle o simplemente saludarle, no era algo que le molestara por lo que siempre se le veía con una amable sonrisa.


Luego de unos minutos y al verse libre de continuar su camino ingreso a la tienda del pueblo, compro todo lo que le era necesario y en menos de diez minutos se le vio salir del lugar con varias bolsas.


El camino de regreso era muy peligroso de noche, podía quedarse en el pueblo pero no le apetecía en aquel momento, solo deseaba llegar a casa para organizar lo que compro y echarse a su cama a mirar alguna película en la televisión. Cuando se disponía a caminar alguien choco contra su cuerpo haciéndole perder un poco el equilibrio, se dio vuelta para ver quien había sido y seguramente regañarle.


-¿Fargan?- Su compañero reía de manera boba, sus mejillas estaban sonrojadas, se tambaleaba y sus alas temblaban un poco seguramente por el frío de la noche. No necesitaba ser un genio para saber que el castaño estaba borracho.


∞∞∞∞∞∞


No entendía cómo había terminado ahí, dando un masaje en la espalda de Fargan mientras este apoyaba sus brazos en el borde del retrete y vomitaba quien sabe la cantidad de alcohol que ingirió.


Detuvo el movimiento de su mano cuando el mayor se dio vuelta y se sentó en el suelo del baño, sudaba y algunos mechones de cabello se pegaban a su frente, los retiro con cuidado mirando a los ojos del castaño.


-¿Eso es todo?-


El mayor asintió, no parecía tener fuerzas ni para parpadear, noto que el híbrido cerraba sus ojos, seguramente cerca de caer en un sueño de borracho, fue entonces que estiró su mano y jalo la cadena dejando que el agua limpiara el retrete.


-Venga, tienes que lavarte la boca al menos.-


Le ayudo a limpiarse y luego de cinco minutos, tal vez más, ambos salieron del baño y caminaron hacia la habitación, el ojimorado sirviéndole de apoyo al híbrido que apenas podía caminar entre la borrachera y la debilidad que le causó el vomitar de la forma en que lo hizo.


Lo dejo en su cama viendo como caía dormido apenas su cabeza tocó la almohada, lo noto temblar un poco y sus alas se habían movido en un vano intento por darse calor, la noche era fría y en aquella casa de cristal era más notorio. Cubrió con un par de mantas al mayor y suspiro, debía apresurarse en llegar a su hogar, ya era bastante tarde y peligroso, salió de la habitación sin mucho cuidado, Fargan no tenía pinta de despertar pronto, ni aunque un meteorito cayera de nuevo en el pueblo.


Tomo sus cosas del sofá que se encontraba en la sala y se dirigió a la puerta, estando allí palideció. La puerta era de retina y sin Fargan no podría abrirla, había olvidado por completo ese pequeño detalle.



















Mierda...


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Wiii me retrase al segundo día de la week, lo siento, tuve algunos problemas para publicarlo.

En un rato publicare el capitulo que corresponde a el día 3.

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