Sábado 7 de abril 2018
Llevó las manos por sobre su cabeza y estiró cada músculo que podía después de toda una extensa tarde de tareas. Podía estar contento que cumplía con sus deberes pero la sonrisa no llegaba a sus labios cuando recordaba que anoche había discutido con sus 2 mejores amigos y había decidido dejar de hablarles por un momento.
¿Cómo podían tomar decisiones de forma tan irresponsable por el deseo carnal que los consumía? Podía entenderlo de Chittaphon, su mente abierta y goce por la vida era esperable para sus 22 años y una vida en la universidad pero ¿Jungwoo? ¿Acaso no aprendía de sus errores?
Era el menor de los 3 pero su religión y estilo de vida lo hacían sentir más maduro o más protector.
Miró el reloj en su muñeca: 20:00.
Para no pensar en ello salió de su lujosa habitación y caminó a la de su hermano, suponía que también había estado haciendo tareas. Tocó la puerta un par de veces y apoyó la oreja para saber si podía escuchar a Felix, pero abrió tan rápido como pudo cuando se dio cuenta que estaba vomitando en el baño.
Su corazón agobiado lo estaba ahogando pero nada importaba, se puso firme para sujetar a el rostro de Felix y contenerlo para que siguiera vomitando, una mano en la frente era suficiente para que el cabello no entorpeciera en su vista.
—Nunca comas... puaghh ahhh —escupió lo último, agitado, con las manos a cada lado del lavamanos.
—Felix —murmuró Mark con los ojos llenos de lágrimas, su barbilla temblando y los recuerdos más desagradables del pasado bailando alrededor de su cabeza— vamos al hospital, por favor... llamemos a...
El muchacho abrió la llave de agua fría para vaciar el contenido, cepillarse los dientes y lavarse el rostro con calma, si él no demostraba que dominaba la situación las cosas se podrían poner peor.
Con una sonrisa se volteó a mirar a su hermano, ambos eran de la misma estatura y casi de la misma edad, pero Felix tenía una voz ronca que suavizaba con dulzura cuando trataba de dar cariño.
—Nunca comas kimchi cuando ha estado expuesto a temperatura ambiente por 3 días —empujó el hombro de Mark mientras este negaba inquieto. Preocupado bajó el tono de su voz, sostuvo el rostro de su hermano con ambas manos y lo miró con el ceño fruncido— Hyung, cuando salí de ese hospital prometí que la leucemia no volvería a mi vida, han pasado 9 años... yo gané —sonrió— ¡Además fue solo kimchi!
Mark buscó algo en sus ojos que le diera indicio de que escondía alguna mentira, pero Felix lucía realmente sincero. Luego de convencerse que había sido indigestión decidió darle un sermón sobre las cosas que no debía hacer y lo mucho que ofendería a la madre de ambos si cometía sacrilegios gastronómicos.
Juntos se sentaron en un cómodo sofá de cuero negro frente a un LED curvo para divertirse con videojuegos. No solían ver seguido a sus padres por asuntos laborales así que realmente se tenían el uno al otro. Cada ciertos segundos Mark miraba de reojo a su hermano para comprobar que estaba bien, pero cuando era descubierto, Felix fruncía el ceño y lo golpeaba en la cabeza para que abandonara las ideas del pasado.
—Sabes que vas a quedar solo durante la noche ¿Verdad? —dejó de lado el control y lo miró a los ojos— me reuniré con mis amigos en su casa ¿Por qué no vienes conmigo?
Después de inventar excusas para no ir a la reunión de sus amigos, Mark despidió a su hermano asegurándose de que quien lo venía a buscar era Steve, el mejor amigo que tenía y a quien había conocido en el hospital, ambos guerreros.
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"La obsesión del demonio" [Johnmark-NCT]
Fantasía"¿Puede un demonio íncubo caer por un simple hombre?" -Yaoi. -Historia original. -Historia eliminada de Wattpad en mayo 2019 por su contenido sexual.