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La voz de JiMin era angustiada y desesperada.

― ¡Damelo! ¡Déjame verlo!

― No ― dijo SungWoon, y YoonGi gruñó. 

Reconoció la voz. Él la reconoció. La misma que había susurrado al oído acerca de cómo él iba a reclamar a JiMin como compañero, poco después de terminar de pisar el cráneo de YoonGi.

Su lobo estaba allí, y las garras y los dientes de YoonGi estaban fuera mientras marchaba hacia la puerta de caoba, listo para arrancar las bisagras, pero se abrió antes que YoonGi pudiera tocarla.

SungWoon estaba allí. El imbécil era un poco más alto que YoonGi, lo que él odiaba, pero estaba sosteniendo a un niño que estaba gimiendo en su brazo izquierdo, vagamente envuelto en una manta de bebé, y los dos se enfrentaron.

―¡YoonGi! ― JiMin gritó, y YoonGi sólo vio a su compañero en una cama, con los brazos unidos, el rostro sudoroso y agotado antes que SungWoon cerrara la puerta.

― No creo que necesites ver eso ― SungWoon dijo, y él cerró la puerta con una llave maestra real, como si de alguna manera eso sería suficiente para detener a YoonGi de entrar en ese cuarto si realmente quería.

― Dame a mi compañero y a mi hijo ― dijo YoonGi, y él extendió los brazos por el bebé, que seguía llorando. Probablemente de hambre y de frío, ya que SungWoon ni siquiera se había tomado la molestia de lavar al pobre niño antes de envolverlo en la manta. ― ¡Damelo!

― ¿Cómo sabes que es un niño? ― Preguntó SungWoon, sonriendo un poco cuando él miró al niño. ― Yo solo veo un conjunto saludable de pulmones.

YoonGi se quejó un poco, pero él no respondió. SungWoon sabía el sexo del propio hijo de YoonGi y no por lo que este idiota lo había hecho, lo que enfureció a YoonGi.

― Es un muchacho, relajate ― SungWoon dijo, pero no hizo ningún esfuerzo para entregar al bebé. ― Creo que tú y yo deberíamos ir y hablar abajo. Somos lobos civilizados, creo que podemos hacer eso.

―¿Llamas secuestrar a un omega y tratar de obligarlo a casarse contigo civilizado? ― Preguntó YoonGi. ― Tú no me retaste aún correctamente. Sólo me atacaste. Incluso por tus estándares de mierda, ese fue un mal movimiento.

― Mal movimiento, pero no es ilegal, y no comiences con las nuevas leyes. Que estúpidos humanos y algunos alfas pusieron en práctica después de las guerras Lobo. Ciertamente nunca concordé con nada de eso.

― No importa. Todavía estas llevando una manada ilegal, y ese es mi compañero, y éste es mi hijo.

― Qué tal si apenas golpeo al niño en el suelo. ¿Eso haría que te calles la boca durante diez segundos?

YoonGi se volvió inmediatamente de boca cerrada, y todo tipo de pensamientos de pánico corrían por su cabeza mientras miraba a su cachorro. ¿Será que SungWoon haría algo así? El bebé no era de SungWoon, no es como si YoonGi fuera a esperar que el hombre fuera excesivamente amable, pero maldita sea, ¡sólo nació hace unos minutos!

― Puedo verlo en tus ojos. Estas preguntándote si yo haría eso ― dijo SungWoon. ― No me malinterpretes, no me gustaría hacerlo. Esto sólo hará que sea más difícil para mí ganar la cooperación de JiMin si supiera que yo maté a su cachorro. Incluso si ya mintió para mí, yo probablemente sólo debo acabar de una vez, no soy un monstruo completo.

YoonGi dejó de escuchar después de que SungWoon dijo que no quería hacerlo, que incluso dio a entender que lo haría, si YoonGi no juega sus cartas correctas.

― ¿Qué quieres? ― Preguntó YoonGi.

― Quiero a JiMin. Lo gané en esta batalla, por la antigua ley, él es mío.

Remember Me AlfaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora