¡CERDO MENTIROSO!

99 10 8
                                    

— ¡TÚ, CERDO MENTIROSO! ¡Ven aquí cobarde, no huyas! — Theo se pone al otro lado de la encimera. — ¡Di tus últimas palabras! — Termino de entrar en la cocina.

— Yo no tengo nada que ver. —

— ¡MIENTES! — Corro intentando atraparlo pero se escabulle con facilidad. — ¡Eres un vil mentiroso! —

— Me he quedado tan sorprendido como tú con esas fotos en las revistas. —

— Claro, y la estúpida de Maddie te cree. —  Estamos uno frente al otro con la encimera en medio. Solo unos metros separan su cuello de mis manos. — Esto ha sido algo muy bajo, incluso viniendo de ti. —

¡Sangre, quiero sangre!

Interrumpimos está escena para recordarles que la violencia nunca es buena ni una solución. Ayuda a drenar pero no, no es buena.

¿Donde iba?

¡Ah sí, quiero sangre!
En mi cabeza ahora mismo solo hay pequeñas Maddie's con antorchas pidiendo un culpable que linchar.

— ¡Pero que yo no he sido, no tengo nada que ver! ¿Donde está Nate? — Pregunta con ojos asustados por encima de mi hombro.

— Oh, él debe ser la menor de tus preocupaciones. — Salgo corriendo y logró alcanzarlo, aunque se logra soltar de mi débil agarre.

— Eres un mentiroso. ¡Te reto! — Le doy una cachetada con unos guantes de lavar los platos que agarro del lavaplatos cuando lo alcanzó y quedó frente a él.

¡Ha sido lo primero que se me ha ocurrido!

— ¡¿A qué?! ¡¿A lavar los platos?! — Me mira como si estuviera loca mientras se seca el agua de la cara.

— A que seas sincero, Theo. ¡Creí que eras mi amigo! —

— ¿En serio, tú amigo? — Su carita se ilumina pero no, no podemos caer en esa trampa. ¡Que no nos manipule! ¡Es un cerdo mentiroso!

— Te ha llamado amigo. — No sé que hace Fernando aquí.

— ¿Qué? — Tanto Theo como yo lo miramos confundidos.

¿En qué momento llegó?

Es como un fantasma, siempre está donde no se le espera.

— Cuando una chica te llama amigo; compañero, te adentras en la zona. — Nuestras caras de confusión siguen siendo las mismas.

¡Este chico es muy raro y lo digo yo!

— ¿Cuál zona? — Está vez solo pregunta Theo.

— La zona amigo... Y una vez allí, no sales nunca. Es como Alcatraz. — Fernando se está comiendo una mandarina. En serio, es muy raro.

— ¡¡A la única zona a la que él irá es a la de muertos!! — Grito lanzandome a por su cuello.

— ¡Pasando antes por urgencias! — Exclama Nate entrando en la cocina también.

Solo finge.
Teatralidad.
Tanto pasar tiempo conmigo se le ha pegado.
Aunque Nate siempre ha tenido una Drama Queen interior.Esta vez no está molesto. Lo conozco bien. Es que si alguien realmente cree que él está enfadado, es porque es muy estúpido.
Está tranquilo. Creo que solo quiere asustar a Theo.
¡¡Que alguien me explique!!

— Okey, un loco con ganas de matarme a la vez. — Nos tiene a ambos frente a él y parece un siervo asustado. No deja de mirar de uno a otro y viceversa.  — ¡Les juro que yo no he sido! — Vuelve a repetir. Ya suena como un mantra. — Tienen que creerme. —

NO ES UNA REINA MÁS.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora