Narradora ____:
La mañana comenzó temprano, con el hermoso sonido del despertador. Me giré y vi a Finn aún dormido, con su brazo colgando fuera de la cama. Aproveche de que el baño estaba desocupado para alistarme para el día.
—Finn, despierta o llegamos tarde —le llamé suavemente al regresar al cuarto.
Finn murmuró algo ininteligible y se giró, tapándose la cara con la almohada. Me reí y le lancé una camiseta.
—Flojo.
—Ya voy, ya voy —respondió, bostezando mientras se sentaba en la cama.
Después de que Finn se bañara y yo me terminara de arreglar, salimos de la casa y nos dirigimos a la escuela. Al llegar, encontramos a Millie y Noah en el estacionamiento, como de costumbre.
—¡Buenos días! —nos saludó Millie con una sonrisa radiante—. ¿Listos para otro día emocionante?
—Más o menos —respondí—. A ver qué nos espera.
Las clases transcurrieron sin sobresaltos, aunque sentía una extraña tensión en el aire, como si algo estuviera a punto de suceder. Durante el almuerzo, nos reunimos nuevamente en nuestra mesa habitual.
—¿Cómo estuvo la clase de biología hoy? —pregunté a Finn, mientras tomaba agua.
—Lo mismo del semestre pasado, pero estoy empezando a entenderlo mejor —respondió, encogiéndose de hombros.
—¿Y tú, ____? ¿Alguna novedad en Cívica? —preguntó Noah.
—Nada fuera de lo común. Los profesores siguen siendo aburridos, pero al menos este no dejó tarea hoy.
—Por cierto ____, hoy se canceló el ensayo de las porristas —informó desanimada —. No han avisado nada de competencias, así que el entrenador hizo un nuevo horario, solo serán lunes y miércoles.
—Ya tiene sentido porque el entrenador recorrió el horario de fútbol, tanto femenil y americano. —habló Noah.
De repente, un grupo de estudiantes nuevos pasó junto a nuestra mesa, mirando con curiosidad y admiración. Recordé que el entrenador mencionó que necesitaba una capitana para las de nuevo ingreso, y me pregunté quién sería la elegida.
—Oye, Finn —dije, volviendo mi atención hacia él—. ¿Sabes si el entrenador ya decidió quién será la nueva capitana?
—No lo sé, pero creo que lo mencionará en el próximo entrenamiento —respondió Finn —. Lo digo porque tu entrenador y el mío dan el resultado el mismo día.
El del día pasó rápidamente, y pronto llegó la hora del entrenamiento. Mientras nos dirigíamos al campo, sentía nerviosismo y emoción. Quería dar lo mejor de mí, pero si me elegían como capitana, esperaba poder cargar con todo el peso de porrista, jugadora y capitana.
El entrenador nos reunió a todas en el centro del campo y comenzó a hablar.
—Chicas, han estado trabajando muy duro y estoy muy orgulloso de cada una de ustedes. Sin embargo, como mencioné antes, necesitamos una capitana para guiar a las de nuevo ingreso. Después de observar su desempeño en los entrenamientos, he tomado una decisión.
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BFF ( FINN WOLFHAR Y TU ) [REANUNDADA]
Fiksi PenggemarDecíamos ser MEJORES amigos POR SIEMRE