Primer día de clases Parte 1

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Ishigami Yuu despierta en su casa, en su pensamiento solo hay una cosa "miedo". Había pasado tanto desde que volvió a estar en un salón de clases, sabía que no encajaría entre sus compañeros, también estaba seguro de que algunos antiguos compañeros estarían con él por lo que la sombra de su pasado seguiría sobre el, pero no podía ser tan negativo, debía intentar ser positivo después de todo Shirogane Miyuki lo había salvado, había visto algo en él por lo cual decidió ayudarlo, y no solo era él sino también el antiguo y el nuevo consejo estudiantil, ambos sabías lo que había pasado por lo que ninguno lo juzgaría.
En una ligera sonrisa comenzó su día, tomo un baño, guardo sus cosas en su mochila, bajo a desayunar. Su madre había preparado su comida favorita para el desayuno.

Mamá de Ishigami: ¡Buenos días, vamos siéntate y come, hoy es un día muy especial!
Ishigami: No hay nada de especial.
M. De Ishigami: ¡Claro que sí! Hoy vuelves a la escuela después de todo.*llorando de emoción* Por favor has tu mejor esfuerzo, y disfruta de tu juventud.

Ishigami sabía que su madre era una buena persona, ella había abogado por el durante su suspensión y más, lo defendió de su padre, incluso el día que lo golpeó su madre intervino. En su familia el se sentía como un extraño después de lo que pasó con Ogino. Su padre no habla con él, su hermano se volvió más distante y su madre con su comprensión asumía que era el culpable de lo que pasó. Ningúno quiso escucharlo. Cuando tú propia familia no escucha tu voz ¿Qué debería hacer? Si ellos no lo apoyaban y entendían nadie lo haría, o eso pensaba. En Shirogane vio un salvador, una persona que lo escucho, un amigo.

Se apresuró en terminar su desayuno, se despidió de su madre y padre y se dirigió a la salida, antes de salir su padre le hablo, por primera vez desde lo que pasó.

Papá de Ishigami: No vuelvas a arruinarlo.

Después de no hablar, solo esas palabras podía darle a su hijo, Ishigami no se sorprendió pero entendió que su positividad no podía borrar la realidad, él era ante los ojos de todos una peste.
Con esa idea salió de su casa, con miedo y mucha inseguridad.
No había ni pasado media cuadra cuando sintió temor, sentía que no tenía nada que hacer en aquel lugar, se detuvo y estaba apunto de volver a casa, le era preferible escuchar a su padre y sus reclamos que lidiar con otras personas, pero en ese momento sintió una palmada en la espalda. Giro para ver de quién se trataba y pudo ver a su salvador en una bicicleta.

Shirogane: Ishigami, no te detengas debemos ir a la escuela.*sonriendo*
Ishigami: ¿Shirogane-sempai? ¿Que haces aquí?
Shirogane: ¿Que que hago? Pues vamos a la misma escuela, además tengo labores en el consejo estudiantil antes de las clases. Pero sobretodo quería acompañarte en tu primer día, imaginé que estarías nervioso.
Ishigami: Tengo miedo.
Shirogane: Lo se, puedo verlo en tus ojos.
Ishigami: Muchos de la academia me conocen y...

Ishigami no pudo continuar hablando porque Shirogane golpeó su brazo con su puño.

Shirogane: No importa que pase, si tienes problemas me tienes a mí. Te ayudaré en lo que pueda, pero también tienes que esforzarte. Te ayudare a caminar pero no recorreré todo el sendero por ti.
Ishigami: Yo me esforzare.*nervioso*
Shirogane: *bajando de su bici y empezando a caminar junto a Ishigami* Bien, sigamos caminado o llegaremos tarde.
Ishigami: Si.

Así ambos jóvenes empezaron a caminar rumbo a la escuela, en el trayecto pudieron ver cómo cada vez más alumnos se unían a su recorrido rumbo a la escuela.

Shirogane: ¿Ya sabes en qué grupo estarás?
Ishigami: No recuerdo bien, creo que era..

Una voz femenina los interrumpió, se trataba de Akeno.

La vida romántica del muchacho de los ojos tristesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora