٭ 𝙁𝙤𝙪𝙧 ٭

1K 107 43
                                    

El sonido de alguien llamando a su celular por quién sabe cuantas veces lo terminó por despertar, no quería contestar así que simplemente le dio en el botón de encendido para que este dejara de sonar. Al parecer la persona que lo llamaba se rindió, ya que no volvió a llamar después de eso.

Intentó mover sus piernas para acomodarse mejor en la cama y seguir durmiendo, pero otro par de piernas se lo impidieron. Fue ahí cuando se dio cuenta de que aún seguía sobre su hyung, el cuál seguía dormido, y desnudo, al igual que él.

Sonrió con sus mejillas levemente sonrojadas al recordar lo que había pasado. Iba a despertarlo para que lo dejara libre y así poder ir al baño, pero al ver su rostro tranquilo y con una sonrisa casi imperceptible se arrepintió. No quería que esa tranquilidad se esfumara así que simplemente apoyó su cabeza en su pecho, escuchando los latidos de su corazón y dibujando pequeñas figuritas con sus dedos.

-Estoy muy enamorado de ti, Hyunjin hyung- murmuró.

-Yo también lo estoy, Seungminnie- el mayor respondió con su voz más grave de lo normal. El pelirrojo palideció.

-Y-yo lo siento, p-pensé q-que estabas dormido...- respondió con nerviosismo.

-No desde que tu teléfono empezó a sonar, ¿quién llamaba?- se acomodó mejor en la cama, soltando al menor el cual se sentó rápidamente en esta, tapándose con una almohada.

-N-no lo sé, no quise contestar, aunque deben ser mis padres. Ya sabes como son- dijo aún nervioso por haber sido escuchado -hyung, ehm... ¿podríamos, por favor, ignorar todo lo que pasó?

-¿Por qué? ¿Te arrepientes de lo que pasó?- dijo el mayor algo decepcionado.

-¿Qué? No, no, no, claro que no- Seungmin se apresuró a responder -es solo que, ya sabes, no quiero que tengas problemas con Jeongin.

-Jeongin no tiene por qué saber- frunció el ceño.

-Claro que no tiene que saber, pero no podemos seguir con esto... y-yo, bueno tú... tú estas con él y...-

-Sabes que puedo terminar con él, ¿cierto?

-Pero no quiero que lo hagas, no quiero que su corazón se rompa.

-Bueno, pudiste haber pensado en eso antes de acostarte con su novio- respondió el pelinegro molesto e indignado.

-¿Disculpa? Yo no fui el que me insistió en que fuera egoísta y me dejara llevar- el menor se cruzó de brazos con su ceño fruncido. En realidad sí lo había hecho, pero Hyunjin no tenía que saberlo, sería muy vergonzoso.

Un incómodo silencio se instaló entre ellos, sentían como si el tiempo se hubiera detenido, pero ninguno quería dejar el orgullo de lado.

-Escucha, Cherry, lo siento. No debí haber dicho eso, fui un completo idiota.

-Sí que lo fuiste- replicó mirando hacia abajo, donde sus dedos de las manos jugaban nerviosamente sobre la almohada que lo cubría.

-Lo siento- murmuró acariciando el brazo del menor -Me alteré, no quiero solo dejarlo así, Cherry.

-Pero, hyung, él te ama mucho, y yo me voy por seis meses... no creo que quieras esperarme todo ese tiempo... es mejor que-

-Piénsalo, solo piénsalo. Cuando regreses hablaremos mejor de todo esto, ¿bien? Yo encontraré una manera de terminar mi relación con Jeongin sin lastimarlo y podremos estar juntos sin hacerle daño a nadie- lo interrumpió el pelinegro hablando tan rápido que a Seungmin le costó un poco entender todo lo que le dijo.

-Hyunjin hyung, no es tan fácil como eso... las cosas no funcionan así- Seungmin hizo un puchero tomando la mano del mayor.

-Pero podemos hacer que funcione- este insistió imitando el puchero del menor.

Y ahí estaba otra vez Seungmin sin saber que hacer.

Y es que conocía a Hyunjin tan bien, sabía que este podría llegar a ser muy manipulador si se lo proponía y no se rendiría hasta obtener lo que quería. Sabía que no debía caer en sus encantos porque era peligroso y podrían salir lastimados. Pero Seungmin también estaba enamorado, muy enamorado, y mandaría todo a la mierda solo para ver a su hyung feliz.

Y así fue como Seungmin terminó accediendo a lo que le pedía su hyung por segunda vez en menos de doce horas.

-Bien, lo pensaré- suspiró rendido y el mayor soltó un chillido de emoción para seguidamente plantarle un beso en los labios.

Un Seungmin sonrojado salió corriendo de la cama en dirección hacia el baño, tomando en el camino el bolso con su ropa que había traído la noche anterior.

-Lindo culo- dijo Hyunjin antes de que Seungmin cerrara la puerta del baño.

-¡Cállate!- exclamó riendo.

Luego de que los dos estuvieran bañados y vestidos, se dirigieron a la cocina ya que morían de hambre. Seungmin preparaba la masa para pancakes mientras Hyunjin cortaba la fruta y la acomodaba de manera bonita en un plato. Se robaban tiernos besos de vez en cuando, haciendo al otro sonreír.

~♡~

Estaban terminando de desayunar cuando Seungmin se acordó de la razón por la cuál se había despertado, así que al terminar de desayunar, se dirigió rápidamente a la habitación de Hyunjin para ver las notificaciones de su celular. Sintió una leve presión en su pecho al ver quién era la persona que lo estaba llamando.

Jeongin.

No quería, pero tenía que devolverle la llamada para asegurarse de que todo esté bien.

-¿Viste quién te estaba llamando?- preguntó Hyunjin llegando a su habitación.

-Sí, era Jeongin. Lo voy a llamar para asegurarme de que todo esté en orden, así que por favor no hables- se llevó su celular a su oído luego de pulsar el botón de llamar y le dio un piquito en los labios a Hyunjin.

Jeongin contestó al quinto tono.

-Hola, hyung. ¿Como estás?

-Hola, Innie. Estoy bien. Disculpa que no te haya contestado, estaba dormido.

-Está bien, hyung, es que ya te extraño y quería saber si querías que fuera a tu casa en la tarde para ayudarte en lo que te falte.

Seungmin se sorprendió un poco.

-Oh... eh, claro que sí, Innie, ¿te parece a las tres?- siente a Hyunjin abrazarse a su cintura.

-Sí- lo escuchó exclamar alegre y sonrió levemente -a las tres estaré allí. Hasta luego, Seungminnie hyung.

-Hasta luego, Innie- colgó la llamada y subió su cabeza para ver a Hyunjin -soy un muy mal mejor amigo- dijo en tono meloso y lo abrazo por el cuello -mientras él me hablaba solo podía pensar en las ganas que tengo de besarte.

Hyunjin le mordió el labio de forma coqueta y sonrió de lado -no te contengas ahora, bebé.

Y dicho esto unieron sus labios de manera hambrienta, demostrando cuanto necesitan del otro.

𝘼𝙪𝙨𝙩𝙧𝙖𝙡𝙞𝙖𝙣 𝙡𝙤𝙫𝙚 𝙖𝙛𝙛𝙖𝙞𝙧 《SeungLix》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora