99 días sin ti | MiChaeng. [Adaptación]

Día 13.

Debería haber mencionado la última vez que escribí que el día nueve terminamos de organizar tu funeral.

Cuatro días más tarde y aquí estoy, de pie vestida de negro al lado de un profundo agujero en el suelo, en donde te verás obligada a permanecer por el resto de la eternidad.

No fue un funeral a cajón abierto. Sabíamos lo mucho que detestabas que la gente te viera cuando no estabas presentable. Todos concordábamos con que sería probablemente lo mejor y, para ser honesta, no quería mirar tu rostro sabiendo que tus ojos no se volvería a abrir, que no sería capaz de volver a ver los bellísimos ojos color café que tenías.

Lloré de nuevo hoy. Mierda, lloré todos los días desde que te fuiste. Pero definitivamente este día fue mucho peor.

Cuando te dejaban dentro de ese enorme hueco casi corro hacia ellos para detenerlos. Nayeon, Jeongyeon y Jihyo tuvieron que sostenerme para que no lo hiciera mientras yo caía de rodillas al suelo.

No pude mantenerme fuerte en tu funeral, Mina. Realmente lo siento.

Debes estar decepcionada de mí. Sé que tú me enseñaste a que siempre tengo que ser fuerte, pero sólo era fuerte estando contigo. Ahora que ya no estás no sé qué hacer conmigo misma.

Fue un largo funeral, yo abracé a todos y cada uno de los miembros de tu familia mientras les decía que lo sentía y murmuraba cosas incoherentes entre todo mi lloriqueo.

Akira y Sachiko me abrazaron más tiempo que los demás mientras llorábamos juntos. Cuando me aparté, observé a Sachiko por un largo rato. Le dije que ustedes dos se parecían demasiado.

Demonios, Mina, sus ojos son idénticos a los tuyos.

Me dijo que cuidaría de mí, Minari. Aprecio mucho eso y me gustaría también poder cuidar de ella. Prometo que también cuidaré a tu papá, no sé cómo pero lo haré, de eso debes estar segura. De todas maneras, tu madre siempre ha sido como una segunda madre para mí.

Cuando la abracé ella susurró algo en mi oído que nunca en mi vida voy a olvidar, de verdad espero que no me haya mentido.

"Ella te amaba, ¿sabías?" Ella susurró y se apartó mostrándome una pequeña sonrisa. Se fue caminando lentamente antes de que pudiera responder, dejándome ahí, sin palabras, antes de que rompa en llanto otra vez.

Tzuyu tuvo que cargarme hasta el auto luego de que me resistí.

No quería dejarte, Minari.

No te quiero dejar.