Capítulo 2

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Apenas entramos a la preparatoria, todas las miradas se posaron en nosotras tres, probablemente porque estábamos entrando con dos de los chicos más populares de Brooksfield High School.

Me sentía muy incómoda, ya que no me gustaba recibir tantas miradas, gracias al cielo que mis amigas se dieron cuenta e inmediatamente nos separamos de ellos y nos fuimos en dirección a mi mejor amigo que se encontraba en su casillero a unos metros de nosotras.

No les voy a mentir Noah es muy atractivo, tiene todo el aspecto de chico despreocupado con su cabello castaño claro y sus ojos verdes que enamoran a cualquiera - cosa que pasé casi toda mi infancia - pero con el tiempo fui creciendo y lo fui superando, ya que nunca me vería como algo más que su mejor amiga. Él es una de las personas más increíbles que conozco y que daría lo que fuera por sus amigos. Maddie y Ava fueron a sus casilleros y yo me acerqué a Noah.

- Te extrañé tanto - dijo abrazándome haciendo que mis pies se levantaran del suelo.

Cosas de bajitas.

- Yo también te extrañé - dije recibiéndole el abrazo.

Cuando nos separamos lo vi un poco nervioso, así que te pregunté:

- ¿Todo está bien? Pareces nervioso.

- Yo no estoy nervioso - dijo a lo que yo lo miré con una ceja alzada - Odio que me conozcas tan bien.

- Me amas y lo sabes, ahora dime qué te pasa.

- Necesito ayuda - dijo

- ¿Con qué?

- Con una chica

- Uhh, se nos enamoró el niño ¿Quién es la desafortunada? - dije burlona.

- Jaja qué graciosa –dijo sarcástico– es una chica que conocí en el verano se llama Harper.

- Pero ¿en qué quieres que te ayude?

- Bueno... - la campana lo interrumpió dando la señal de que debíamos entrar a nuestras clases.

Me despedí de él, dejándole saber que luego tendría que explicarme todo, y me dirigí a mí clase.

Ahora me tocaba Historia, esta clase no la compartía con ninguna de mis amigas.

Comencé a caminar hacia la clase, al llegar me encuentro con Grace, ella es muy simpática y le falta una tuerca, pero es muy buena persona, hicimos varios trabajos juntas y nos volvimos amigas.

En fin, nos pusimos a hablar, ya que la profesora no vino, nos fuimos hacia las gradas del campo de futbol americano, empezamos a hablar sobre nuestras vacaciones y de pronto dijo:

- ¿Hoy tienes algo que hacer?

- Aparte de respirar, no nada ¿por qué?

Ríe – Porque necesitamos celebrar el inicio de clases con un helado ¿te apuntas?

- Nunca le puedo decir que no al helado, pero debo regresar temprano a casa.

- ¿Por qué? ¿Cuál es la ocasión especial?

- Cena con Ava y sus papás.

- Y el bombón de Liam – dijo moviendo sus cejas.

- Ugh, ni me lo recuerdes. Cada vez que lo veo, está más insoportable, no sé cómo es eso puede ser posible.

- Pero eso no le quita lo atractivo.

Me encogí de hombros dando fin al tema y Grace empieza a parlotear sobre un chico que conoció en las vacaciones.

[...]

Cuando fue la hora del almuerzo, me encontré con Ava y Maddie sentadas en una de las tantas mesas de la cafetería, compré mi almuerzo y fui a sentarme con ellas.

- Y hablando de la reina de Roma – dijo Maddie

Reí - Espero que cosas buenas.

Ambas asintieron.

- Lo que estábamos hablando era que se quedaran a dormir en mi casa esta noche para celebrar el inicio de clases ¿Qué te parece? – dijo Ava

- Me encanta su idea – dije sonriendo.

Mientras hablábamos de lo que íbamos a hacer esta noche, Noah se sentó en la mesa

- ¿De qué hablan?

- Usted y yo tenemos una conversación pendiente, señorito – dije acusándolo con mi dedo.

- Uhh, ¿qué hiciste ahora? - se burla Maddie.

- ¿Yo? Pero si yo soy un angelito ¿Cómo pueden pensar tan mal de mí? – se hace el indignado.

- Porque te conocemos, precisamente por eso – apunta Ava mientras come su pudín.

- Bueno, ¿ahora si me vas a... - me interrumpe el sonido de la campana – Salvado por la campana – nos levantamos de la mesa para devolver las bandejas del almuerzo, dejando a Maddie y Ava hablando sobre no sé qué – Más tarde te voy a llamar y me vas a contar absolutamente todo, sabes que odio que me dejen con la intriga.

- ¿Hasta lo que hice con ella? – sube y baja las cejas y le doy un golpe en el brazo.

– Estúpido, sabes que no me refiero a eso. No estoy interesada en saber sobre tus cochinadas.

– Auch, ¿por qué eres tan agresiva? ¿Quién te hizo daño para que fueras así?

Inmediatamente me paralizó. Inmediatamente alejo todos esos pensamientos de mi cabeza. No puedo pensar en eso. Ya pasó un tiempo de eso, no puedes recordarlo otra vez. Noah se da cuenta de mi seriedad y se apresura a decir:

–Joder Katie, perdón no quise decirlo, sabes que no era mi intención recordarte eso.

Respiro para tranquilizarme – Tranquilo, se que no querías decirlo, me voy a clases, ya voy llegando tarde.

Y me apresuro a salir a paso rápido a mi próxima clase.

[...]

El comentario de Noah revivió muchos recuerdos que me he esmerado a guardarlos en una caja con llave en el fondo de mi mente. No he podido dejar de pensar en todo lo que pasó.

Sacudo la cabeza en un intento de alejar todo para prestarle atención a Grace que me está hablando de algo mientras estamos sentadas en las mesitas de la heladería.

–...y él le pidió matrimonio a mi tía y mi abuela cuando se enteró casi le da un infarto, porque él le dobla la edad a mi tía, pero después cambió de opinión y se casaron en las Maldivas, fue una boda muy bonita, la verdad.

–Wow, a tu familia le pasan cosas muy interesantes.

–Eso es cierto – asiente mientras se come una cucharada de su helado – Desde que salimos de la escuela estás un poco apagada como distraída ¿está todo bien Katie?

–Si, si, ya sabes que siempre ando con cosas en la cabeza, pero no te preocupes – trato de darle una sonrisa tranquilizadora, pero termina saliendo como una mueca.

Grace no sigue insistiendo porque sabe que si tengo algo que decir lo haré cuando esté preparada para ello – cosa que agradezco – luego de todo eso, le conté algunas cosas sobre mis vacaciones hasta que mi madre me llamó diciéndome que ya era hora de que volviera a casa para poder arreglarme para la cena. Me despedí de Grace y me fui caminando a mi casa.

Mis desastres amorososDonde viven las historias. Descúbrelo ahora