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YoonGi habría mentido para sí mismo si no admitiera que no estaba sólo un poco preocupado cuando JiMin comenzó a llorar. Sí, sus primeros pensamientos fueron de pánico de que había hecho algo que dañara al omega, o que JiMin estaba teniendo dudas sobre su revelación emocional.

Tal vez era sólo que a JiMin le estaba molestando lo que hizo con él. Que quería ser mordido y reclamado por otro alfa que no era el padre de su cachorro. Esa fue la razón a la que YoonGi llegó cuando JiMin rápidamente lo besó entre las lágrimas, y dijo que estaba tan malditamente feliz que podía volar.

Tal vez había algo de felicidad en él, pero YoonGi también estaba sintiendo una gran cantidad de angustia, y deseaba que hubiera algo que pudiera hacer al respecto.

De todos modos, él no vio lágrimas en los ojos de JiMin en las siguientes dos semanas después de eso, y JiMin siempre estaba ansioso por YoonGi llevarlo a la cama, y de tener a YoonGi dándole la mordida de apareamiento. Al final, teniendo en cuenta que estaban prácticamente unidos por la cadera desde ese momento, tenía sentido para YoonGi ayudar a JiMin a mover sus pocas pertenencias a su habitación.

Lo que YoonGi estaba más que feliz de hacer. Nunca pensó que podría encontrar tanta felicidad después de tener tanto robado de él. El problema es que cada vez que terminaban de hacer el amor, JiMin estaba siempre mirándolo. Era una extraña clase de mirada que YoonGi no pudo identificar. No era una mirada o nada tipo firme con los ojos muy abiertos, pero había algo en él, como si JiMin estuviera buscando algo en YoonGi, o esperando algo.

El problema era que YoonGi no sabía lo que su nuevo compañero estaba esperando.

Los dolores de cabeza empeoraron también. Eran casi tan malos como cuando se despertó por primera vez en esta manada sin su memoria. Ellos se estaban volviendo bastante malos. Latiendo, doloroso, acero golpeando contra su cráneo. Él estaba tomando pastillas, y quería aumentar su dosis, pero SeokJin estaba siendo un idiota y le dijo que era demasiado peligroso. En verdad, él parecía decidido a hacer a YoonGi esperar por sus migrañas, como que quería apenas el poder a través de él o algo así.

― Esta bien, lo que sea ― YoonGi murmuró. ― Pero, ¿qué para el sueño? ¿Me puedes dar algo para ayudarme a dormir?

― No sabía que estabas teniendo problemas ― dije SeokJin, una sonrisa molesta en su rostro que le sugirió que lo había sospechado, y pensado que era a la vez fascinante y una buena cosa. ¿Así es como todos los curanderos eran?

― Sí, bueno, ¿puedes hacer algo por mí?

SeokJin sólo acercó una silla y se sentó. Tomó un bloc de notas de bolsillo y una de las muchas plumas que siempre estaba llevando alrededor con él, hizo clic en la parte superior, y luego la puso en un papel.

― Hablame de ello.

YoonGi parpadeó.

― ¿Eres un psiquiatra, también? ― Preguntó. SeokJin se encogió de hombros.

― Sin licencia, pero sé muy bien que hablar de estas cosas puede ayudar.

YoonGi no estaba en absoluto interesado en hablar de sus emociones o lo que estaba sintiendo. Le gustaba considerarse el tipo de alfa que era lo suficientemente bueno para escuchar los problemas de los demás, y consolarlos cuando era necesario.

Como cuando JiMin le había explicado que el alfa que lo había tomado de su ex compañero había arrancado al hombre aparte prácticamente frente a él antes de llevárselo y amenazarlo con abortar a su bebé si JiMin no cooperaba.

YoonGi lo había abrazado y besado las lágrimas de JiMin después de eso, y él quería cazar al alfa que había hecho eso y amenazó con esas cosas horribles y hacer al hombre implorar para morir.

Remember Me AlfaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora