Que extraño es el amor, ocurre cuando no lo piensas pero lo deseas.
Quiero contarles mi historia, primero me presentaré.
Soy Isaac, tenia justo 32 años cuando conoci el amor de mi vida..
Y supe que ella lo era, por que nunca sentí algo así con nadie más.
Pequeñita de un metro y un poco más .
Sus curvas que volvían loco a cualquiera que las viera,
Ella era perfecta.Empezamos.
La conocí un día que este apuesto y galanaso hombre se miraba en un espejo, donde? Pues en un almacén.
Noté que ella estuvo mirándome, pero ella no noto que yo también la miraba.
Me voltee y ella apartó su cara, usaba un vestido azul celeste, que dejaba ver sus perfectas curvas.
Pude haber sentido algo muy loco cuando la vi, pero como no la conocía, eso no pasó.
La seguí, pues empezó a caminar, vi lo nerviosa que estaba, pues sobaba sus manos y las secaba con su vestido, al parecer había perdido también la educación.
Su cabello llegaba hasta su cintura, haciéndola ver aún más hermosa, y de repente me sorprendí caminando o persiguiendo a esa niña.
Toque mi cabeza y me regresé, me vi como un tonto, persiguiendo a una chica que primero no conocía y segundo, que estaba pensando, aúnque la vida te preste páginas jamás escribiras tu historia como en un libro, por que? Pues por que quieres sentir de todo.
Pasaron al rededor de dos semanas cuando me encontraba en una cafetería con mi hermano Harry, él unos años más nuevo que yo, cuando tocó mi hombro y me susurró:
- mira, no sé por qué pero presiento que esa chica se parece a una que me contaste...
mi corazón se detuvo por unos microsegundos, un leve calor subió hasta mis orejas si hubiera estado en tercera persona me hubiera visto, pero no.
mis manos empezaron a sudar, y me sentí valiente y me volví hasta donde mi hermano seguí a apuntando.Y sí ahí estaba, usaba unos jeans largos, y unos zapatos bajitos, una blusa que dejaba ver su delicado cuerpo en el escote.
Y me pregunté ¿porque había sentido tan rara cosa, cuando mi hermano me dijo que era posible que fuera ella ?
Y de pronto me vi casi golpeando la mejilla de Harry porque en un silbido muy coqueto la llamó.
Negué, furioso con mi hermano.
-Disculpa... que te ocurre...- parecía estar enojada pero su voz era tan queda que no asustaba ni aún gato.
Y tenía su ceño fruncido, hasta que me miró.Sus ojos se abrieron en sorpresa y su cara se torno roja..
Sonreí pues estaba ganando aún que no tanto.
-Hola..- musito.
- Hola, podrías decirme tu nombre es que hace unas semanas....- me sentí diciendo todo un discurso, así que deje de hablar y mire a mi hermano que se cubría la cara y reía.-Soy Celeste...- su nombre me causo un poco de risa pero por respeto no reí, en cambio mi hermano si.
Mire a mi hermano con una mirada fulminante, Y el dejo de reír.-Wao... como el que quiere a celeste que le cueste...- estaba enojandome con mi hermano por ser tan imprudente.
Celeste me miraba y sonreía.
Entonces recordé que ya sabía su nombre pero ella el mío no.
- Bien celeste, soy Isaac!- ella asintió y me di un golpe mentalmente; ya que la tenía ahí parada y ni para decirle que se sentera.
Esa fue la primera ves que hable con esa dulce mujer...
Me enteré que tenía 22 años, era la criatura más hermosa que Dios me permitió conocer.
Salimos muchas veces, después de tres meses de conocerla enferme, me sentí triste, mi espíritu estaba abatido, era como si me faltará algo más que Celeste, a ella la veía todos los días, pero me sentía muy triste.
Un día, hable con un gran hombre que hoy es como mi padre, él me enseñó que existe Dios, después de recorrer tantos caminos y dejar tantas huellas, encontré a Dios.
Eso me lleno, Oré por mí esposa, que aún no tenía.
Dios me hacía sentir completo, un hombre con una esperanza y sin temor, Pero con temor sólo a Dios.
Le hable a Celeste de mi Dios, Que me había salvado de caer en algo peor como algún vicio o talves peor.
Ella al principio le pareció algo estúpido, pero le hable tanto de Dios y Oré tanto por ella que Dios le habrío el corazón y ella también lo conoció en su corazón.
Un día me casé.
La amaba, la amo y le prometí que jamás la dejaría, sonrió siempre que recuerdo el día que me observaba mientras me miraba en un espejo.
Siempre por las mañanas le recuerdo que la amo, Como el primer día.
El amor que viene de Dios es perfecto.
Hoy tengo 45 años y hoy tengo 12 años de conocer el amor de mi vida.
Uno que es Dios mi primer amor, Espiritual.
Y dos mi celeste, mi negra que me enseñó amar con el alma.