Capitulo 26

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Azul

Me despierto desorientada en un colchón maloliente en una esquina del cuarto donde no hay mucha luz, las maderas están podridas y las termitas se están apoderando de ella. La puerta esta mas alzada que el marco por lo que no pudieron cerrarla bien. Cuando intento levantarme para buscar alguna salida es cuando caigo en cuenta que mis muñecas están atadas firmemente. Por más que intentara soltarme esta cuerda no cedía, el nudo estaba bien hecho. Carl entra muy campante con su sonrisa burlona.

- Ah mira ya la princesa despertó.- se burla y hala una silla para sentarse mientras me observa.- Yo que tu no intentaría escapar. Estamos en un bosque donde podemos encontrar criaturas salvajes por lo que si escapas ellas estarán esperándote. Aunque claro tengo sujetos custodiando la cabaña.

- ¿Qué hago aquí?- lo miro con todo el desprecio que es digno.

- Aquí las preguntas las hare yo. Y si quiero revelar algo lo hare yo porque quiero y puedo.

La puerta es abierta nuevamente y nunca imagine ver a Gema entrando con una sonrisa de suficiencia.

- ¿Gema?

- Si, ¿te sorprende?- pregunta mientras sonríe socarronamente.

- No, la verdad es que no me sorprende. ¿Por qué haces todo esto?

- Por dinero.- se encoge de hombros como si fuera lo más normal.- Carl me prometió mucho dinero si lo ayudaba y pues me callo como anillo al dedo ya que mi familia está en bancarrota.

- No tienes corazón.

- Jjajaj Eres demasiada ilusa querida. Aquí nadie te encontrara y Shane sufrirá con eso me quedo bien servida.

- Pero lo mejor de todo es que yo cumpliré mi venganza.- acoto Carl.- que creías que te permitiría ser feliz con otro cuando me negaste ser feliz contigo.

- ¿De qué hablas si te metías con cuantas mujeres te guiñaran el ojo?

- Soy un hombre querida.- me mira como si con esa respuesta quedaran resueltas todas las dudas.

- Eres un cerdo.- escupo.- La mejor decisión que tome fue romper el compromiso.

Se carcajeo sosteniendo su estomago.- Bueno eso depende de la forma que lo miramos. Te dejaremos querida tendrás que pasar esta fría noche aquí espero que no te resfríes.- me guiño el ojo y se fue.

Con ver a mí alrededor tan solo puedo concluir que esto es inhumano nunca pensé a travesar una situación como esta. Al ver la única rendija que podía ver el exterior intuí que ya llevaba horas en este lugar porque ya estaba oscuro y cuando me saco de la tienda era de mañana. Aun siento el escozor en mi rostro me pego tan fuerte que hasta tuve que escupir sangre. Todo estaba tan tranquilo hasta que el apareció.

El sueño se quiere apoderar de mí pero trato de mantenerme despierta por si uno de ellos regresa. Llega un momento que mi lucha deja de ser suficientes y mis parpados se cierran.

- ¿Qué haces aquí?- solté con rabia cuando pude salir de la sorpresa en serio no posee ni un gramo de vergüenza o respeto.

- Te dije que te arrepentirías por elegir la fama por encima de mí. – se veía fuera de sí.

- Carl te voy a pedir que salgas de mi...- fui interrumpida por su acercamiento intente esquivarlo en el proceso cayeron algunos objetos al suelo.

- Tu no me das ordenes.- dijo mientras seguía con su intención de atraparme.

Sopese la situación para ver si encontraba una solución para salir airosa pero no veía un escape seguro porque él estaba bloqueando la puerta. El era más fuerte que yo por lo que aunque de pelea terminaría perdiendo y necesito ganar tiempo no quiero que nada le pase a mi bebe.

Mi sueño AzulDonde viven las historias. Descúbrelo ahora