Sakura Ökami

Prólogo

Prólogo

En el clan Ökami se respiraba la paz, era un clan de lobos, pero no cualquier lobos, eran lobos de luna, los mas fuertes entre los demonios, porque si señores y señoritas, eran un clan de lobos demonios, habían tomado forma humana porque estaban cansados de estar en constantes peleas sin sentido, habían propuesto un tratado de paz con los humanos que viven cerca a sus dominios, ellos los protegían de otros demonios, siempre y cuando se llevaran bien. No tenían problemas, así estuvieron unos miles de años, siempre renovando el tratado de paz con el nuevo jefe o líder del pequeño pueblo de humanos.

Pero hace poco se enteraron de que se estaba desatando una guerra civil a pocos kilómetros de sus dominios, no sabían con certeza que peleaban en esa guerra, pero tenían una idea, si estaban tan cerca, solo podía significar que buscaban a su retoño, no lo iban a permitir.

----- En el patio de la mansión principal del clan -----

Se va una hermosa mujer de cabello y ojos rojos, su pelo largo hasta las rodillas se merecía con el viento, observaba a una niña de cabellos rosas igualmente largos, jugando bajo un cerezo con un lobo negro de gran tamaño.

Saku-chan, es hora de la cena – le dice Hitomi a su hija – Tú también Akuma, o sino Yue se molestará – sonriendo –

Ya voy oka-san – le grita la niña montada en el lobo, los dos se veían alegres, eran tiempos de paz –

----- En la mansión -----

Mi hermoso cerezo, anda a darte un baño mientras esta lista la mesa – le dice un hombre de cabellos blancos, una cicatriz en el rostro y ojos amarillos, Yue, su padre –

Si oto-san, pero primero jijiji – se ríe juguetonamente mientras se lanza a los brazos de su padre – Ahora si me puedo bañar feliz – sale corriendo a su habitación –

Jajajajaja esta niña, nunca cambiará – se ríe fuertemente Yue mientras abraza a su esposa – Es igual a ti Hitomi –

No no no, que tiene cosas de ambos, no te hagas el rudo conmigo, que el lado cariñoso lo heredo de ti Yue-kun – le molesta sonriendo y dando un beso -

Que cosas dices mujer, no se de qué hablas – le dice gruñendo sonrojado, Akuma solo reía disimuladamente –

Así paso la cena, entre risas y bromas. Había llegado la noche y con ella la hora de dormir para la pequeña Sakura.

----- En la habitación de la pequeña -----

Buenas noches cerezo – le dicen sus padres arropándola y dándole un beso en la frente –

Buenas noches, Oto-san, Oka-san, descansen – sonriendo y dándoles un beso a cada uno –

Ya era cerca de media noche, cuando se escuchan gritos y se ven llamas en el patio de la mansión. Yue y Hitomi se despiertan exaltados por la bulla, no sabían que estaba pasando, solo esperaban que no hayan ido por su hija.

¿Qué carajos esta pasando? – Yue bramó a uno de sus guerreros

Están atacando el clan señor, la aldea que cuidamos esta totalmente devastada, no queda nadie con vida – dice alterado – Y no son humanos señor, al parecer un demonio está controlándolos

¿Cómo es eso posible? Habíamos reforzado las guardias, ordena a todos los que puedan pelear que defiendan el clan, no quiero a nadie más muerto – dice seriamente, su clan era su familia, no quería perder a nadie más

–

Yue y Hitomi se dirigieron a la habitación de su pequeño cerezo, entraron encontrándose a su pelirosa en la cama asustada, mientras Akuma estaba con ella en una posición de defensa por cualquier cosa.