¿Será fan? (tú, Dimash, Tom Holland, BTS)

Formando Bandos

En una habitación bastante bien decorada se encontraba un grupo de nueve chicas discutiendo. La mayoría no superaban los veinte años. Tenían una apariencia ordinaria, sin embargo sus rasgos eran fácilmente distinguibles. Solo era cosa de observar sus pieles pálidas y ojos rasgados para saber que eran asiáticas.

Cualquier persona que las viera diría que estaban en una pijamada o algo por el estilo, pero la realidad iba un poco más allá. Lo que unía a estas jóvenes era la música de BTS. Ese era su único lazo.

Una de ellas, sostenía una laptop y miraba horrorizada la pantalla. Las demás cacareaban ideas sueltas, otras solo escuchaban. La chica de la laptop leía en voz alta las noticias sobre su banda favorita.

—Bien chicas; no sabemos suficiente sobre esta mujer, pero ya hay personas encargándose de eso.

—¿De que país es?

—De Latinoamérica.

—¿Eso es un país?

—Al parecer no, pero no puedo distinguir de dónde es solo por su foto. Todas ellas me parecen iguales. Con sus ojos grandes….aghhh!

—No se desesperen. Esa información llegará sola. Lo importante es saber que intenciones tiene con nuestro Jimin.

—De seguro es una fan radical.

—Puede ser, pero no me da esa sensación. Hay algo más. Después de todo ¿Por qué Jimin abrazaría a una fan radical?

—¡Chicas! —exclamó una décima chica, entrando a la habitación con su celular en mano— tengo noticias. Una de mis primas de segundo grado tiene una amiga que tiene una hermana china y es parte de dos fandoms. Es Army, pero también es Dear.

—¿Dear? ¿Qué es eso?

—Son fans de alguien llamado Dimash Kudaibergen. —afirmó enseñando una foto— El punto es que ella dice haber recibido una notificación sobre un anuncio que se entregó a la prensa china mientras que él estaba a América. Ese artista, estaría comprometido con una mujer extranjera, latina, específicamente.

—¿Y?

—Revisando la lista de huéspedes del hotel, descubrí que BTS no eran los únicos famosos alojados allí. También estaba Dimash Kudaibergen…¿Coincidencia?

—Aún así, no podemos saber si la mujer es la misma.

—Exacto. Por eso es que mi investigación se hizo más exhaustiva. —sonrió, con orgullo— También busqué quienes eran ciudadanos estadounidenses en el hotel y quiénes no. Adivinen: la única persona de América Latina era ella.

Todas en la habitación pusieron cara de asombro. La chica de la laptop se levantó con brusquedad de la cama en la que estaba sentada.

—¿Con que así son las cosas? ¿Eh? Eso explicaría porque BTS se desvió de su ruta prevista. El hotel que habían agendado era una trampa para despistarnos. Pero como siempre, los terminamos encontrando. Así que, todo fue una plan para verla, encontrarse con ella en el mismo lugar.

—No puedo creer que los demás chicos se hayan prestado para eso. —dijo otra lamentándose.

—Nada nos asegura que Jimin no actuó solo. Quizás solo convenció a los demás para que lo siguieran sin decirles nada.

—Espera un momento…¿Quién va a ser tan tonto como para traer a su prometido consigo si se va a encontrar con alguien más?

—Es una buena pregunta. —expresaron las demás.

—Por lo que la hermana de la amiga de mi prima dijo, el artista tenía un concierto poco después, así que es probable que estuviera fuera del hotel ensayando para eso casi todo el tiempo.

—¡Entonces esa mujer es una desgraciada! —dijo furiosa una— ¡no le importa mentirle en la cara a su prometido!

—¿Y nuestro Jimin sabrá que ella se va a casar? —preguntó otra preocupada— ¿Y si ella lo está engañando también?