Al mejor postor (Yoonmin). [En Emisión]

𝓟𝓻ó𝓵𝓸𝓰𝓸

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-Jimin por favor no te despegues de mí - dice la mujer de cabellos rubios con un tono demandante sin dejar de caminar tomada de la mano de su adolescente hijo.

-Mamá ya no soy un bebé. - reclama mientras un adorable puchero adorna las mejillas del menor.

-¡Te conozco Park¡ La última vez me hiciste lo mismo, casi me matas del susto, te estuve buscando durante 30 minutos. - la mujer mira de reojo a su hijo y reniega con la cabeza.

-¡Aish! Pero mamá estaba en la sección de juguetes, cerca de ti - dice el de cabellos dorados en un tono molesto.

-¡No me importa! ¡Dónde yo esté, ahí te quedas y punto! ¿entendiste?.

-Sí mamá, entendido. -balbucea.

Ambos continúan su camino de manera rápida, el supermercado quedaba a sólo 5 cuadras y ya estaban a nada de llegar, a Jimin no le gustaba que su madre lo controlara, él quería ser un alma libre e ir a dónde él quisiera sin necesidad de que su madre lo estuviese arreando.

Durante el camino hacia el super, el más pequeño sentía que alguien lo estaba observando, pero pensaba que era su imaginación; ya que no lograba percibir de dónde provenía la mirada.

-Jimin, tengo que comprarle unas medicinas a tu abuela, por favor espérame aquí. - Dice su madre deteniéndose enfrente de una farmacia.

Park asiente adorablemente y se hace a un lado de la entrada para poder esperar a su madre.
Su mirada se encontraba perdida en su teléfono celular, ya que estaba jugando uno de sus juegos favoritos, tetrix.

-Lindo...

El de cabellos rubios salta del susto al sentir un susurro muy cerca de su oreja, este voltea inmediatamente topándose con la mirada de un chico un poco más grande que él, de cabellos negros y ojos azules.

¿Q-quién eres?. - pregunta con temor el más pequeño.

-Tranquilo bebé, no te haré daño. Mi nombre es Asher khoster - El de ojos azules le extiende la mano amablemente al de cabellos rubios.

-Mi nombre es Jimin, es un gusto Asher - responde amablemente al saludo un poco confundido.

-Eres muy lindo, ¿Cuántos años tienes? - Sonríe ladinamente el mayor.

-Tengo 15 años - Dice Jimin apenado, levemente sonrojado por los halagos del mayor.

-Excelente, contigo me he sacado la lotería - Lo mira de pies a cabeza maliciosamente, acariciando sus cabellos.

Jimin mira con mucha confusión al más grande y cuando está a punto de preguntarle, por qué ha dicho eso, llega su madre y los interrumpe.

-Jimin es hora de irnos - Su madre observa de mala manera al chico que estaba con su hijo, toma al más pequeño de la mano y lo jala para continuar con su camino.