Falling in love with you

VII

Tengo ganas de tirar mi profesionalismo al traste y robarle un beso, pero los recuerdos del final del concierto y se su ¨novia¨ aparecen. Ese pensamiento me hace recordar a Azulea Slora, siento que no he sido como ella desde hace tanto tiempo. Mantengo mi cara de póker, me aclaro un poco la garganta para atreverme a decir esto.

Supongo que porque eres despistado, Sr. Beckham-

No es exactamente lo que diría Azulea pero espero que no se lo tome a mal. Él me mira perplejo, nuestra relación no terminó bien del todo. Después de que lo dejé plantado en el baile de graduación para ir a lo de mi madre, le mande un mensaje de texto con el corazón partido: ¨Sé feliz, perdón pero no estaré ahí¨. Lo sé, no fue la mejor manera, pero no era madura y me sentía del asco.

Sr. Beckham, deseo ser lo más profesional posible, por lo que si va a despedirme. Este es el momento-

Él parece empezar a reaccionar y sacude la cabeza.

No te voy a correr, Adams... Eres de mis mejores abogadas y... No me puedo arriesgar a perderte-

Las últimas palabras me sonrojaron ¡No se refiere a eso, Blue! Sonrío sin siquiera darme cuenta. Él me corresponde la sonrisa, como en los viejos tiempos.

Gracias, Sr. Beckham-

Él se ríe y me sorprendo ¿Qué estará planeando el Sr. Beckham?

No me llamabas así ese 14 de julio-

Me sonrojo de inmediato, nuestra primera vez... Los recuerdos de esa noche se colan en mi mente. ¡Dos pueden jugar ese juego!

Sí, pero sin duda, no eras mi jefe, entonces-

Okey, estoy oxidada. Él ríe y hace una pausa pensativa,

Espero que podamos ser amigos, Adams-

Al rato su humor cambia al oír la voz de la sexy Janine, su secretaria.

Sr. Beckham, la junta con los abogados se movió de las 8:00 a.m. a las 9:00 a.m. y tiene que firmar el contrato con la empresa de su padre-

Dice mientras entra con un café negro bien cargado, que deja en el escritorio del Sr. Beckham y entonces me nota.

¡Blue! ¿Qué haces aquí? ¿Te metiste en problema?-

Dice mi preciosa Janine, que me hace pensar en que no he visto a Diane desde la pelea en su boda.

No, solo hubo un problema con el caso de los Harrington-

Miento y miró al Sr. Beckham, quien asiente con profesionalismo, estrechando mi mano.

Espero seguir obteniendo más información sobre el caso, srt. Adams-

Asiento y me voy meneando la cadera, con esa confianza coqueta que solo Azulea Slora tendría entonces. Al llegar a mi auto, manejo a casa y pienso ¿Qué demonios acaba de pasar? Las escenas se repiten en mi mente, solo así noto los leves coqueteos entre ambos, se sentía muy natural en el momento. Aparco y subo a mi departamento, recuerdo que deje mis cortinas de baño en la mansión Clarkson y al bajar encuentro mensajes de Rhett.

Hago exactamente lo que me pide y voy en camino a la mansión Clarkson.

Pensé que estarías arriba... ¿No quieres que conozca donde vives, no?-

Ríe para sí mismo y asiento. No sé si lo mencione, pero desde antes de lo que pasó, él había empezado a notar cuando mentía y mi forma de jugar con la gente. Él sabía que una sonrisa no era felicidad ni paz en mí, pero me asegure de que nunca sepa por qué.Sabía que después del accidente, sería demasiado obvio y no quise ser débil a sus ojos.

Chico listo-

Sonrío y él me mira como si supiera que estoy haciendo con mi sonrisa. Toco mis mejillas me duelen, no he sonreido por tanto tiempo, pero me duelen.

¿Trajiste lo necesario?-

Asiento y miro como da la vuelta y abre la puerta de copiloto

Sube, madam-

Subo y me acomodo con mis cosas. Luego él sube y empezamos la ruta ¡Espera! ¿A dónde me lleva?