-Despierta, niña despierta- Una voz dulce y calmada trataba de moverla - Hola Atsuko debes abrir los ojos, estoy segura que puedes despertar. - De pronto la chica comenzó a abrir sus ojos lentamente- Aquí lo tienes, vez no costaba tanto despertar.
-Dónde estoy? - La voz de la chica era adormilada y aflojerada pero sus ojos analizaban a la mujer de con ropa de color blanco y negro que estaba en frente de ella
-Estas... por así decirlo en una situación fuera de tu mundo.
-A que te refieres?
-Digamos que estas en la parte media de la vida y la muerte.
-Yo... sigo sin entender.
-No eres muy inteligente verdad? - Akko infló sus cachetes por el comentario- Estas en el limbo.
-¡Que!
-Si ya sabes, el lugar a donde vienen las almas que no se deciden a donde ir.
-¡Pero yo no estoy muerta!
-No aún.
-Estoy soñando verdad?
-No.
Akko se paró de golpe y noto que el lugar en el que estaba era poco común. El piso parecía tener agua, pero no estaba mojada y las paredes son todas de color negro.
-Si esta es una broma de Constance porque no quise agregar sus drones al show te aseguro que olvidare que mides menos que un niño de 12 años y pateare tu trasero.
-No es una broma, te juro que estas entre la vida y la muerte.
-¡Porque coños sigues insistiendo en que estoy muerta! - La mujer a su lado giro rápidamente con su puño en mano y lo estrello en su rostro. Ella por instinto solo cerro los ojos, pero lo que vio la asusto. Su rostro parecía desaparecer como si fueran partículas y retomo su forma apenas la mujer regreso su puño.
-Aquí no puedes ser dañada, estas en este lugar para que me des razones para regresarte a tu mundo o para enviarte al descanso eterno. - Akko la miraba asustada, por fin había procesado toda la información.
-Entonces si morí. - sentía que su corazón se iba a salir de su pecho. -Yo no pude haber muerto yo estaba bien.
- Cuando hablas de bien ¿te refieres a no comer, no dormir, llorar todas las noches y trabajar 18 horas?
-Me estás diciendo que morí por mi ritmo de vida?
-No exactamente solo que es gracioso que digas que estas bien cuando sabes que realmente no es así. - Akko no podía responderle el miedo la consumía. - Supongo... que tienes miedo?
-Si.
-Bueno no lo tengas, puedes regresar allá si tú lo quieres.
-Pero me acabas de decir que debo de convencerte y no sé qué mierdas quieras que haga. - La ansiedad comenzaba a consumirla esto no le podía estar pasando a ella.
-Realmente no tienes que hacer algo en específico, solo tienes que hablarme con la verdad.
- ¡Que verdad! - La cantidad de emociones que tenía que manejar ya era algo imposible, sentían que su corazón iba a salir corriendo de su pecho.
-Tu verdad solo eso.
-¿Pero que verdad?
-¿Quien es Atsuko Kagari?.
-Yo...- Esa pregunta la hizo quedarse en blanco- En serio no sé qué esperas o que quieres, pero no sé cómo reaccionar ante todo esto.
-Pues tomate tu tiempo, podemos estar aquí el tiempo que tú quieras. -La mirada de Akko cambio de inmediato apenas y escucho la palabra tiempo.