Reescribiendo 2

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Cada bendito día, después de eso Andrés se acercaba a molestarme, me quedaba mirando fijo o me tomaba por sorpresa, o se escondía para asustarme, todo con el maldito fin de preguntarme sobre aquello (Cuando le dije que pensaba sobre mi) pero claro, yo lo trataba de EVITAR con todo mi ser. Hasta que se cumplió un mes, decidi cambiar los aires, no puedo estar asi para toda la vida ¿no?.

OK, ha pasado un mes desde que el profesor se ha venido a vivir conmigo, han pasado cosas inolvidables, como dije INOLVIDABLES, estoy completamente confusa, cada vez que lo veo me avergüenzo. ¿Como podría vivir con eso? Me he vuelto totalmente loca.

--Antes de entrar a la universidad--

--Dentro del carro, Andrés fue el primero en hablar-- ¿Te enteraste que llegará un nuevo profesor al colegio?.

-¿Enserio? No tenía ni la menor idea, ¿que tal, como es?, ¿Ya lo viste?, ¿Es guapo?.

-¿Como es que esa pequeña boca puede hacer tantas preguntas?.

- Es un Don --Dije mientras me reía--.

- No es la gran cosa, estará en algunas de tus clases asistiendo --Dijo un poco molesto--

- ¿Es joven? (Espero que sí) -- Pensé --.

- ¿Es lo único que te importa, no? -- Dijo mientras miraba por donde conducía--.

-Ay no te molestes, soy una chica joven con muchas oportunidades todavía. -- le guiñe el ojo--.

--la ignora y corto la conversación--.

Durante el viaje hacia la universidad, Isidora bajo la ventanilla disfrutaba la fría brisa que decoraba su cuerpo, mientras apreciaba el hermoso ámbar que rodeaba el lugar, Andrés la observaba de reojo, y sonreía sutilmente que ni siquiera se daba cuenta.

Después de unos minutos finalmente llegan a la universidad, Isidora se baja y se despide.

- Andrés, que tengas un buen día. -- le regala una sonrisa, se da la media vuelta y se va--.

-Debe estar feliz por que llegó un nuevo profesor -- Pensó en voz baja--.

Mientras que Andrés sentía que ella iba alejandose lentamente, sentía que de apoco iba ganando algo e iba perdiendo otra. Estuvo un momento con la mente en blanco, pero ya luego se puso en marcha hacia sus deberes. Había pasado cerca de 45 minutos y ya pronto iban a comenzar las clases, pero ninguno de los dos se había dado cuenta que al ingresar a la universidad había un alumno observando cómo ambos llegaban juntos en ese mismo momento.

--Al entrar a la sala de clases--

-Todos a sus asientos, les presentaré al nuevo profesor, que os ayudará con Arqueología.

Desde atrás se escuchaba el abucheo de los hombres, y adelante los gritos de las muchachas, como si él fuese una celebridad.

El nuevo profesor iba entrando hacia la sala y poco a poco se iba formando silencio. ¿Que habría formado ese silencio?

El nuevo profesor tomó la palabra:

-Mucho gusto estudiantes mi nombre es Esteban, espero que a partir de hoy nos llevemos bien.

Toda la gente quedo perpleja, creo no tan solo era guapo, si no que su voz también cautivó todos los corazones del salón (incluyendo hombres).

En el momento en que se estaba presentando, yo solo miraba hacia la ventanilla esperando a que llegase el final del día para pasar tiempo con Andrés, pero en el momento en que Esteban habló, giré automáticamente a observarlo, y nuestras miradas se encontraron.

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