•Un Amor para Jaime

5 0 0
                                    

Jaime, jeje sí soy Jaime, aún que suene extraño y algo parecido al Te Amo en Francés.

Pero no es así.

Me tome el tiempo de contarles mi historia, como notan soy un chico de 15 años, jaja eso no lo vieron venir eh.. perdón es que soy muy humorista.

Bueno no tengo 15 en ese entonces sí.

Y a lo que vinimos.

Yo vivía en el campo, donde todos son realmente felices, bueno no todos pero yo sí lo era.

Me sentía libre, libre en el campo; saber que sólo los árboles, me observaban y que el canto de las aves me alegraban.

Las casas en completo orden y la gente era realmente tranquila, los niños jugaban en paz.

Un día, mi mejor amigo Yuyo me dijo que había llegado una chica al pueblo, pero sólo le dije que el estaba loco, que acaso a mi me importaba eso.

De pronto me había convertido en un chico mal educado, por que mal criado no, yo comía bien y mis padres estaban conmigo. Pero una cosa más la otra casi da el mismo resultado.

- No iré a ese lago, sabes que le temo a los peces...- le contradecia a Yuyo, su nombre era Julio pero me gustaba decirle Yuyo, el era moreno, por las noches no sé veía, jaja hay mi amigo Yuyo, Si supiera lo que digo de él.
- Jaime, en ese lago no hay peces...- me miro como si hubiera captado por que razón yo no quería ir... - ya sé, temes ver a la chica nueva.! - y me dio un empujón de eso típicos que solía darme cuando se sentía con razón.
- no, así no...- y acepte ir, para que dejara de estar creyéndose el mejor.. aunque en cierto modo lo era.

Cuando llegamos a ese lago, habían muchos chicos y chicas, todos con bañadores y biquinis o como se les diga a eso.

Hable por horas con Yuyo, por que no quería meterme en esa agua, habían muchos dentro y eso me hacía pensar ciertas cosas...

Hasta que sentí cuando me dieron un fuerte golpe en mi mejilla, enojado al instante mire a la persona que me había dado semejante golpe.

Había una chica, unos centímetros más abajo que yo, y reí, su nariz estaba roja al igual que sus ojos, mordia su labio como si con eso no dejaría salir sus lágrimas.

Reí si reí, mi altura la hacia ver inferior, Yuyo me codeo, y la mire furioso.

- Que te sucede, pequeña elfo!
- Que te sucede a ti, pedaso de jirafa!- gritó dándome un golpe en el estómago, nunca me vi así, peleando con una chica desconocida.

Me aleje un poco para que me explicará por que su comportamiento, era ese...

- Juan por que??- me sentí ofendido, No me gustaba que dijeran mal mi nombre eso sí que me ofende.
Y Yuyo gritó un _El no es Juan_ entonces ella se vio cohibida todos la miraban, se había confundido, pero que pasaba!.

- Perdón... - la tomé del brazo y como si fuera algo normal la abraze, sentí el olor de sus cabellos, olía como a flores blancas...
Acaricie su espalda por los hombros, estaba loco y mal educado pero jamás pervertido.
Susurre un _Como te llamas_ y ella hizo lo mismo diciendo su nombre, se llamaba Laura, su nombre sonaba tan tierno y delicado como ella.
Incluso olvide que los demás estaban al rededor, Y que antes le había dicho pequeña elfo jaaja.

Ese día hablamos, mucho, y me explicó por que se había equivocado, su supuesto amigo le había dicho que me llamaba Juan, y que había dicho que yo dije que ella parecía... un... brócoli mal cocinado, como es posible eso?...

Pasaron los meses y llegaron los días de lluvia, mis padres me prohibieron salir en esos días, por que me resfriada y yo era como el mejor tesoro para un resfrío, no me dejaba así nada más.
Supongo que mis padres me lo prohibieron por que ya estaban cansados de cuidarme por semanas...

Permanecí en casa por un mes...

Sin salir, aún así eso fue bueno, le preste más tiempo a mis cómics que me había regalado Víctor, mi hermano Víctor mucho mayor que yo, el vivía en la ciudad, con su familia, tenía dos hijas y un pequeño de tan sólo dos años, poco los veía, Pero no estamos hablando de él.

Cuando el sol volvía a salir por las mañanas, decidí ir hasta la casa de Laura, deseaba verla y abrazarla y peinar la, sí la peinaba ella tenía el cabello super largo, o eso era por que ella era pequeña talvez las dos cosas.

Laura se convirtió en una de las personas más importantes de mi vida, Yuyo estuvo celoso unos días pero después entendió, mi mejor amigo el más negro, jaja mi Yuyo.

No les contaré más, por que es muy comprometedor, sólo les diré, que ahora tengo 27 años, Y tengo dos hijos gemelos 7 y una princesa de 1 año, la vida es hermosa. Y la disfruto cada día, la vida me permitió tener esos tres pequeños tesoros y mi Hermosa elfo Laura, Jaja.


Más que  historiasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora