Capitulo XIX (El gran día)

134 20 61
                                    


- Todo va a salir bien!!, Quédate quieto por favor!!.- Le digo a Amos que no deja de pasearse por el pasillo.

- Pudiste escuchar algo? Que proyecto presentaron? Que les dijeron?.-

- Estamos los dos a la misma distancia del auditorio, escucho lo mismo que vos, osea nada! Podés quedarte quieto, me pones nerviosa.-

- No puedo hacerlo! No me acuerdo nada!.-

- AMOS MORGAN!! ahora no te podés hacer para atrás, dónde quedó el engreído que conocí, quiero que vuelva ya!! Porque necesito al creído no al cobarde.-

Y me mira atónito.

- Perdón no quise decir eso, solamente me estás poniendo nerviosa.-

Pero no me presta atención, mira más allá, hacia el final del pasillo.

- Qué pasa?.- Le pregunto.

- Qué hace acá?.- Dice

- Quién?.- Vuelvo a preguntar ,pero ni me mira sigue concentrado con su mirada más allá.

- Mi padre, es el hombre de traje azul oscuro.-

- Mierda, tranquilo, no lo van a dejar entrar.- Le digo lo primero que se me ocurre, y creo está el pensando.

Y me mira con una cara de susto que me da pena.

- Vos decís que no?.-

- Si!,nadie puede entrar al auditorio más que los estudiantes y el tribunal, tranquilo.-

- Pero va estar acá cuando den el resultado.-

- Yo también voy a estar cuando del el resultado, y si dice o hace algo, podemos no se... pincharles las ruedas al auto, o le doy vuelta un café ensima, no digo golpearlo,  porque estoy a un suspiro de que me echen.-

La chica que estaba exponiendo sale del auditorio llorando a moco tendido, y veo que Amos se pone blanco como el papel.

- los siguientes: Davis, Morgan, adelante por favor.-

Creo que Amos dejo de respirar, su padre nos mira, supongo que escucho su apellido, tomo a Amos por los hombros y le digo.

- Mírame, es el mejor proyecto que van a escuchar en su vida, trabajamos muchísimo, vamos a ganar, ahora solo tenés que creerlo, si? Lo hicimos bien!!.-

Me da un beso rápido en los labios.

- Y eso?.- Le pregunto descolocada.

- Estabas muy cerca,y no quería perder la oportunidad, acabas de decir que no podés pelear , así que no vas a golpearme.- Y el muy tarado sonríe.

- No te puedo golpear acá, pero se dónde vivis.-

- Qué? querés ir a mi casa para seguirlo allá?.-

- Muy gracioso, pero lo bueno es que esta actitud es la que necesitamos ahora, ok, vamos.-

Y entramos, no es un gran auditorio, es un aula bastante acogedora, le damos las copias de nuestro trabajo a cada profesor, aunque ellos ya lo leyeron, porque había que enviárselo unos días antes, pero de esta manera tienen donde leer por si surge una duda respecto a lo que estamos hablando. Nos presentamos y comenzamos a explicar nuestro proyecto, como lo llevaríamos acabo y de dónde sacaríamos el dinero para financiarlo, hablamos durante cuarenta minutos, los profesores parecen conformes con nuestro trabajo pero no dicen nada, debemos esperar afuera, con los demás el resultado.

Cuando salimos el señor Morgan está parado hablando con un profesor que reconozco pero no recuerdo su nombre, su cabeza se mueve hacia nuestra dirección  y nos ve, se disculpa con éste  y viene directo hasta nosotros, siento como Amos se tensa a mi lado.

Mis prejuicios y los tuyosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora