𝘼𝙛𝙧𝙤𝙙𝙞𝙩𝙖 ~ PerthMark

Capítulo 12 >>Caballos<<

A la mañana siguiente la carroza se detuvo. La hada bajó de encima de la silla y fue en dirección a la puerta y al abrirla encontró a Perth y Mark durmiendo abrazados, Zik y Hal estaban lejos de ellos como si quisieran evitarlos

La hada parpadeo un par de veces preguntándose si era normal esa conducta ya que ella era igual de ignorante en temas de Dioses o humanos y no sabía si ellos habían adoptado esa nueva conducta en la tierra humana, por lo que ella lo consideró "normal" claro que para las hadas eso era algo íntimo reservado solo para parejas, pero tal vez en la tierra humana, por lo que simplemente procedió a acercarse a Perth y despertarlo. Al hacerlo este movió suavemente a Mark a un lado para no despertarlo, pero este apenas sintió que Perth no estaba a su lado se levantó dándose cuenta que ya estaba amaneciendo

-Jóvenes lamento levantarlos pero no puedo continuar, ya que a unos metros está la aldea humana y temo que ellos me vean

Perth asintió con la cabeza - Está bien, quédate aquí, esperanos, volveremos enseguida

Dicho esto se bajó con Mark siguiéndolo. Ambos bajaron a los dos caballos y los pondrían al frente de la carroza para aparentar que fueron ellos los que estuvieron manejando esta todo el tiempo

Le dieron un par de caricias y una manzana a cada una y comenzaron a andar, Perth se quedó para dirigirlas y Mark se adentro a la carroza encontrándose a Zik y Hal levantados y jugando de nuevo a atrapar al hada

-Basta chicos

Al llamar la atención de Zik y  Hal estos lo miraron con los ojos abiertos como si supieran algo que no pudieran decir, de igual forma se movieron a sentarse en el otro extremo de los asientos. Mark los miró unos segundos y no les dio mayor importancia sentándose así al lado de estos

Al pararse la carroza le pidió al hada ocultarse dentro de sus ropajes ya que solo seria entrar al hostal donde Perth se había parado, la hada así lo hizo y Mark junto con Zik y Hal bajaron para encontrarse a Perth

Perth y Mark quedaron que Mark iba a ir a alquilar la habitación y Perth iba a bajar las cosas ya que Mark tenía al Hada dentro de sus ropajes y en cuanto esta estuviera dentro de la habitación él bajaría a ayudar a Perth

Mark entró al hostal, esta vez  encontrándose con solo una doncella que estaba parado enfrente de la puerta, quien casi se queda sin palabras ante la belleza de Mark, tragando saliva y sonriendo se acercó a Mark y vio que nadie más venía con él y que este venía de buena familia, sonriendo aún más - Buenos días joven, bienvenido a nuestro humilde hostal ¿Quiere una habitación?

Mark miró alrededor y se dio cuenta de que humilde no era exactamente la palabra que él usaría para referirse a ese lugar - Si, una habitación grande con una cama matrimonial

La doncella le pareció raro, era solo un joven ¿porque quería una cama matrimonial? Tal vez sea para dormir con los dos animales que venían tras él, lo que le pareció sumamente tierno, sonrió con ternura, cosa que a Mark lo desconcertó - Claro, venga conmigo por favor le mostraré la habitación

Mark acompañó a la doncella, adentrándose al hostal, dándose cuenta que era en forma cuadrada, y al centro de las habitaciones había una fuente de agua, eran exactamente dos pisos y la doncella lo guiaba hacia la mejor habitación que tenían en el segundo piso

Al entrar la habitación era blanca, en las paredes blancas habían cuadrados color beige y alrededor de estos, adornos que fueron hechos con cemento que era blanco, en la única ventana había cortinas del mismo color pero con algunos detalles dorados, la cama era completamente grande, las sábanas eran color beige, blanco y dorado, el catre era marrón oscuro, debajo de la gran cama se encuentra una alfombra azul oscura, a los costados muebles del mismo color del catre, y también en dos más grandes pegadas en dos de las paredes del cuarto