LOU MY CAT

TRES

Camino apresuradamente por los pasillos hasta el pequeño cuarto del conserje, por suerte la mayoría de los alumnos estaban en descanso y podría pasar desapercibido.

No lo creía, ¿como es que no se había dado cuenta? Él era Harry Styles, la persona con la que peleó durante gran parte de su infancia, y peor aún, la persona de la que se habia enamorado de niño.

Recordaba cada pelea que tuvo con el rizado durante su época escolar, siempre discutiendo por cosas simples hasta por cosas complicadas, nunca pudo llevarse bien con él, aunque tampoco lo intentó, y es que Harry Styles era un presumido de lo peor, llamaba demasiado la atención de todo mundo y eso molestaba a Louis, que en esos años de su vida era visto como un patito feo por todos los demás.

Estaba realmente agradecido con su pubertad al ser tan hermoso ahora.

Cuando el rumor de que el pequeño ojiazul sentía atracción por Harry, él se portó como un verdadero idiota. No es como que esperara un trato especial por eso ya que, aunque se había enamorado, todavía lo odiaba y aún peor cuando Louis volvió con un ojo morado a casa por su culpa.

Quería mantener la distancia con Harry, porque nunca va a olvidar que  su última interacción con él fue cuando le regaló ese golpe en su rostro.

Dio vuelta en el pasillo y encontró por fin la pequeña bodega donde se escondía cuando tenía este tipo de problemas. Tomó el picaporte con rapidez, abrió y se apresuró a entrar, cerrando tras de sí.

-Joder.-Soltó una vez se encontró en la tranquila oscuridad del pequeño cuarto, recargó la espalda en la puerta y mantuvo el rostro hacia arriba, tomando grandes cantidades de aire para disipar un poco la ansiedad y el pánico que hace tan solo unos momentos inundaba su cuerpo.

Tomó el suéter que aún colgaba de su cabeza y tiró de el con coraje, dejando sus esponjosas y castañas orejas a la vista. Se deslizó hasta el suelo, no sin antes poner seguro a la puerta, y suspiró con agotamiento.

Jamás había estado tan expuesto, ni siquiera cuando un perro lo perseguía y terminaba hecho un minino total para huir.

Casi toda la escuela estaba en el comedor en ese momento, Styles pudo haberlo visto de no ser porque sus amigos actuaron rápido y le ayudaron a salir de esa peligrosa situación.

Les debía una, muy grande y estaba pensando seriamente en pagarle clases de actuación a Niall, aunque fue muy útil también.

Sacó su celular, alumbrando con el flash de la cámara frontal y enfocó la misma en sus ojos, estos ya habían vuelto a la normalidad. Suspiró aliviado, palpando su cabeza y sintió que sus orejas estaban presentes todavía, se resignó a esperar.

Vio la hora antes de bloquear su teléfono, faltaban más de 2 horas para que finalizara el día y debía entrar a su próxima clase en 20 minutos, las intrusas tenían que desaparecer antes de que este tiempo terminara, por suerte tenia a Zayn como compañero de aula y esté se encargaría de inventar una excusa para no perder su asistencia.

Las orejas castañas de Louis se enderezaron un poco más de lo que se encontraban normalmente al escuchar ligeros golpeteos en el ducto cuadrado de ventilación, para su mala suerte se encontraba justo debajo de uno, uno que era lo suficientemente grande para que una maldita persona saliera por ahí, pero esperaba de verdad no tener tanta suerte de mierda en un solo día.

Se quedó estático en el suelo, aún alerta, ¿alguien lo había seguido? ¿Styles le habrá seguido el rastro después de que huyó de la cafetería? Sin duda alguna lo creía capaz de eso y más.

No, no iba a dejar que lo tomarán por sorpresa.

Se levantó cuando el golpeteo se percibía cada vez más cerca del acceso que tenía justo sobre su cabeza, miró a su alrededor buscando algo con que defenderse y lo primero que saltó a su vista fue una pala que era utilizada para las actividades en el jardín.