🌕Luna llena🌕

Capitulo 8

Todo estaba tranquilo y sentía como el ruido de las olas me empezaba a acurrucar bajando un poco mi temperatura a la normalidad
- Jacob - grito una voz femenina atrás de mi. "¿Porque nunca dejan de molestar?" fue lo único que pensé
Al esperar unos segundos más en lo que se acercaba la persona, Rebecca se sentó junto a mi con la respiración agitada. Seguro que fue tras de mi pero no logro alcanzarme
- Jake - volvió a hablar mirándome fijamente
Sin molestarme a verla, seguí con la mirada clavada al mar - Necesito que me des respuestas .... yo no puedo vivir en paz con el miedo de que algún día te vayas o te pase algo y yo nunca lo sepa - dijo con voz entrecortada.
Sentí como su fría mano toco mi brazo
- Yo ... tengo una idea de cuanto amas a Renesmee - un apretujón invadió mi pecho - pero ... ya no esta Jacob - dudo en lo ultimo que dijo pero al final no se detuvo. - esto del deseo y posesión que tienes hacia ella es ... demasiado y si te creo muy capaz de arriesgar tu vida por ella.
-¿Posesión? Claro - reí amarga y sarcásticamente zafándome de ella
- ¿Alguna vez no lo pensaste así? - dijo mientras se cruzaban ya nuestras miradas - Jacob, según el relato que me han dado lo veo como una posesión hacia Renesmee; desde el primer momento que la conociste, siendo una bebé
- Se ve que no entiendes nada de lo que implica estar imprimado
Ella se mantuvo un minuto en silencio
-Ya me contaron cómo fue lo de la batalla de hace unos años con esos vampiros. No nada más arriesgaste tu vida si no también la de la manada - rompió el silencio
- Rebecca, ¿a que quieres llegar? - la mire mal
- Para mi ... esto a sido muy difícil desde que supe que mi novio y mi hermano menor eran hombres lobo. No sabes la impotencia y preocupación que me da al no poder hacer nada. Ya no me siento tranquila y ahora cada hora que no los veo pienso que están arriesgando sus vidas, en especial tu - trago amargamente con una expresión cansada
- El tomar la decisión de vivir con uno de nosotros ... no te da alternativa- suspire - Tu elegiste esto
- Con Paul de alguna u otra forma lo podría reconsiderar pero contigo ... - pausó un segundo - No tengo opción. Eres mi hermano
- Faltaste mucho tiempo tu y Rachel. ¿No creen que deberían resignarse si no quiero volver a meterlas completamente en mi vida?
- Somos hermanos, Jacob
Por un momento pude apreciar mejor el dolor que le causaba a Rebecca el rechazo que le daba.
Ya no sabía si sería buena idea invertir un poco de tiempo para explicarle detalladamente cada parte de mi vida, cada sentimiento que pase desde que ella ya no estaba y lo que ahora estaba planeando hacer para mi futuro. Entendía que Rebecca me pedía a gritos que le tuviera la confianza de meterla en mi vida pero ... era de esperarse que sería muy nuevo para mi.
- Yo no me interpondré en tus asuntos - volvió a hablar por falta de una respuesta - al contrario ... prometo ayudarte Jake- tomó mi mano - Solo necesito estar tranquila con lo que sea que me quieras contar - suplico
- Es todo para mi. Lo único que me importa de verdad - susurré con un hilo de voz. De pronto una imagen de ella invadió todos mis pensamientos. El hablar de ella me erizaba la piel y mi corazón estallaba.- solo debes saber eso ... y que nada ni nadie será un obstáculo para que yo la proteja
- ¿Pero a que costó, Jake?
- Si lo que te preocupa es que arriesgue mi vida por ella déjame decirte que deberías acostumbrarte - dije amargamente- En unos días ire por ella. No me preguntes sobre la situación porque estoy seguro que la sabes. Solo deberías relajarte y vivir con ello. Pudiste vivir sin mi y papá durante un largo tiempo; creo que no se te hará tan difícil
- Lo era ... pero porque en ese entonces tú vida no corría peligro
- Pierdes tu tiempo si quieres impedírmelo
Rebecca se quedó observándome con los ojos llorosos y aún con dolor.
Volvió a invadirnos el silencio durante un tiempo hasta que sentí como Rebecca me rodeaba con sus manos
- Esta bien. Sea lo que hagas te apoyare. - susurro aún pegada a mi
- Todo estará bien. Deberías confiar en mi - dije inmóvil
- Jacob - grito Leah interrumpiendo desde lejos
Rápidamente me quejé fastidiado por su presencia
- Ire a casa - dijo Rebecca separándose de mi y parándose de la arena
- Deberías buscarte un nuevo sitio si no quieres que te molesten - Leah se sentó a unos metros de mi sin invitación alguna
"Lo mejor hubiera sido no regresar" pensaba
- ¿Porque tratas así a tu hermana? - volvió a hablar como si estuviera totalmente abierto a hablar
Poniendo los ojos en blanco volví a mirar al frente
- También pienso que exagera un poco al estar siempre preocupada por ti ... pero concuerdo con ella en algunas cosas - seguía insistiendo ignorando mi mal humor
- ¿No te ha quedado claro que no te quiero aquí? - la mire con enojo.
De pronto se me vino a la mente el sentimiento de hace unos años. Leah molestándome y amargándome más la vida de lo que ya estaba, justo cuando pasaba un mal momento por el amor que le tenía a Bella.
Aunque era parecido el sentimiento, ahora era un poco menos el enojo que tenía por el estorbo de Leah. Tal vez porque el sentimiento que más abundaba en mi era la tristeza y no la rabia.
Al no tener más que decir, Leah sonrió sarcásticamente como si estuviera compartiendo el mismo recuerdo
- Ya se que no es igual a lo que viviste antes - bajo la mirada.
Me mantuve de nuevo en silencio tratando de volver a la calma con las olas que cada vez se hacían más fuertes por el viento que había
- Rebecca no quiere a Renesmee ... - por primera vez escuche como Leah dudo un segundo antes de comentar algo- Y ... para serte sincera, yo tampoco.
Al principio si me sorprendió su confesión, pues no sabía a qué quería llegar con eso. No me sorprendía el hecho de que a ella no le agradara mi impronta, pues aunque ella estuvo desde el momento que supe de su llegada; Leah fue quien vivió junto a mi mis diferentes facetas y cambios radicales sobre mis sentimientos hacia Renesmee, y aunque parecía que conociera cada rastro de sentimiento, era cierto que siempre se mantenía con un poco de indiferencia cuando se trataba de ella o los Cullen en general.
- Que mal por ustedes - fue lo único que pude responder, pues aunque fue inesperado lo que dijo, eso no cambiaría en lo absoluto mis planes
Leah gruño rápidamente y se levanto de su lugar en un movimiento
- ¿Porque sigues siendo tan estupido, Jacob? - estalló
Con toda la calma volteé a mirarla apreciando su enojo
- Sabes que no te dejaremos solo aunque nos lo ordenes. Si necesitas ayuda nosotros también lo haremos contigo. ¿Porque eres tan masoquista? - bufó - No pudiste controlar tu imprimación pero si puedes cambiar lo que ahora está pasando, ¿cuando vas a entender que solo te estas destruyendo?
- Véte a casa, Leah - fue lo único que pude gesticular al pararme lentamente de mi lugar y darle la espalda
Poco a poco fue desapareciendo el quejido y llamado de Leah hasta volver al silencio.
Sería lógico que todo este bombardeo de comentarios me destruyeran en un segundo y hasta me hicieran dudar de lo que debería hacer o no, pero la verdad era ... que cada vez me hacia más fuerte.
Tal vez tenían razón en algunas cosas que me habían dicho, pues hasta llegué a la conclusión que era una especie de magneto que atraía todo lo "dañino" para mi, pues cada que sentía que todo marchaba bien, volvía a ver otro obstáculo, y lo peor de todo es que cada vez era un obstáculo más grande que el anterior pero ... por alguna extraña razón sentía que era porque podía soportarlo y superarlo; y no por ser masoquista ni mucho menos. No sabía cómo definirlo ni explicarlo; tal vez algún tipo de destino o algo parecido. El punto era que con cada herida que sentía cada vez más profunda sin un fin, sentía como una nueva fuerza iba naciendo en mi poco a poco, manteniéndome de pie, y esa misma fuerza que seguía alimentando, era la misma que ocuparía para poder cumplir con mi objetivo de por vida. Renesmee
El aire fresco empezaba a hacer efecto en mis pulmones, pues me envolvían cada vez más haciendo sentir una tranquilidad que no había tenido en mucho tiempo. Seguí caminando sin rumbo. Poco a poco fui reconociendo que me acercaba a aquel acantilado con mucha historia detrás, pues fue inevitable no recordar aquellos tiempos de tristeza y rabia por la partida de Edward y el lazo que tuvimos Bella y yo desde ese momento.
Seguí caminando hasta estar lo suficientemente cerca para mirar el final del piso. Podía oír con mayor intensidad las olas chocar una tras otra.
Una oleada de sentimientos cruzaron rápidamente en mi y se fueron alejando poco a poco, pues hasta cierto punto podía recordar cada una de las cosas que Bella me decía en aquel entonces. Aunque había pasado ya el tiempo, recordaba algunas conversaciones que teníamos. El recuerdas ese rostro sin rastro de esperanza o vida, mientras gritaba en silencio el dolor que sentía por la ausencia de su amado, me hizo conectarme completamente con ella en esos momentos.
Cerrando completamente mis ojos sentí el estremecer de mi cuerpo mientras mi piernas se inclinaban un poco más hacia delante.
En un segundo me volví hacia atrás unos metros y empecé a quitarme rápidamente mis pantalones y mi sudadera. Quitándome por último mis botas volví a pararme en la punta del acantilado.
Ya había saltado un sin fin de veces aquí, pero por alguna razón esta vez sabía que la sensación sería diferente.