Mi entrenadora

Parte 8: Segunda oportunidad

- Estás verdaderamente hermosa esta noche, (...).

Ese comentario hizo que la chica se parase en seco. Su piel se erizó por su voz aterciopelada que a pesar de haber pasado años sin escucharla podría distinguirla entra la multitud sin dudarlo. Empezó a girar sobre sus talones mientras sus ojos se abrían cada vez más de la impresión al saber que sus sospechas eran ciertas.

- Ita-itachi... 

- Hola. - Saludó un tanto tímido esperando su reacción, que no se hizo de rogar. 

- Ahora sí que debo irme. - Comentó con la intención de dar media vuelta para abandonar el lugar lo antes posible, pero antes de dar un paso Itachi agarró su muñeca frenándola y provocando que lo mirase a los ojos llenos de arrepentimiento. 

- Por favor, no... no te vayas. Todavía no. - Suplicó con una mirada llena de tristeza tanto que casi consigue que la chica se ablandara, pero mantuvo su compostura de defensa y frialdad. 

- ¿Por qué no debería irme todavía? - Sus ojos llenos de tristeza seguían mirándola tan intensamente que hasta pudo sentir la tristeza del chico en su propio corazón. 

- Quiero disculparme, quiero pedirte perdón por lo que pasó. 

- Ya lo has hecho, ya puedo irme. - Refutó (...) con la intención de girarse de nuevo para largarse, más la mano de él no se lo permitió.

- Me gustaría poder hablar contigo un rato. ¿Qué me dices? - Preguntó captando su mirada y tras meditarlo un par de segundas sin apartar sus ojos de los de él.

Al ver la indecisión de (...) una pequeña esperanza afloró en el corazón del Uchiha que le regaló una tímida sonrisa obteniendo por su parte un suspiro de derrota. Lo había conseguido, la chica se quedaría. 

- Creo... creo que puedo quedarme un rato más. - Respondió apartando su mirada intentando forzar una sonrisa mientras se sentaba en la misma mesa donde había estado anteriormente. El Uchiha mayor imitó el gesto de ella sentándose enfrente.

- Bueno, yo quería pedirte disculpas por lo que pasó en ese campamento. Era un adolescente incapaz de controlar sus pensamientos. Un ignorante que no sabía lo que estaba haciendo y cuáles eran sus causas. 

- Bueno... si no fuera por ti, no me encontraría ahora aquí. - Intentó calmar (...) viendo el lado positivo del asunto. 

- Tú me abriste los ojos. Desde el momento en que vi cómo te afectó, desde que vi tus hermosos ojos llenos de lágrimas y me di cuenta de que era por mi culpa, me di cuenta de lo que había hecho. Y cuando me dijiste que me odiabas me di cuenta de que había cometido el peor error de mi vida. - Explicó el chico con la misma mirada llena de culpabilidad. 

- No es para tanto Itachi, estás perdonado. - Tranquilizó la joven con una leve sonrisa obteniendo por su parte una mirada llena de asombro. 

- ¿Estás hablando en serio? 

- ¿Por qué tendría que mentir? 

Itachi agarró las manos de (...) entre las suyas un poco más contento, cosa de la que se pudo dar cuenta puesto que una sonrisa sincera afloraba en los labios del chico. 

- No sabes cuánto te lo agradezco (...). Desde ese día siempre me atormenté con este tema, jamás pensé que volvería a verte y mucho menos que me perdonases. 

- Todos necesitamos una segunda oportunidad. - Comentó (...) dando una pequeña mirada hacia la dirección donde se encontraba Sasuke bailando pegado a Tenten mientras se besaban de nuevo. Y nada más ver el beso regresó la mirada al suelo un tanto afectada.