Evirus

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Solo en momentos como estos, en donde su preocupación por Hoshi era mayor que todo, se lamentaba por no haberle insistido lo suficiente para que se alejara de su peligroso novio porque de haberlo hecho, ahora a la que él consideraba un hermano menor, estaría con él y no con quién sabe quién. Pero también era un hecho que al azabache tampoco le hubiera sido fácil librarse del peli-castaño aunque él hubiera tenido el valor suficiente para terminar con él, algo que Hoshi nunca hubiera hecho debido a que había aprendido amarlo tan cual era.

El dibujo que hacía el rubio, consistía en un símbolo extraño y al parecer muy antiguo, el mismo parecía ser de esos símbolos que solo el gobernante del pasado Egipto solía hacer, y cuando solo le faltaban unas cuantas líneas para dar por terminado el dibujo, su lápiz, resbaló de su mano y fue a parar debajo del pupitre de uno de sus compañeros, el mismo pupitre que estaba en el centro del salón y si se ponía de pie para recogerlo interrumpiría la clase y su profesora seguramente lo obligaría a hablar delante de toda la clase del tema que él estaba explicando y no quería pasar por ese incomodo momento.

—Everius.

Susurró en voz baja, apuntando con su mano, disimuladamente, hasta donde estaba su lápiz, y este vino hacía el de inmediato y SeungKwang sonrió al comprobar que a ese sencillo conjuro ya lo había dominado por completo para su sorpresa.

Con esa felicidad ya en el, continuó su peculiar dibujo y una vez que este estuvo terminado lo contempló desde todos los ángulos posibles.

—No entiendo que signifique pero por algo soñé con esto...

En efecto, el había tenido un sueño en donde aparecía ese símbolo pero ese mismo aparecía sobre el centro de un árbol, detalle que Seungkwang había olvidado por completo y era por eso que nada parecía tener sentido para el.

La sobrina de Seugkwnag, ocultó su dibujo en medio de las hojas de su cuaderno en el momento en que la preceptora de la institución educativa, entró acompañada por un hombre bastante elegante de tez blanca, alto, de cabello blanco, esbelto y de ceño fruncido.

—Señorita, Cannel, perdón por interrumpir su clase.

Se disculpó la señora de cabellera marrón con la profesora de biología y después de que esta le aclaró que no había problema alguno, la preceptora se colocó en el centro del salón junto con el hombre y habló mientras lo señalaba a este.

—Alumnos, les presento al señor Wilder Nappa, su nuevo director.

Y mientras el hombre recién presentado se dedicaba a dar un discurso previamente preparado y a intimidar a más que uno con su seria mirada, el rubio se mantenía al margen de todo pero no pudo controlar sus poderes mentales con facilidad y después se cerrar los ojos fuertemente, en un intento por controlarlos, terminó por oír lo que pensaba el nuevo e intimidante director.

«...exterminare a todos y cada uno de los vampiros de Weston»

— ¿Qué? —Dijo Seungkwang, arrastrando la palabra al no poder creer lo que acababa de oír.

Tal vez había oído mal. Era imposible de creer que el director hubiera estado pensando lo que el oyó, hasta donde sabía nadie más que él y Hoshi sabían sobre la presencia de vampiros en Weston, ¿pero y si estaba equivocado? ¿Y si ese hombre también lo sabía? Porque después de que oyó lo que él pensó todo podía ser posible ¿pero por qué decía que acabaría con todos los vampiros?


:) ;)


—Esta no es una visita de cortesía, insecto.

Aclaró con ímpetu, Seungcheol, el padre de ,Mingyu y por lo tanto también de Wonwoo, a la persona que tenía delante de él, el sujeto de cabellos azabache, sonrió lesivamente ante la aclaración ya que tenía perfectamente claro que si dependiera de Seungcheol, jamás volvería a verlo a la cara en todo lo que le restaba de vida, cosa que tampoco le molestaba porque aquel hombre tenía un carácter de los mil demonios.

—Créeme que lo sé.

Le ofreció un trago a su padre, un trago de un peculiar color, y Seungcheol sin meditarlo mucho aceptó sin entusiasmo alguno la bebida que no era más que sangre.

El misterioso hombre de ojos azabaches, le ofreció asiento a su único acompañante y este sin dejar de hacer visible su seriedad se sentó en el sofá de cuero negro que estaba junto a él y el sujeto que para nada era del agrado de Cheol, habló.

—Las malas lenguas de la cuidad dicen que hay un caza vampiros por los alrededores de Weston...

El hombre de peinado de lado, lo interrumpió a causa de su gran impaciencia y por lo mucho que le molestaba tener a ese idiota cerca.

—Ve al grano.

—Ese caza vampiros es también un vampiro, y tiene gustos alimenticios bastante peculiares.

Sonrió ante sus últimas palabras y al percatarse de la impaciencia de Seungcheol, prosiguió con la aclaración.

—Se alimenta de vampiros, y tú ya sabes lo que pasa cuando un vampiro es mordido por otro vampiro.

Bebió un sorbo de su trago al finalizar su explicación.

—Muere.

Dijo Seungcheol anonadado de solo pensar en la absurda idea de que un vampiro quisiera matar a otros vampiros, sino que también se alimentaba de ellos, al procesar toda esa información se quedó más pálido de lo que ya era y por primera vez en siglos su cuerpo tembló de miedo, cosa que no era común en él.

—En efecto, pero lo importante ahora no es cuidar solo nuestras espaldas sino también la de mi padre, porque si él muere también morirán Mingyu y Wonwoo, que no se te olvide que mi padre los volvió lo que son ahora y si ese tal caza vampiro lo mata también matara a tus hijos, qué injusto ¿no?

Wonho, era uno de los pocos vampiros, originales, que aún permanecía en Weston y él fue el causante de que los integrantes de la familia Kim fueran los monstruos que hoy en día son, y si Wonho moría en manos de Kai, también morirían los hijos varones de Seungcheol, ya que fue Wonho quien les dio vida eterna en el momento en que ambos jóvenes estuvieron a punto de morir por un accidente y como Wozzi quiso que vivieran a cualquier costo le rogó al padre de su amigo que se alimentara de sus hijos y este acepto, transformándolos así en vampiros, además de que el abuelo de Hoshi no era una criatura sobrenatural cualquiera porque él había vivido por millones de décadas y no era un vampiro común como Mingyu o el mismo Wonwoo, él era mucho más y su poder era infinito gracias a los siglos pasados.

Y si Hoshi no era una ser sobrenatural como la familia de su padre era porque su madre, que en paz descanse, era una humana más de la cual su padre se enamoró perdidamente.

COLORS IN THE DARKDonde viven las historias. Descúbrelo ahora