Profunda y fundamentalmente

3.2K 142 7
                                    

CAMBIO DE CORAZÓN

Por Niteryde

Traducido por Inuhanya

-.-.-.-.-.-

-.-.-.-.-.-

11.- Profunda y fundamentalmente

-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-

Bulma nunca se sintió más impotente en su vida de lo que se sintió al mes siguiente, mientras veía de primera mano lo mucho que Vegeta sufría en su sueño. Le dolía el corazón observarlo, sabiendo que no había nada que pudiera hacer para ayudarlo realmente. Nunca se atrevió a tocarlo para despertarlo, aunque mientras las noches pasaban y sus pesadillas se intensificaban, estaba comenzando a sentirse tentada a hacerlo.

Ahora estaba sentada en la cama, sus ojos azules cansados y llenos de preocupación. Había despertado ante las danzantes luces azules en su habitación, antes de darse cuenta que, inconscientemente, Vegeta otra vez estaba elevando su ki en su sueño. Sus manos estaban apretadas, una luz destellaba rodeándolas como un fuego que no podía tocarse. Era una visión que la había asustado la primera vez que despertó ante ella, pero con el paso de las semanas, se dio cuenta que el ki que él reunía nunca se dispararía sin su orden consciente, y su temor lentamente desapareció.

Bulma suspiró, perdida ante qué hacer mientras lo observaba respirar fuertemente en la cama junto a ella, su cuerpo bañado en sudor se retorcía intranquilo en su tortuoso sueño. Sus músculos estaban contraídos, y claramente podía ver lo tenso que estaba. Se encontraba en esta posición al menos unas pocas veces a la semana, y cada vez, simplemente decidía dejarlo tranquilo. Algunas veces, la mente de Vegeta se calmaba en su sueño y dormía tranquilamente. Aunque la mayoría del tiempo, eventualmente se despertaba sobresaltado. Cuando eso pasaba, ella fingía dormir para cuidarle su orgullo.

La primera semana, cuando Vegeta despertó así, dejó la habitación para ir a entrenar, sin importar la hora que era. Pero en las semanas siguientes, lentamente comenzó a quedarse en la cama con ella en vez de irse. No lo encaraba, pero podía sentirlo acercarse desde atrás. Vegeta nunca la abrazaba, pero su aliento siempre estaba cerca de su piel mientras compartía su almohada. Eventualmente se volvía a dormir, y descansaba tranquilamente por el resto de la noche. En ese sentido, Bulma le ofrecía consuelo. Tal vez sabía que estaba despierta; tal vez no. No lo sabía. En la mañana, ninguno de ellos hablaba de eso.

Pero ahora, Bulma estaba cansada de pretender. Quería ayudarlo, y con esa terca determinación suya, decidió hacerlo. Sabiendo muy bien el riesgo que estaba tomando, muy lentamente se acercó más a él.

"Vegeta?" preguntó ella tranquilamente. Cuando no le respondió, se acercó más, moviéndose estratégicamente hacia su hombro para no estar al alcance de sus manos, las cuales aún brillaban con una intermitente luz azul. Se inclinó cerca de él y susurró en su oído-

"Todo está bien."

"Nada está bien!" Gritó Vegeta furioso paseándose de un lado a otro. Estaba vestido en su armadura real, su capa ondeaba tras él con una gracia que contrastaba fuertemente con su rabia. En frente de él, observándolo, estaba una hermosa mujer con ondulado cabello azul, vestida en los colores reales de una reina. "Él ya ha hecho su demanda, y está amenazando el planeta entero si no le doy lo que quiere!"

"Bueno, qué quiere?"

Su caminar llegó a un alto. "Quiere a nuestro hijo," dijo finalmente, su espalda hacia ella. "Quiere a Trunks."

Su tono cambió ante eso. "Pero, Trunks solo es un bebé. Qué podría querer con un bebé?"

"Criarlo como suyo," respondió, su voz inusualmente monótona. "Torturarlo, corromperlo..."

CAMBIO DE CORAZÓNDonde viven las historias. Descúbrelo ahora