CAPITULO CINCO

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CAPITULO CINCO

Los gritos que la mujer daba llegaba a los tímpanos de Zahida, aun seguía en el salón y miraba como aquella mujer cabreada seguía gritando y andando de un lado a otro, vio a Nathaniel con los brazos cruzados y mirando como sacaba toda la ira de dentro

-¡¡no me lo puedo creer, casado, casado con una ramera, no tienes limites Nathaniel, está buscando tu dinero y tu como un estúpido le das tu apellido, te va arruinar claro que si...-Zahida negó mirando como Nathaniel no decía nada, cabreada dio un paso hacia enfrente y la miro

-perdona pero de ramera nada...-la mujer se paro y la miro, se acerco a ella

-encima tienes el descaro de hablarme estúpida-fue abofetearla pero Nathaniel la agarro del brazo

-bueno Thamy ya está bien...deja de gritar en mi casa...

-¿Qué deje de gritar? Te casas con una...cría...encima...es que...

-bueno, bueno...dejémoslo de lado...olvídate querida...sabes que Nathaniel siempre será tuyo- dijo el otro amigo, Zahida no daba crédito a lo que decía, le miro y ni quisiera decía nada-vamos a cenar tranquilos

-si...será lo mejor-dijo Thamy poniéndose mejor, miro a Zahida y se acerco a ella-que estés casada con el no quiere decir que no tenga a mi cama cuando lo necesite...él es mi hombre...y tu solo tienes un apellido no a él-Zahida sonrió negando y miro a Nathaniel que seguía tan tranquilo-vamos cariño...-dijo caminado hacia la sala donde se cenaba, el otro hombre fue detrás de Thamy y Nathaniel fue a caminar pero Zahida no

-vamos

-no...-dijo apretando los puños, el se giro y la miro-no pienso ir a cenar con esa gente

-esa gente son mis amigos y te guste o no vas a ir

-no voy a ir... ¿Qué soy una ramera ahora?

-para Zahida

-¿Qué soy una puta a la que pagas?

-¡¡¡que pares de una vez!!!-ella se asusto pero no quiso que el lo viera y levanto la barbilla, el se acerco a ella-si no quiere cenar no lo hagas, pero como te vez levantarte de tu cama y salir a la cocina por la noche vas a ver lo que puedo hacer

-no me das miedo-él se acerco mas y ella se le fue la respiración, aquella dominación y esa excitación comenzó a hervirle la sangre al notar tu fragancia, intento no caer y estar tranquila mirándole a los ojos

-puede deberías...-dijo separándose y metiéndose en la sala, ella negó con la cabeza y subió las escaleras hasta su cuarto donde cerró con un portazo y se tumbo en la cama a llorar un poco por toda la situación que acababa de vivir. Sus hermanos nunca la quisieron y nunca la han defendido, siempre la despreciaba y el único que la quería y daba aquellos abrazos era su padre.

Se había puesto el camisón y tumbado en la cama, se quedo dormida un buen rato pero en ese instante noto que sus tripas comenzaban a rugir, se levanto de golpe y miro la puerta, la amenaza no era algo que le daba miedo por lo que se levanto de la cama y salió del cuarto, camino mirando hacia todos lados y bajo las escaleras, fue hacia la cocina y entro en ella sonriendo, se acerco a la nevera y la abrió, miro dentro y vio un contenido algo raro, lo cogió y lo abrió, olía bien por lo que bebió de él y lo dejo en la encimera, cogió un trozo de carne y comenzó a comer, en ese instante escucharon unas risas y las luces encenderse, se giro y miro a Nathaniel, Thamy lo estaba abrazando y se puso seria al verla

-¿enserio? Qué asco...te has casado con una puerca cielo-dijo negando y apartando la mirada, Nathaniel la miro serio pero ella comenzó a tener nauseas-encima va...a no que asco aparta-Zahida salió corriendo entro en el primer baño de abajo y comenzó a vomitar.

Escucho la puerta pero ella seguía vomitando, se encontraba fatal, escucho la voz de Thamy y le dio más nauseas

-no abras hecho nada con ella ¿verdad?

-te quiere callar Thamy...Zahida abre...ey...¿estás bien?

-¿Qué si está bien? Por dios es asqueroso...déjala que se ocupe Raquel vayamos

-para...por qué no te vas...mañana si quiere nos vemos

-¿enserio Nathaniel?

-si...-dijo con esa voz dominante, ella accedió y se marcho-abre-dijo con un hilo de voz, Zahida por un segundo noto en su voz algo de dulzura-quiero ver si estás bien....abre-ella se levanto se limpio la boca con agua y abrió la puerta, se apoyo en ella y le miro-te dije que no comieras tan de noche...mírate...-se acerco y le toco la frente-estas ardiendo

-esto...e...bi-se desmayo en sus brazos, notando sus fuertes brazos.

Escucho voces en su cuarto, le dolía mucho la tripa y tenía más ganas de vomitar

-entonces es una intoxicación

-si...debe haber comido algo en mal estado...

-la carne no...cenamos eso

-pues debe ser algo que ya estaba malo pero a veces el olor nos confunde...

-gracias doctor

-de nada...cuida de esta jovencita...hacia mucho que no la veía

-lo sé...le acompaño-escucho la puerta y abrió los ojos un poco, aun estaba aturdida, intento incorporarse pero escucho la voz domínate de Nathaniel-no te levantes

-vaya...-dijo tumbándose de nuevo con su ayuda-debía está muy moribunda para que dejaras marchar a tu amante

-si...bastante dolor de cabeza das

-bueno...es lo que tiene cuando te casas

-si ya veo...-cerro los ojos y se acomodo, noto la mano de él y le miro-descansa...-ella asintió y le vio marcharse del cuarto, aquel gesto la confundió, ¿era un hilo de dulzura lo que había visto en sus ojos? No podía ser, era un hombre muy serio y sin corazón, que estuviera mala no quería decir que él se preocuparía, seguramente que le iba a reprochar por estropearle la velada con su amiga y amante que por cierto estaba odiando.

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