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Había pasado 3 días desde su supuesta muerte, el funeral se acercaba y con eso el plan de una nueva vida sin ser detectado por nadie.
Era un domingo cualquiera, el sol era potente por la época de verano que recién llegaba, con ventilador girando de un lado a otro para refrescar el interior del hogar amarillo.
Segismundo se encontraba con todo su cabello revuelto junto con ambas manos en este en un intento fallido de que este no calera en su húmedo cuello que le llegaba el aire fresco que expulsaba el ventilador, esto llamó la atención del único que estaba en esos momentos junto a él, ya que cada integrante se quedaba al menos un día con el gallego para vigilar que este no se desmayara o tuviera un ataque de ansiedad.
En este caso tocó Nathan, el británico observaba como la cabellera de Segis había crecido hasta llegar a la parte inferior de su cuello, estaba largo, se notaba la molestia en el gallego al momento de agarrarlo para que esté no molestara tanto con el calor.
-Deberías cortarte el pelo ㅡ Apuntó las puntas del cabello castaño oscuro.
-Seguro puedo salir de aquí y decirle a alguien que me lo corte, tu sabes como son las señoras de las peluquerías, todas chismosas y le dirán a todo mundo que sigo vivo ㅡ Bufo al terminar, no pensó que estar muerto sería tan difícil en especial en las épocas de verano.
Nathan quedó pensativo, aquello lo que dijo el contrario era totalmente cierto, abrió sus ojos ante una idea.
-Quieto ahí, traeré algo ㅡ Dicho esto desapareció al cruzar la pared de la sala.
Suspiro del cansancio, incluso al estar en playera de tirantes con unos shorts no ayudaban con el calor de ese lugar, afuera todo era peor, lo único bueno del momento era el vaso con agua a su lado que contenía unos 2 cubos de hielo en este, haciendo que el agua esté helada como es mejor para pasar los 29° grados.
Tomó un sorbo de la fría agua, dándole un escalofrío al sentir el cambio de temperatura pasar por su esófago, refrescando todo su interior, dejó el vaso en la mesa de centro donde había una planta en medio.
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