Twisted Wonderland [Oc]

Capítulo 1

— Efectivamente, es un lugar muy pintoresco ¿No? —Pronuncié con un poco de burla a la nada.

Cuando fuimos a revisarme en el espejo mágico pasó lo que le dije a Dire, así que se rindió en eso de llevarme a casa. De camino a aquí le dije que probablemente Grim volvería para buscar refugio, también le avisé de los Overblot's. Crowley parecía impresionado y preocupado, no me esperaba menos viniendo de él.

Ni bien entré fui por una escoba y algún cubo, no planeaba esperar a Grim y tampoco le tenía mucho miedo a los fantasmas.

— Hihihi~... —Woah, eso fue rápido.

— Hey fantasmas, si me van a matar háganlo rápido porfa~'

Los ex's amigos de Casper se mostraron con caras desorientadas, qué les puedo decir, no le tengo aprecio a mi vida.

— ¡¡F-F-F-F-FANTASMAS!! —¿Oh? ¿Grim llegó tan rápido?

Grim empezó a escupir fuego por toda la habitación, y yo pues... salí a buscar a Mamá Cuervo, por que más de una vez me confundí la derecha con la izquierda, soy pésima para dar órdenes, de hecho soy pésima en todo.

— ¡MAMÁ, MAMÁ, MAMÁ! —Empecé a gritar por instinto cuando por fin vi a Crowley... Momento ¿le dije mamá?— ¡Grim está quemando la casa por culpa de los fantasmas!

⌘

— ¡No se preocupe señor, nosotros haremos las tareas de limpieza si nos deja quedarnos aquí!

El director nos miró con duda, sé que no somos el dúo más confiable, pero tanta sospecha duele, jaja.

— ... Está bien, pero tú y yo hablaremos mañana. De mientras, puedes usar el viejo uniforme de gimnasia cuando trabajes. —Me entregó una bolsa con la ropa. Supongo se sigue debatiendo si creerme por completo o no, es razonable.

— Tenga una buena noche Señor director, gracias de vuelta~ —Crowley también se despidió y se fue a donde sea que duerma, qué lindo.

Una vez la silueta de Dire ya no se veía por la ventana me dirigí a Grim.

— Hey~, Grim~, agradéceme que tienes un lugar para dormir ahora. —Obviamente se negó, y de paso me insultó, a decir verdad me estoy cayendo casi a pedazos, me duele todo, hoy fue una noche muy larga.

Pensaré mañana que voy a hacer, ya que ahora me siento medio drogada.

— Grim~, vamos a mimir~.

— ¿A qué?

Me tiré en el sofá de la sala, las contracturas son problema de la yo del futuro.

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— ...Vamos, despierten~ —Escuchaba murmullos, ¿mamá?

— Mmm... No quiero volver...

— Apúrense... o no volverán a despertar...

— ¡Como nosotros! —Finalmente abrí los ojos, tenía a una cosa blanca en frente de la cara... Ah, cierto, los fantasmas.

— Uhg... Chupame la pija y dejate de joder, querés. La re puta madre, como me duele todo...

Finalmente se callaron, me levanté y busqué el baño para cambiarme. Me miré en el espejo y pude notar lo demacrada que estaba, mis ojeras se hicieron más notorias que antes y mi cabello estaba súper enredado ¿Así me veía desde ayer? Oh por dios, que vergüenza.

Tomé unas tijeras oxidadas que tenía convenientemente cerca y me corté el cabello un poco más abajo de los hombros, si la iba a cagar la iba a cagar hasta el fondo, nada de dejar las cosas a medias.

— ¡Humana, apresúrate! —Gato de mierda, todavía me duele todo.

⌘

Mientras bajaba las escaleras me puse dos hebillas que encontré enredadas en mi cabello antes, ¿cuanta porquería tenía ahí?

— Hey, fantasmas, ¿saben donde puedo conseguir alguna coleta? —El más flaco señaló a una cajonera empolvada.— Gracias~.

Luego de hacerme un rodete mal hecho abrí la puerta principal de un portazo.

— ¡Dirijámonos a la desgracia, mi peludo compañero! —Le grité al aire.

— Veo que estás muy animada. —Joder que susto.

— Ah, Crowley buenos días. —Me aparté de la puerta.— Tengo que avisarte de unos eventos del juego relacionados con Grim —El gato me miró confundido.— ...y una de las estatuas de los siete grandes. Pasa, pasa.

⌘

— ¡Entonces me estás diciendo que crees que YO, el gran Grim quemará una de las estatuas por accidente? ¡Imposible!

Mientras caminábamos en la zona principal yo le expliqué a Grim sobre las estatuas y lo que representaban, además de decirle que bajo ningún concepto tenía que pelear con los estudiantes. Obviamente se quejó por la poca confianza que le tenía.

— Ah, mira, ahí está Hades, es mi favorito. —Dije mientras nos acercábamos a las figuras.

— Oh... No creí que sabrías tanto, nada mal para una humana sin magia.

— En mi opinión la magia solo los hace más flojos. —Grim me miró ofendido.— Es mi opinión, no me mires así.

Bajé la escoba de mi hombro, el cual también me dolía, y saqué un plumero del bolso que me dio Crowley.

— En fin, mucha palabrería ¡Usa esa habilidad felina que tienes y desempolva esas estatuas! —Le ordené mientras le pasaba el plumero.

— ¿Ah? ¿Que hace una chica en este lugar? —Ganarme la vida ¿No te jode, meloncito?— Woah ¿Y tú no eres ese mapache de la ceremonia de entrada? —¿Vamos directo a las burlas? Eso fue rápido.

— ¡Grr! ¡¿A quién le estás llamando mapache?!

No estoy dispuesta a pasar por todo el prólogo de mierda otra vez, así que simplemente tomé a Grim del pescuezo para que no la cague.

— Es un placer conocerlo, pero me temo que ahora estamos trabajando, así que tengo que pedirle que se retire y no distraiga a mi compañero, gracias y tenga un buen día, joven Trappola —Ace se me quedó viendo confundido, normal, si ver a una chica en un colegio para hombres ya era raro, imagínate que esta se te acerque, te de una sonrisa y luego se retire a limpiar... Seh, yo creo que perdió tres neuronas.— Gato de mierda, te dije que no tenías que pelear con ningún estudiante. —Le grité susurrando a Grim.

— ¡No hice nada!

— No sé si te diste cuenta ¡Pero siempre se nota cuando quieres pelear con alguien!

Dejé de retar a Grim por que sentí una mano en mi hombro. Cuando me dí vuelta encontrándome con... ¿Cater?