¿Podré encontrar el amor?

Seré egoísta.

Capítulo 1

Elegir el rumbo de tu vida no es para darle el gusto a tu familia, es para realizar tus metas.
Elliot Durcet.

Afuera del aeropuerto una reportera novata (Julieta) estaba esperando a que saliera la actriz (Yuri) que había sido nominada durante  tres años consecutivos,  comenzaba a rendirse hasta que la vio salir, fue un poco difícil reconocerla pues ella tiene la mañana de disfrazarse para evitar a los paparazzi, rápidamente enciende su cámara y se acerca a ella.

Julieta: Señorita Yuri, ¿Podría hacerle unas preguntas? –emocionada-
Yuri: Por favor baja tu cámara y sígueme. – tono de molestía-
Julita: Entiendo. -apenada-

Julieta baja su cámara y sigue a la hermosa actriz, no deja de observarla pues a pesar de que se disfrazó de chico sigue viéndose muy hermosa, Yuri la guía hasta una camioneta negra y la invita a entrar.

Yuri: Detesto las entrevistas, pero ya que me reconociste te daré 15 minutos.

Yuri comienza a cambiarse enfrente de ella, provocando que Julieta se ponga nerviosa y se quede sin  habla.

Yuri: ¿No hay ninguna pregunta?
Julieta: Perdón es que usted es muy hermosa.
Yuri: ¿Para eso me estaba esperando? ja, ja. –con un tono sarcástico.

Julieta se da cuenta de que Yuri se está enojando, así que se da unas pequeñas bofetadas para poder recobrar la cordura.

Julieta: Discúlpeme.
Sus fans están un poco impactados, pues hace días se filtraron unas fotos donde usted porta el habito.
¿Por qué decidió  ya no ser monja?

Yuri: Nunca  alguien  me había preguntado por ese tema, solo por los escándalos que he tenido con algunos actores. –con un tono de molestía.
Julieta: Sí le molesta puedo cambiar la pregunta.
Yuri: No, realmente es un buen momento para sacar esta pequeña frustración, saca tu grabadora, pues te contaré una vez y no lo repetiré.

Julieta saca rápidamente su grabadora y mira atentamente a Yuri.

Yuri: Los miembros de familia desde hace varias generaciones han sido muy creyentes, cuando yo nací me  nombraron María, fui una hija amada pero tan pronto comencé a caminar mis padres me enviaron a un internado de monjas, los primeros años de mi vida creí que estaba destinada a servir a Dios, pero todo cambio cuando conocí a Ana, en ese momento tenía 15  años, sabes cuando la conocí ella me hizo ver que el internado era como una prisión por que ella si conocía las maravillas del mundo y yo solo conocía los alrededores del internado,  solo que ella me preocupaba mucho pues  sus padres se divorciaron  y la nueva esposa de su padre la metió en el internado, ella se sentía sola y a mí me encantaba oírla, mientras miraba su lindos ojos verdes y su cabello rizado.
Sabes de tanto que escuchaba sus historias comencé a sentirme curiosa y un poco sofocada, empecé a anhelar conocer el mundo pero todo a lado de ella.

* Hace 10 años*
El internado de las monjas "luz de Dios" está ubicado en Tlazala, solo suelen admitir a niñas y jovencitas de familias refinadas, todos los días rezan y realizan buenas acciones por el prójimo.

Monja Lucía: Madre superiora, tengo que informarle que he visto a dos novicias besándose detrás de la capilla.
Madre superiora: ¿Quién ha hecho tal pecado?
Monja Lucía: Ana y María.
Madre superiora: Tráigalas a mi oficina.

La monja Lucía se dirige a la habitación de las jovencitas, las sacude un poco para despiertarlas y así poder  llevarlas a la oficina de la madre superiora.

Madre superiora: María podrías decirme ¿Qué haces en este internado?  -con un tono serio-
María: Me preparo para aceptar a Dios y entregarme plenamente a él.
Madre superiora: ¿Y usted Ana?
Ana: Solo estoy aquí porque mis padres no querían cargar conmigo.
Madre superiora: Ahora veo quien es la que tiene un problema. –dirigiéndose a Ana-
María puedes regresar a tu habitación.

Tan pronto María sale de la oficina de la madre superiora comienza a escuchar como Ana comienza a gritar, pues la madre comenzó a pegarle en la espalda para que se arrepintiera de sus pecados, ella comenzó a llorar pues sabía que ella también tenía pensamientos impuros pero siguió caminando hacia los dormitorios, pero al final del pasillo  se encontró con la monja Lucía  resulta que  como vil animal estaba esperando acechar a su presa para poder saborearla.

Monja Lucía: Te he visto también, sé que pecas con Ana.
María: No entiendo de qué habla.

La monja Lucía le jala el cabello y se le dice al oído.

Monja Lucía: Sí quieres pecar, yo puedo enseñarte cosas mejores, experimenta conmigo no con una novata como Ana. -entre susurros-
María: Madre Lucía, usted ha visto mal.

María empuja a la monja Lucía y corre a su cuarto, después de media hora Ana llega al dormitorio.
Ana: Odio este lugar, tan pronto cumpla 18 años podré cobrar la herencia que me dieron mis abuelos y me iré de este lugar.
¿Te quieres escapar conmigo?

*Actualidad*

Julieta: ¿Y usted acepto escaparse con ella?
Yuri: Ana ha sido de la única persona de la  que me he llegado a enamorar.
Julieta: ¿Aún mantiene una relación con ella?
Yuri: No, de hecho desde hace años no sé nada de ella.

*En eso llega el chofer de Yuri (Ulises) y entra en la camioneta*
Ulises: Yuri, tus fans te han descubierto, tenemos que irnos.
Yuri: Lo siento Julieta, tengo que irme.
Búscame en esta dirección.

Yuri le da una tarjeta a Julieta.

Julieta: ¿Cuándo?
Yuri: Mañana a las 8 pm.
Julieta: Muchas gracias por la oportunidad. –emocionada-
Yuri: sí, sí ya bájate.

Tan pronto Julieta se baja de la camioneta, el chofer comienza a manejar muy rápido pues los fans comienzan a acercarse.

Julieta se dirigió a su oficina, pues quería comenzar a redactar lo poco que había escuchado.

Alejandra (novia de Julieta) : ¡Hola amor!
¿Conseguiste la entrevista con Yuri?
Julieta: Así es. –emocionada-
Alejandra: Esto merece un brindis.
Julieta: No, yo quiero más que un brindis. –mirando de forma coqueta a Alejandra-
Alejandra: Amor estamos en horas de trabajo.

Alejandra y Julieta comenzaron a bromear en la oficina mientras que Yuri llego a su mansión.
Sra. Alina: Que bueno que llegas hija.
Yuri: ¿Cuánto dinero quieres que te dé esta vez?
Sra. Alina: Eres mi hija no una caja fuerte.
Yuri: Siempre que vienes aquí es para pedirme dinero.
Sra. Alina: Bueno, necesito unos cincuenta mil pesos.
Yuri: No madre, yo he trabajado mucho y tus malas inversiones me están  dejando en la quiebra.
Sra. Alina: Sé dónde está Ana. 

*Esta historía la publicaré los días Lunes y Viernes, por favor no olvides darle una estrellita y/o comentar, eso me ayudará a saber si te está gustando la historia 🙈💜*